Una maraña de miedos y prejuicios impiden a las parejas
explorar una práctica antigua.
Muchas mujeres ignoran los
misterios del cunnilingus
Daniela llega al consultorio para soltar una inquietud que le asalta en las noches, inmediatamente después de haber librado una batalla placentera: oculta una preferencia absoluta hacia la lengua de su marido en detrimento de su pene, lo que le ha traído conflictos y discusiones.
“Me excita tanto, que tenemos que tapar las rendijas de la puerta y ventanas de la habitación para que los vecinos no crean que me están matando”, refiere esta comerciante, de 29 años de edad, blindada con un gran sentido del humor que le permite describir hasta poner la piel de gallina a quienes oyen su relato las sensaciones que de esta manera le prodiga su pareja.
“A uno le extraña que esta técnica de obtención de placer sea tan antigua y al mismo tiempo tan desconocida”, responde Carmen Nieves Tremont, médica y sexóloga, cuya especialidad desde hace 18 años -escuchar a parejas con conflictos-, la dota de una paciencia que pasa por encima de los asombros.
Cierto. Hay quienes la utilizan para insultar y hablar pistoladas en cadenas televisivas, pero los más privilegiados saben que la lengua representa, además del compañero de primera fila a la hora de comer, un instrumento infalible para brindar y alcanzar placer.
Bésame, bésame mucho. “El cunnilingus constituye lo que normalmente denominamos sexo oral para la mujer. Una experiencia única, no tanto por lo placentero sino porque en muchos casos abona el camino al coito, lo que vendría a ser la segunda fase del goce sexual”, apunta Tremont, diferenciándola de la felación o sexo oral para el hombre.
Manjar preferido del Kamasutra, la biblia del sexo lo describe como “el acto sublime” de usar la lengua y la boca para chupar y lamer la zona vaginal y el clítoris. Se ha dicho que las mujeres que disfrutan con el sexo oral generan un vínculo emocional gracias a la intimidad del acto, además de sensaciones a veces más placenteras que la penetración.
Un estudio realizado en 2003 por The Women’s Sexual Health Foundation, de Estados Unidos, con preguntas sobre hábitos sexuales a 2.130 mujeres en universidades de Nueva York y Pensilvania, señala que apenas 37% de las consultadas incluían como menú principal el sexo oral en sus relaciones.
Empero, el mismo trabajo halló que 97% de ese 37% de chicas que amaban tal experiencia confesaban obtener “los mejores orgasmos de su vida” a través del cunnilingus.
Una leyenda extendida, no certificada por historiadores, sostiene que el sexo oral era practicado en la antigua Grecia y Egipto. Se dice que Cleopatra desarrolló una técnica con trucos que igual elevaba al punto más alto del placer a mujeres y hombres. Tremont apunta un hecho curioso alrededor del cunnilingus: una maraña de miedos y prejuicios se interponen en muchos hombres para abordar esta práctica, aún cuando se trate de hacérselo a su pareja.
“Es natural que así ocurra porque la vagina llega a convertirse, en una mujer que es negligente con la higiene, en un depósito de gérmenes”.
Apunta que algunos tipos de herpes y VPH son fáciles de contagiarse por esa vía, aunque advierte que “hoy es muy difícil que una mujer no le preste atención a una de las zonas más preciadas de su organismo”.
Una vez vencidos los temores, el cunnilingus es prácticamente como pasar por la casilla de Go en un juego de Monopolio, y tener todavía el privilegio de otro turno para lanzar los dados.
Tremont se atreve a brindar un consejo a los hombres y mujeres que, como en las fiestas romanas, saludan con el “ave, cesar, los que vamos a morir de placer te saludamos”: una vulva no es igual a otra. “Depende de la conformación física de la mujer y de que su clítoris esté más o menos visible, si podrá alcanzar ese sumum del placer”.
En todo caso, como lo testimonia la gratificada Daniela, la reacción de placer puede confirmar que se está en el lugar adecuado. Si no se está seguro, haga como quien está perdido en una ciudad desconocida y no dispone de un GPS: pregunte hasta que ambos lleguen a la zona más excelsa del placer.
El Gral. Orlando Rodríguez GN fue pidió pidio en Dic. de 2009 la
intervención de PoliCarabobo actual jefe Cdo Reg Nº 2 de la GNB
10 custodios están retenidos
por la fuga de Fraibert Velasco
El general Orlando Rodríguez, jefe del Comando Regional Número Dos de la Guardia Nacional, organismo responsable de la seguridad externa de la cárcel de Tocuyito, confirmó que, debido a la fuga el pasado domingo del líder de la banda delictiva “los Invisibles”, Fraiberth Velasco Vargas (27), fue ordenada la destitución del director del Centro Penitenciario de Carabobo (La Mínima), Evert Hernández.
El jefe militar informó que el cargo de Hernández fue asumido por Miguel Jiménez, antiguo jefe de Custodios del Ministerio del Interior y Justicia.
Por este mismo caso se encuentran detenidos 10 funcionarios adscritos a la Dirección Nacional de Custodia del Ministerio para Relaciones Interiores y Justicia, quienes todavía están a la espera de que se realice la audiencia de presentación en los tribunales donde serán imputados por delitos tipificados en el Código Penal vigente y la Ley Orgánica Contra la Delincuencia Organizada.
Trascendió que la fuga de Velasco Vargas originó la realización de operativos y requisas en la Mínima de Tocuyito por parte de efectivos del Respuesta Inmediata Carcelaria (ERIC), instancia adscrita a la Guardia Nacional.
En Carabobo, Aragua, Lara y entidades fronterizas realizan una serie de allanamientos y dispositivos en búsqueda del delincuente fugado.
viernes 3 de septiembre de 2010
Judicial | Sucesos
EL NACIONAL
Las mujeres suelen soñar con actores y los hombres,
con conocidas.
