El diputado Domínguez calificó las
acciones de retaliación política
■ Fueron desarmados los funcionarios que resguardan la residencia oficial del mandatario regional.
Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas allanaron ayer la vivienda de Tony Luces, funcionario activo de Polimonagas, jefe de seguridad y chofer personal de José Gregorio Briceño, gobernador del estado, y se lo llevaron detenido. Así lo informó en rueda de prensa Jesús Domínguez, diputado por el estado Monagas, quien fungió como vocero de la Gobernación.
Agregó que a Luces lo trasladaron a la sede principal del Cicpc en Maturín y que se encuentra incomunicado.
Señaló que otro funcionario, cuya identidad no reveló, fue aprehendido y se espera que en las próximas horas ambos hombres sean presentados en tribunales.
Domínguez dijo que también les fue decomisado el armamento a los funcionarios que resguardan la residencia oficial del gobernador Briceño, que han sido catalogados de “policía paralela” por los detractores del mandatario regional.
Retaliaciones. El diputado Domínguez afirmó que las recientes acciones forman parte de una “política de persecución” en contra del gobernador José Gregorio Briceño, desde que el mandatario regional fue sacado de la filas del Partido Socialista Unido de Venezuela luego de las diferencias con el Gobierno por el derrame de petróleo que contaminó el río Guarapiche.
Posteriormente el gobernador trató de sacar de la dirección de la Policía de Monagas al general Luis Arrayago, quien se negó a dejar el cargo y desde entonces continúa los lineamientos del Gobierno a través del Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia, a pesar de que las policías regionales son organismos subordinados a las gobernaciones.
“Nos persiguen porque saben que el “Gato” está en la calle casa por casa”, apuntó el legislador.
Afirmó el legislador que la situación que actualmente afronta el gobernador José Gregorio Briceño es una señal que intenta enviar el Gobierno para sembrar miedo en las filas del Partido Socialista de Venezuela y evitar desacuerdos a lo interno del partido.
“Buscan crear miedo en las filas del partido para que nadie se altere” dijo.
Fue un atentado:
Domínguez reveló que la situación presentada el pasado 6 de febrero en un gimnasio de Maturín, al que el gobernador Briceño asistía con regularidad, se trató de un atentado y no de un robo como informaron en ese momento. Explicó el diputado que la situación se manejó como un hecho de hampa común por petición del presidente Hugo Chávez, a través de una llamada telefónica a Briceño. En este suceso fue asesinado uno de los escoltas del mandatario regional.
Por: JAIME LEAL
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EL NACIONAL
JUEVES 31 DE MAYO DE 2012