Las poluciones nocturnas facilitan
la irrigación de los órganos sexuales
Pese a que lo disfruta plenamente, Carlos M. terminó, alarmado, de visita en la consulta médica. De madrugada es “víctima” de una emboscada onírica durante la fase de sueño profundo, o periodo MOR (movimientos oculares rápidos), que lo deja exhausto y satisfecho, pero con la molestia de cambiar de piyamas en mitad de la noche.
“Antes de acudir al sexólogo, esto era motivo de preocupación porque no sabía a qué atribuírselo: si a mi reciente divorcio o a algún trastorno mental desconocido”, dice el entrenador deportivo cuyos 30 años de edad al parecer generan un torrente de testosteronas que se traduce en descargas eléctricas que desembocan en la eyaculación.
Cuando despierta, las sábanas de Carlos quedan, como dice la cuña del detergente: no aptas para pasar la prueba de la blancura.
“Lo primero que se puede afirmar es que se trata de una buena señal de salud sexual”, lo tranquiliza el psiquiatra Rómulo Aponte, quien dirige la Unidad de Estudios y Terapia Cognitiva y Sexual, en el Centro Profesional Santa Paula, en Caracas.
La explicación no es compleja: durante el sueño se registra la fase llamada periodo MOR.
En un sueño normal de 8 horas ocurren de 6 a 8 períodos MOR. Cada período dura 10 minutos y se caracteriza por ser un estado de sueño profundo, de relajación con movimientos oculares. Es allí donde se experimentan los sueños.
“En esa fase sobrevienen descargas eléctricas en zonas del cerebro, en el sistema lúdico, donde se reciben núcleos que se relacionan con la función sexual, y esa activación provoca erección del pene y lubricación de la vagina”, señala Aponte.
Agrega que las erecciones tienen como finalidad oxigenar el pene y, en caso de la mujer, activar el clítoris, “porque esos órganos están en receso y con muy poca irrigación sanguínea; de modo que la fase MOR sirve para conducir sangre y oxigenar los genitales”. Incluso, en casos de hombres que padecen disfunción eréctil se registran tales erecciones recién saliendo de la fase MOR, lo que resulta una buena noticia para su salud sexual.
A ese episodio se le denomina “polución nocturna”, y es de tan vieja data su estudio que Sigmund Freud para quien todos los sueños eran sexuales decía que apenas 1% de las experiencias oníricas terminaba en orgasmo. Más tarde, Alfred Kinsey quien en la década de los cincuenta conmocionó al mundo con estudios sobre la sexualidad de los estadounidenses, reveló que 70% de las mujeres y casi 90% de los hombres tenían sueños eróticos; pero 83% de los varones llegan a la eyaculación, mientras que 37% de las mujeres dijeron haber experimentado orgasmos durante el sueño.
Entonces se especulaba acerca del lado perverso del ser humano que aprovecha la nocturnidad para despertar y hacer sus travesuras. Este tabú de las poluciones nocturnas como trastorno sería luego erradicado.
“Al contrario esgrime Aponte los sueños húmedos son manifestaciones de salud sexual sana; inclusive, pueden ser indicadores de buenos niveles de hormonas sexuales en el torrente sanguíneo, y por tanto no requiere de tratamiento ni preocupación alguna”.
Brat Pitt en tu cama:
Investigaciones indican que las poluciones nocturnas se manifiestan desde los 12 o 13 años aunque la edad puede variar, y en algunos casos adelantarse hasta los 9 años. Del otro extremo, se sabe de hombres con más de 80 años que las siguen experimentando. En raras ocasiones se presentan más de una vez por noche, y ocurre igual en hombres y mujeres que viven solos o en pareja; tengan o no relaciones sexuales habituales.
Aunque nuevos estudios en Estados Unidos afirman que 83% de los hombres confiesa haber tenido polución nocturna alguna vez en su vida, del lado femenino las cifras son poco confiables debido al prejuicio que implica confesarlo.
Algunas mujeres prefieren callar y disfrutarlo en secreto:
En el caso de la mujer, no se trata de una polución como en el hombre, pues no genera líquido seminal, pero sí tendrá humedad originada por las glándulas de Eskene y Bartholin, ubicadas a cada lado de los labios vaginales menores y que cumplen la función de producir fluido cuando hay excitación.
Importa saber que las mujeres tienen tantos sueños sexuales como los hombres.
La diferencia está en lo que sueñan:
Algunos sueños húmedos muy comunes, tanto en hombres como en mujeres, son practicar sexo oral o anal.
Los hombres sueñan con sus esposas y familiares cercanos (cuñadas, amigas de su pareja); en la mujer son más atrevidos, y se arrojan en brazos de actores, jefes o incluso personas que detestan.
El asunto es que, al final, hombres y mujeres lo disfrutan. Como Eddie Santiago en su canción, ambos repiten: “Hasta en sueños he creído tenerte devorándome, y he mojado mis sábanas blancas recordándote”.
Ordenó además la devolución del dinero a quienes
hayan comprado el producto con el aumento.
Tambien pidió la destitución inmediata del
viceministro de Petroquímica Clark Inciarte
El primer mandatario nacional, Hugo Chávez, aseguró que no fue consultado en esa decisión y pidió la destitución inmediata del viceministro de Petroquímica, Clark Inciarte, quien también es presidente de Pequiven.
El incremento del 40% en resinas plásticas acordado en el viceministerio de Petroquímica, fue dejado sin efecto este miércoles en horas de la noche por el presidente de la República, Hugo Chávez durante la entrega de microcréditos a pequeños y medianos empresarios en el Palacio de Miraflores.
El primer mandatario nacional aseguró que no fue consultado por esa decisión y pidió la destitución inmediata del viceministro de Petroquímica, Clark Inciarte, quien también es presidente de Pequiven. Ordenó además la devolución del dinero a quienes hayan comprado el producto con el incremento.
Asimismo, instó al vicepresidente Elías Jaua, a realizar un recordatorio dirigido a los ministros, viceministros y demás altos funcionarios que integran su Gobierno, para que éstos no tomen decisiones inconsultas. “Elías recuérdeselo, y el que haga algo parecido de inmediato debe ser destituido de su cargo. Porque aquí, o hay Gobierno o no hay Gobierno”.
Chávez explicó que para realizar cualquier ajuste de precios, el solicitante del incremento debe debatirlo con el ministro de Planificación y Economía, Jorge Giordani y luego firmar un documento denominado Cuenta, el cual debe ser presentado al presidente de la República, para que éste lo firme. “Esto no se puede permitir y yo no lo voy a permitir. Entonces, esos incrementos quedan sin efectos”.
“Para hacer un pequeño ajuste aunque sea del 1 por ciento tenemos que firmar ellos y yo. ¿Ahora, cómo va estar este señor (viceministro) incrementando los precios de las resinas plásticas en un 40 por ciento, porque se reunieron en un viceministerio?”, se preguntó Chávez visiblemente molesto.
La nueva y más peligrosa infiltración del autor de “Diario de un skin”.
Antonio Salas presenta su
nuevo trabajo “El Palestino”
Los últimos seis años,desde los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004, este periodista de investigación ha sido un objetivo más de los servicios de inteligencia de medio mundo que luchan contra los integristas islámicos. Antonio salas ha vivido bajo la identidad de Muhammad Abdallah, guerrero mudahin.
Temas de Hoy presenta el resultado de este trabajo de investigación. “El Palestino” es un relato en el que Hamas, ETA, Hizbullah, las ramas más extremistas de la yihad quedan retratadas por un hombre que, sencilla y temerariamente, se ha hecho pasar por uno de ellos.
Salas, tras haber sobrevivido a esta investigación, reconoce que infiltrarse en círculos neonazis (Diario de un Skin) o
Antonio Salas tuvo claro cuál iba a ser su nueva investigación a las pocas horas de los atentados en Madrid el 11 de marzo de 2004. Ese año y el siguiente estudió árabe y se matriculó en todos los cursos que encontró en España sobre terrorismo.
Y, según narra El Mundo en su crónica El falso palestino que se hizo terrorista en Venezuela, el siguiente de paso de Salas fue crearse una identidad falsa que construyo entre Palestina y Venezuela. Cuenta que su marcado acento latino al hablar árabe le obligaron a buscar parte de sus raíces en continente americano.
A partir de ese momento y durante los siguientes tres años ha ido ascendiendo en el entorno terrorista hasta convertirse en un guerrero muyahin más.
El relato de El Palestino nos trastada desde los áridos desiertos africanos, pasando por las selvas de América Latina, tras la pista del terrorismo internacional en España, Israel, Líbano, Marruecos, Portugal, Venezuela, Siria, Mauritania, Palestina, Egipto, Suecia y Jordania, Túnez.
LA CONEXIÓN ETA – VENEZUELA:
Tras la polémica que hubo cuando Rubalcaba reconoció que ETA tiene infraestructura en Venezuela, este libro de Antonio Salas rescatará este asuntos a los titulares de la prensa española. Campos de entrenamiento terrorista en Venezuela donde él mismo se ha formado o imágenes de los lugares dónde ETA ocultaba a sus miembros en aquel país son datos incluidos este trabajo periodístico.
Que cada nueva investigación publicada por Antonio Salas sea sinónimo de titulares para los medios de comunicación y apertura de nuevas causas para la Justicia es casi una tradición. Sus dos trabajos anteriores ya han sido utilizados como pruebas en procesos como la que terminó con la condena a Hammerskin España, y han promovido actuaciones políticas como la del Gobierno mexicano cuando ordenó la investigación del tráfico de niñas chiapanecas.
Miguel Pato, 24 de mayo de 2010 Periodista Digital
Antonio Salas, cuándo estaba infiltrado. (Foto) El autor de ‘Diario de un skin’ publica ‘El Palestino,’ un libro en el que relata su vida durante seis años infiltrado en las redes terroristas internacionales.
“Si no vives 24 horas al día con
esta identidad, no funciona”
Antonio Salas, autor de ‘Diario de un Skin’ y ‘El año que trafiqué con mujeres’, recibe a Qué! en un pequeño cuarto. Acaba de publicar ‘El Palestino’, donde relata su vivencia como Muhammad Abdallah, un ficticio venezolano de origen palestino que entra de lleno en las redes del terrorismo ‘yihaidista’ internacional.
Salas lleva un gorro pese al calor que hace, grandes y oscuras gafas de sol y conserva la barba estilo árabe que luce desde que decidió comenzar este titánico proyecto, justo después de los atentados del 11-M de Madrid.
“Al principio, y como se decía que había sido ETA, decidí infiltrarme en la banda. Me apunté a euskera y me fui al País Vasco. Pero después, cuando se conoció la versión islamista, comencé a gestar este proyecto”, relata.
Salas aprendió árabe, se estudió El Corán transcribiéndolo a mano (“era un golpe de efecto muy bueno para mis infiltraciones el soltar citas del Corán de vez en cuando”, puntualiza) y hasta tuvo que circuncidarse: “Un día casi me descubren en unos baños árabes”.
Durante los seis años que duró la investigación, Antonio Salas, pseudónimo de este periodista de investigación, entró en contacto con terroristas muyaidines (terroristas islamistas), fedaiyines (guerreros árabes laicos), miembros de la resistencia palestina, miembros de Hezbolá, guerrilleros venezolanos, guerrilleros de las FARC y hasta etarras exiliados en Caracas.
“Todos tienen en común que creen que las armas son una opción lícita, una elección para llevar a cabo sus ideas y objetivos. Por eso se apoyan entre sí. Además, se necesitan: intercambian munición, detonadores, logística, adiestramiento, contactos, etc…”, relata Salas. “Lo único que les une es el arma, no la ideología”.
“Cuando me llamó ‘El Chacal’, estaba tan ‘acojonado’ que se me cayó el móvil”
El trabajo de Salas pone en riesgo su vida. Su verdadera identidad es desconocida, así como su origen y su ubicación. “Ni tengo muchos huevos, ni estoy loco, paso muchísimo miedo”.
“¿Las situaciones en las que más me he ‘acojonado’? Pues me puse nerviosísimo cuando me llamó a mi móvil por primera vez el célebre terrorista Carlos ‘El Chacal’. Me llamó una vez pero no me dio tiempo a coger el teléfono, así que me dejó un mensaje en el buzón: ‘Soy El Chacal. Te tenían que haber dicho que te iba a llamar ahora. Responde’. Eso me puso más nervioso aún, así que cuando llamó de nuevo, se me cayó el teléfono. Madre mía, ¿qué clase de periodista soy?, me pregunté. Lo peor vino cuando me llamó por tercera vez. Tenía tanto miedo que me equivoqué… ¡y le colgué!”, Salas no puede evitar reírse.
“No me volvió a llamar hasta el día siguiente”. “Otro momento de mucho miedo -continúa- fue cuando me encontré con los vascos (etarras) en Caracas. También cuando me registró en el aeropuerto del Líbano Hezbolá o cuando hizo lo mismo el Mossad en Israel”.
Salas no cree que se trate de inconsciencia el embarcarse en este proyecto. “Yo no hice ni la mili y de pronto me encontré con un AK-47 entre las manos. Pero es un proceso. Vas consiguiendo cosas, vas dando pasos y el instinto periodístico te hace avanzar. Juro que no es tan difícil, sólo hay que ir haciendo los contactos adecuados”, expresa.
De su valiosa y amplísima experiencia tras estar seis años infiltrado, Salas saca algunas conclusiones: “En Occidente existe islamofobia. Yo mismo la he sufrido al venir a España caracterizado como Abdallah. El problema es que metemos todo el Islam en el mismo saco: nos creemos que todos son terroristas o que son violentos. La realidad es que ni siquiera todos los musulmanes son árabes (ni siquiera son mayoría), ni todos los árabes son radicales, ni todos los radicales son terroristas”.
“Deberíamos ser más responsables con esto para que el mundo deje de polarizarse y dejemos de verlos con desconfianza, porque el problema es que en Oriente Medio está pasando lo mismo, y ven a todos los cristianos iguales: como machistas, sucios y violentos contra ellos. Deberíamos empezar a trabajar en la integración y en la comprensión porque si hay algo innegable es la expansión imparable del Islam, nos guste o no, lo queramos o no, la realidad es que las iglesias cada vez están más vacías y las mezquitas cada vez más llenas”, explica.
“ETA, Y TOCO MADERA, ESTÁ ACABADA”
Otra de las conclusiones que Salas extrae es la actual debilidad de ETA. El periodista entró en contacto con varios etarras en Caracas. “Allí los guerrilleros admiran a ETA, les fascina que sean el último grupo armado de Europa. Y ETA les vende una propaganda en la que les dicen que la situación de Euskadi es como la de Palestina. Por eso son bien recibidos entre las comunidades con cultura guerrillera”, analiza. “Pero la realidad -continúa- es que a día de hoy, y toco madera, ETA está acabada y tiene muy cerca su final. Si yo, que no soy nadie, he conseguido fotografiar al etarra Antonio Cubillas, ¿cómo no van a poder acabar con ellos? No tienen sentido, son el único grupo terrorista que padece Europa y caerán por su propio peso”, expresa.
Salas lamenta la instrumentalización política que, en ocasiones, se hace de su trabajo: “Los contactos que he presenciado en Venezuela entre FARC, guerrilleros venezolanos, islamistas y ETA son conexiones entre grupos armados que se apoyan, pero no es la política oficial de Chávez”.
“Hay que entender que en Venezuela hay una cultura de decenas de años de los grupos guerrilleros, y por eso están presentes en muchos ámbitos de la vida pública. Pero eso no significa que cuenten con el respaldo ni la financiación de un Gobierno”.
“Lo mismo pasa con el terrorismo”, prosigue. “No existe un concepto internacionalmente unánime para definirlo. Para Europa el terrorismo es una cosa, pero para los palestinos el terrorismo es lo que hace el Ejército de Israel y para las FARC, EEUU es un estado terrorista”. En su lucha contra los prejuicios, Salas insiste en referirse a la resistencia palestina.
El autor admite que cuando comenzó la investigación “no tenía ni idea de nada de esto, y me sorprendió el laicisimo de la resistencia palestina por parte de Al Fatah. Creía que eran islamistas pero su causa es nacionalista, no religiosa”.
“De hecho, cuando conversé con uno de los líderes de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa (brazo armado del partido Al Fatah) me descolocó completamente cuando me dijo que era cristiano. Ellos luchan por Palestina, no por el Islam”.
Salas se despide rogando un refresco para beber después de la intensa charla y admitiendo que la promoción del libro “es un tute”. Su identidad seguirá siendo desconocida y también su ubicación. Pero no su reconocimiento: “Si este libro sirve para que un solo adolescente árabe decida no arrojarse a la ‘yihad’, el esfuerzo habrá merecido la pena”.
Periodista participó en campos de entrenamiento
presuntamente ubicados en territorio venezolano
El canal español Antena 3 reseñó el trabajo de un periodistaque se infiltró en redes terroristas islámicas. Ha vivido durante 6 años en la piel de un terrorista.
Tuvo que aprender árabe y estudiar el Corán. Esta vez, el periodista Antonio Salas se ha hecho pasar por un musulmán nacido en Venezuela decidido a matar infieles en nombre de Alá. Ha recogido todas esas vivvencias en un libro El Palestino además lo grabó todo con cámara oculta.
Mohamed Abdalá es el muyahidín en el que se ha convertido el periodista Antonio Salas para infiltrarse durante seis años en el mundo de las organizaciones terroristas.
Durante este tiempo, ha viajado por varios países de Oriente Próximo, y el Magreb, ha estudiado árabe, el Corán, e incluso se ha circuncidado porque estuvieron a punto de descubrirle en unos baños públicos.
Pero fue en Venezuela donde recibió su bautismo de fuego. Asegura que sólo alrededor de Caracas hay seis campos de adiestramiento terrorista. Allí ha aprendido a disparar todo tipo de armas. Y ha coincidido con miembros de las FARC y de ETA.
Los atentados del 11 de marzo en Madrid marcaron el inicio de este nuevo libro El Palestino para el autor de Diario de un skin o El año que trafiqué con mujeres. Desde un lugar incierto, mientras espera con inquietud la salida de esta nueva obra el próximo martes, Antonio Salas borra de internet las huellas de sus últimos seis años de vida.
Ni se llama Antonio Salas ni pudo dar
explicaciones durante seis años
El hombre bajo este seudónimo es un conocido periodista de investigación implicado en un proyecto que le ha llevado por trece países y cuatro continentes. Todo para convertirse en uno más dentro de varias organizaciones criminales.
En el primer capítulo de El Palestino,cuyas primeras páginas publicamos aquí, el autor ofrece su gratitud: “A los amigos que han sabido comprender mis ausencias, durante meses, sin darles explicaciones y han seguido estando aquí. A los que nos las han comprendido, mis disculpas. Ésta es la explicación que esperaban”.
La primera vez que la vida de Antonio Salas corrió peligro fue en 2003, cuando publicó Diario de un skin. Es la historia de un reportero que se infiltra durante casi un año en el movimiento neonazi. Es la historia del skin llamado Tiger88. Es la historia de Antonio Salas.
Un año más tarde, publica una nueva investigación, esta vez sobre la trata de blancas: El año que trafiqué con mujeres. Este libro se centra en las redes internacionales de tráfico de niñas y mujeres para su explotación sexual. Las amenazas vuelven a sucederse.
Y a la tercera desaparece:
Seis años más tarde, Antonio Salas vuelve a enfrentarse a nuevos enemigos. A quienes le consideraron su hermano en la lucha, a sus confidentes en distintos grupos terroristas, a quienes le veían como uno de ellos. Es la historia de El Palestino.
EXORDIO: Así como lo insinuó Urosa, nuestro insigne Cardenal, y lo ratificó Fidel a la TV internacional, eso que llaman socialismo no es más que un comunismo común horroso y vulgar. Como prueba de ello y en su tierra natal, se declaró comunista, nada menos y nada mas, que su mismísimo hermano, el gobernador Adán.
Ha lanzado un decreto que nos dejó sin hablá, en el que prohíbe se construyan escuelas clínicas u hospital, que vengan de los privados o de cualquier otro lugar, porque los que tiene el gobierno son ejemplo singular y ellos no necesitan que venga ningún privado a ayudá a darle salud al pueblo y mucho menos educación a esta sociedad.
¡Ah! Claro, me pregunto si sus papas, si sus hijos u algún otro familiar, cuando les pega una gripe o el dengue ese que por ahí dá, se van corriendo al Barrio Adentro o a nuestro único hospital. Noooo, que va camarita, tenemos que hacer memoria y ponernos a recordá que cuando al viejito maestro en una de esas rabias, que Nachito desde sute le dá, se le sobrevino en el cerebro una extraña enfermedá, todos salieron corriendo, como ganao en la maná, para las Clínicas Caracas, ¡si!, esa que vale una milloná.
Preguntele a doña Elena pa donde se fue a chuceá para ponese bonita y echase una estirá, que me la puso de a 15 en tan buena remendá que no creo fue en Barrio Adentro o en tu piazo de hospital. Y recuérdese adancito que cuando a su querido hijito un dolor en la barriga le dá, usted sale ajilaito pa´ la Clinica privada de su amigo Osuná, como aquel 2 de Diciembre cuando ganó la democracia y la ansiada libertá en la que una que mientan peritonitis a su sutico querido casi lo manda al mas allá.
Claro, lo que pasa es que dicen, los que son de mal hablá, que no se la pasa en Barinas y mucho menos la cara dá y han llegado los mal hablantes a confundirlo na má, que con la de una cerveza que la llaman regioná. Parece que no ha ido al Razzeti por nada mas dejá, ni ha visto las parturientas, las que van a ser mamá, haciendo colas en emergencia, con la cara revirá, de los dolores de parto que no los pueden aguantá. Si se paseara hacia adentro se podría cerciorá, que hay enfermo en los pasillos, como ganao en corral, victimas de enfermedades y de la inseguridad, picaos de mucha plaga que de nuevo ha salido por hayá y de los tantos malandros que tirotean sin piedá hasta a las muchachitas que vienen de por hay lejos a este país a jugá.
Esto es el colmo camarita, no solo que ser rico es malo o no se que otra pendejá, pero esto de que “construir es malo” es de loco de verdá. ¿No entiende que esa jodia del comunismo no sirve pero pa´ná.? ¿Qué fracasó en todo el mundo y que tiene a Cuba arruiná? Que ya los chinos y los rusos la tuvieron que cambiá porque tenían sufriendo a su colectividá, que pedían democracia y aclamaban libertá para construir lo que querían y una platica ganá, pa´ el arrocito en la mesa y el michito pa´entoná. Ahora lo que menos entiendo y no entenderé jamás es eso de que las escuelas no pueden ser privá. Debe ser que están pensando que somos brutos no má, con esa Ley de Educación que acaban de promulgá, yo no mando un hijo mio a una escuela estatal, ni que me lo pinten de blanco y me lo reciban, no jile, con el himno nacional. Pa´ve si le lavan el cerebro y lo ponen a pensá, que son ese Ché Guevara o el loco ese de Irán, que quiere hacer una bomba que a todos nos va a matá, o ese socialismo o muerte del que habla el militar, que le pongan un uniforme, que lo pongan a marchá, que me lo metan en las milicias o no se que otra pendejá, que se le ocurra a un loco de esos y le de una puntá, de convertirlo en guerrillero y mandárselo a las FARC. No que va amigo mio no lo podemos dejá, que vayan para su escuela y para su piazo e hospital los que se crean rojos o rojitos nada ma y todos los que queremos vivir democracia y en nuestra libertad que nos dejen construir escuelas y nuestros centro asistencial. Se lo canto, se lo rimo en lenguaje singular a ver si entienden llanero y la prosa coloquial de lo que siente el veguero y la prole popular que pide grita y exige Democracia, democracia y la bonita ¡Libertad!
RACUMIN EN MIRAFLORES: Me informan mis detectives que luego del lamentable deceso del diputado Tascón y de mi General Muller Rojas, que en paz descansen, se encuentra igualmente en peligro de muerte con un cáncer terminal el Capitán de Navió Rodriguez Chacín y se encuentra recluido en la Clínica (privada) El Avila, de la ciudad de Caracas, nuestros deseos por su pronta recuperación.
AMARREN SUS LOCOS: Desde el pueblo donde Nacho es Alcalde sentimental me informan que hace unos meses atrás el gobierno compró en un chanchullo raro la casa que pertenecía a Juan Urquijo, un connotado empresario de esta zona que emigró del país como están haciendo todos los inmigrantes que años atrás llegaron a Venezuela y cocinaron fortunas, todo producto de la persecución que tiene el régimen en contra de los que construyen algo en este país. Lo cierto es que en esa casa ubicada en la cochinilla se creó un centro de la Misión Negra Hipólita, una excelente iniciativa de este gobierno para atender drogadictos, canapiares, malvivientes y locos que deambulen por las calles. Muy bien, pero los vecinos gritan “Que amarren sus locos”, dicen que ahí habitan como 80 pacientes que los mantienen azotados, que los locos se meten en sus casas y le roban sus cosas que este tipo de institución no puede estar en medio de una comunidad donde vive gente sana, que los primeros que deben atenderse en esta institución fueron los locos que la pusieron ahí. Definitivamente todo lo que hace esté régimen con las manos lo destruye con los pies.
ES QUE SON LADRONES: No han llegado a tener poder y ya empezaron a robar. En esta semana el CNE convocó a todos los partidos para que retiraran en sus oficinas los tarjetones “No válidos” a ser utilizados en el próximo proceso electoral, como es natural asistieron los de los partidos del gobierno, los de la Mesa de la Unidad y los que estamos en la Tercera Vía. Cuando asistimos a retirar de los de la tercera vía ( OPG, PIEDRA, CONDE, FL, EL, DR, MCP, PSOEV, PANA, USP) nos encontramos con que sus paquetes no estaban en mesa, por lo que iniciamos una averiguación encontrando que dirigentes de la Mesa de la Unidad se lo habían robado, los autores: adecos de origen hoy miembros de otros partidos. Yo me pregunto ¿Es que 12 años de gobierno chavista no han sido suficientes para enseñarles a esta cuerda de malandros que deben cambiar, que deben ser éticos, que deben tener moral, que deben dejar de ser ladrones? Esto demuestra que mi decisión de no acompañar a estos facinerosos de la Mesa de la Unidad en este proceso fue por demás acertada, que con ligeras excepciones, esos no se componen, fueron y serán ladrones, si los dejamos que lleguen alguna vez al gobierno volverán a hacer lo mismo. Fueron tan barbarazos que según la denuncia de los funcionarios de la Guardia Nacional en la puerta, se llevaron hasta los pendones de pecho de visitante que se les entrega cuando ingresan al cuerpo. No, yo se que tenemos la urgencia de salir de Chávez y su gobierno pero no para regresar a los ladrones del pasado representados en esta mal llamada Mesa de la Unidad, así que necesariamente la tercera via es la solución y sus siglas ya están nombradas en la parte superior, no se equivoquen.
EPILOGO: Hoy se cumplen 480 días desde que este gobierno me allanó mi casa, me robó mis computadoras y mis armas de trabajo con la intensión de arruinarme y me mantiene privado de mi libertad, no obstante, mientras lo decidan, esta columna se seguirá publicando, la próxima semana otras menudencias.
Conviértase en mi detective, No se olviden que soy candidato a la asamblea nacional por OPG. Gente Nueva. Los que deseen apoyarme contáctenme, estarán agradecidos:
JESUS FERNANDO GONZALEZ CAZORLA
elcomandantecazorla@gmail.com
www.elcomandantecazorla.8k.com
Tlf. 0424-536-5735
@cazorlaonline
Trascendió que habría sido víctima de un cáncer avanzado. García Ponce destacó como cuadro político en organizaciones de izquierda.
Duelo oficialista
Falleció Guillermo García Ponce, director del diario Vea. El político de larga trayectoria, hizo su carrera militando en diferentes organizaciones de izquierda.
El dirigente de izquierda fue miembro de la Junta Patriótica quien fue señalada como la que liderizo el movimiento que daría al traste con el dictador Marcos Pérez Jiménez.
Este sábado también falleció el diputado Luis Ceballos Lobo, representante venezolano del Parlamento Latinoamericano.
Antonio, Servando y Guillermo García Ponce, tres conocidos hermanos comunistas, de la época de los 60, a los que en la Juventud Comunista, los seguían con “admiración y con fervor”.
¿Quién fue Guillermo García Ponce?
Guillermo García Ponce es una de las figuras históricas de Venezuela. Fué el único sobreviviente de la Junta Patriótica, organismo formado en 1956 con la misión de concretar acciones en favor de incentivar la lucha popular y la agitación política en contra del gobierno del general Marcos Pérez Jiménez.
Cómo autor, intentó explicar la realidad y la lucha venezolana por la igualdad, y entre sus obras figuran: Las Armas de la Guerra de Independencia, Política y Clase Media y La Insurrección.
Fue fundador del diario VEA, medio del que se mantuvo desempeñando el cargo de director hasta sus últimos momentos.
Escape del Cuartel San Carlos:
Teodoro Petkoff, Pompeyo Márquez y Guillermo García Ponce se fugaron del Cuartel San Carlos a través de un túnel que fue construido desde una abasto ubicado en las esquinas de Macuro y Jabonería hasta el cuartel. Este hecho ocurrió el 5 de febrero de 1967. El túnel, de 28 metros de largo, tardó tres años en ser construido.
El 5 de febrero de 1967 ocurrió una de las fugas más célebres de la historia política venezolana. Teodoro Petkoff, Pompeyo Márquez y Guillermo García Ponce tres presos políticos de entonces se evadieron del Cuartel San Carlos por un túnel que los comunicaba con un abasto cercano.
La noticia sorprendió a los venezolanos. Un comunicado firmado por el entonces ministro de la Defensa, general Ramón Florencio Gómez, daba cuenta del episodio. “El ministro de la Defensa informa a la colectividad que en las primeras horas del día de hoy se dieron a la fuga los procesados militares identificados como Guillermo García Ponce, Teodoro Petkoff Malec y Pompeyo Márquez, quienes se encontraban detenidos en el Cuartel San Carlos. La fuga de los procesados militares se efectuó a través de un túnel construido expresamente en dirección Norte-Sur, desde un abasto situado entre las esquinas de Macuro y Jabonería hasta el Cuartel San Carlos. Se han tomado las medidas conducentes a la captura de los fugitivos y abierto las averiguaciones del caso. Oportunamente se informará al respecto”.
Fue la culminación de un plan sin fisuras que se preparó durante varios meses. Desde mediados de 1962, cuando fueron inhabilitados el Partido Comunista de Venezuela (PCV) y el Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), varios de los militantes de la izquierda más radical se habían ido a la montaña a hacer la guerra de guerrillas o estaban presos. Bajo custodia militar estaban el senador Jesús Faría y los diputados Gustavo Machado, Eduardo Machado, Jesús María Casal y Jesús Villavicencio Entre aquellos que aún no habían podido ser detenido estaban los diputados Domingo Alberto Rangel, Simón Sáez Mérida, Pedro Ortega Díaz, Guillermo García Ponce y el senador Pompeyo Márquez. “Cuando los detienen a ellos, yo no caigo porque estaba semiclandestino. Caigo preso el 15 de enero de 1964”, recuerda Pompeyo Márquez, quien confiesa que había participado en la rebelión militar que el gobierno denunciaba como argumento para encarcelarlos.
Pompeyo Márquez resguardada su identidad con el seudónimo Santos Yorme, hasta que se descubrió quién era en el momento de su captura. La noticia comenzó a difundirse en todas las emisoras de radio como el gran acontecimiento. Márquez, quien había participado en el derrocamiento de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez y desde 1950 era el secretario general encargado del Partido Comunista, estaba siendo conducido a la cárcel más segura del momento, el Cuartel San Carlos.
Otro líder político y muy amigo de Márquez, Guillermo García Ponce, ya había sido llevado al mismo recinto. En su libro La fuga del Cuartel San Carlos relata todos los hechos en relación con este episodio. Su primera impresión del cuartel fue: “la fortaleza ha sido dividida internamente en varios sectores a fin de lograr un mayor dominio sobre los prisioneros. Cada sector está separado de los otros por construcciones especiales y el severo acecho de soldados armados de fusiles FAL y subametralladoras. Me entero que somos custodiados por trescientos efectivos militares”. También se fijó en los vehículos blindados que rodeaban la zona para controlar al tránsito: “más de un transeúnte ha sido acribillado a balazos por no atender con rapidez las señales de los centinelas de turno”.
A García Ponce lo encerraron en “la Cueva del Humo”, que él mismo calificó como “un cajón estrecho, inhóspito, a donde no llega ni el sol, ni la brisa, ni hay más nada que mirar que las paredes sucias”. Al grupo de Pompeyo Márquez lo metieron en un calabozo mucho más amplio llamado F1. Cuenta éste último que más adelante “Guillermo (García Ponce) se las ingenió para que lo trasladen a nuestro calabozo”. Lo mismo ocurrió con Teodoro Petkoff, que aún no había sido detenido.
Desde antes de la captura se habían prometido hacer todo lo posible por fugarse en caso de ser encerrados. Una película de nombre “El gran escape”, los había inspirado. Y el plan comenzó a desarrollarse.
Un gran ayudante:
El plan, que clandestinamente lo llamaban “el libro”, se basó en la construcción de un túnel. Para llevarse a cabo fue indispensable la participación de Nehemet Chagin Simón, mejor conocido como “Simón el árabe”, un joven de 28 años de edad, de origen sirio, que había sido preso político en Damasco y al ser liberado partió para Venezuela en busca de mejores oportunidades. Habían transcurrido seis años desde ese entonces.
Al conocer el plan, Simón se mostró muy entusiasmado. Le dijo a sus compañeros de la parroquia San Juan que abandonaba la lucha política por un tiempo “para ocuparse de otros negocios”, según relata García Ponce en su libro. Simón era una persona que no causaba desconfianza, incluso se llevaba muy bien con los guardias y su siguiente paso era conseguir un sitio cerca del cuartel para poder desarrollar el plan.
No tardó mucho en arrendar un local y abrir la bodega “Abastos San Simón”, que posteriormente se convirtió en la puerta de salida hacia la libertad. Debido a las labores de construcción del establecimiento, Simón obtuvo un salvoconducto para transitar por la zona y estacionar una camioneta en la parte de atrás del cuartel.
El 17 de junio de 1964, Teodoro Petkoff fue encarcelado en una de las celdas de la Cueva del Humo. García Ponce escribió sobre él lo siguiente: “Petkoff ha sido autor de una de las más sensacionales fugas del Hospital Militar. Estaba detenido en el Cuartel San Carlos y logró ser conducido al hospital al simular una gravísima dolencia. No fue nada fácil por ser considerado como un preso “peligroso”. La escena consistió en beber medio litro de sangre para luego vomitarlo y aparentar sufrir una “hemorragia por ruptura de ulcera gástrica”. Logró su objetivo, terminó fugándose del Hospital Militar.
A medida que pasaba el tiempo, las esperanzas de libertad crecían y la cárcel se iba llenando cada vez de más presos. El 30 de diciembre de ese mismo año, Gonzalo Barrios, ministro de Relaciones Interiores, declaró a la prensa que había 916 presos políticos en las cárceles del país. En enero de 1967 comenzó la excavación del túnel.
En plena logística:
El equipo ya estaba armado. Bajo la dirección de Antonio José Urbina, Simón atendería la bodega que servía de fachada legal junto a dos ayudantes: Carlos, encargado de la excavación, e Ibrahím, quien sería el ayudante detrás del mostrador. Socorro Negreti de Márquez, esposa de Pompeyo, sería una pieza fundamental para la “edición del libro”, al igual que Néstor López, quien participó en la excavación. Poco después fue asesinado por un funcionario del Servicio de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (SIFA).
Guillermo García Ponce describe así el inicio de la construcción del túnel: “Carlos comenzó a romper el piso de granito del garaje con un cincel. Al lado, Simón e Ibrahím despachan a los clientes de la bodega. Procuran disimular el ruido. Los golpes del martillo no son continuos sino lentos y mezclados con los chillidos de un radio a todo volumen. También usan una sierra manual de picar granito. Deben abrir un boquete cuadrado de 0,65 centímetros por lado, de tal manera que después no presente ningún inconveniente para colocar una tapa del mismo granito, a fin de ocultar la entrada y no ser descubierta cuando se produzcan las requisas”.
Muchas veces el trabajo les causó problemas respiratorios, náuseas, mareos y hasta pérdida de peso debido al calor, el olor de la tierra y el cansancio. La tierra que iban sacando la metían en un saco, luego esos 50 ó 60 kilos de peso debían llevaros hasta la camioneta para que Simón los desechara. En varias oportunidades debieron ingeniárselas para evadir a los guardias que se presentaban inesperadamente o que hacían requisas en los alrededores.
Recuerda Pompeyo Márquez: “Cuando iba a recibir visitas, yo iba midiendo el paso del F1 al salón. Simón medía por la parte detrás, para lo cual inventó un juego de fútbol donde marcaba la cancha desde la bodega hasta la garita. Simón es un hombre clave en todo esto porque además establecía contacto con todos los oficiales del Cuartel San Carlos y hasta comía en el comedor con los oficiales”. La otra medida que tomó Simón fue a través de un hilo que ató a un trozo de madera hasta llegar a donde estaba Ibrahím, donde el túnel debía doblar. En total fueron 28 metros de largo.
Alrededor de tres años tuvieron que transcurrir para dar fin al plan. Fue un domingo de Carnaval, 5 de febrero de 1967.
El gran día:
Pompeyo Márquez describió su estadía en el Cuartel San Carlos como una “convivencia”; la comparó a una oficina por todo lo que escribían y leían. Incluso se mantuvo publicando sus escritos en la prensa, firmaba en su columna diaria como Oscar Calles, otras veces como Carlos Valencia (Car los por el Cuartel y Valencia por “la ciudad que no se rendía”), tenía varios seudónimos.
“Como anécdota adicional puedo contar la forma como saqué los borradores y las fichas en el momento de la fuga. Utilizando unas medias para várices ordené el conjunto de cuartillas, aproximadamente 180, y las fichas, más de 200, dentro de ella. A duras penas pude ponerme el pantalón. Mientras me preparaba para internarme en el túnel que nos conducía a la conquista de la calle, Guillermo y Teodoro no aguantaban la risa. La cuarentena que tuvimos que guardar después de la operación la utilicé para pasar en limpio este borrador”, continúa Márquez.
Antes del día de la fuga el grupo planificó toda la partida, pese a que tuvieron que cambiar varias veces de fecha por la cantidad de requisas. A las 7:00 de la noche debían estar todos listos dentro del calabozo esperando a que Néstor López rompiera las baldosas y abriera la entrada al túnel. Mientras tanto, Freddy Muñoz y Alonso Palacios, quienes conocían los planes, organizaron una fiesta con el fin de llamar la atención de los guardias.
Al pie de la letra se cumplió el cometido. En silencio lograron llegar a la bodega, subirse a la camioneta de Simón y esconderse debajo de muchas cajas. Un par de encuentros con guardias causaron cierta tensión, pero por la buena reputación de “el árabe” pudieron pasar desapercibidos. Cada quien tomó su camino, había una camioneta esperando a cada uno de los fugitivos. “Simón el árabe” tenía todo preparado para irse del país; primero fue a Cúcuta, Colombia, y de ahí partió a la Unión Soviética, donde aprendió ruso y se convirtió en traductor trilingüe. Años después murió en Siria.
Por :Alejandra Otero
EL NACIONAL/EL UNIVERSAL
sábado 11 de septiembre de 2010