El Cicpc trabajó 11 meses
en la investigación
■ Desde el Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia se giraron instrucciones para que no se hiciera público el caso.
Integrantes de organizaciones vinculadas al narcotráfico viajaban desde Colombia para coordinar la construcción del semisumergible localizado en un astillero artesanal en Delta Amacuro.
Casi 11 meses de averiguaciones le tomó al Cicpc concretar la operación para la captura de Ángel Antonio Custodio Vegas y Orlando Jesús Hidrogo, detenidos por el caso del semisumergible hallado a finales de 2009, presuntamente utilizado para el tráfico de drogas. Entre los datos concretos obtenidos por la policía científica está la identificación de un ciudadano colombiano encargado de dirigir la fabricación de la nave.
Extraoficialmente se conoció que ese individuo vino al país con un equipo especializado para construir la embarcación y que huyó antes del operativo.
Sin embargo, se sabe que ha regresado a territorio nacional y las autoridades encargadas de las pesquisas siguen tras su pista para aprehenderlo.
El semisumergible estaba identificado como Muñeca IV, por lo que las autoridades presumen que la organización que construyó la nave en el país, trabaja en serie y utilizaron tres embarcaciones similares en las rutas del Pacífico colombiano.
La policía venezolana decidió actuar a finales de 2009, cuando el informante que los mantuvo al tanto de la construcción de la nave les indicó que sólo les faltaba instalar los motores y las piezas mecánicas, para cargarlo y sacarlo hacia el Caribe. En aquella oportunidad, los investigadores presumían que la intención de los narcotraficantes era crear otra ruta con salida por el delta del Orinoco, con rumbo a Trinidad y otras islas del Caribe.
En ese momento, desde el Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia, supuestamente, se giraron instrucciones directas para mantener confidencial toda la operación llevada a cabo por la División Nacional de Investigaciones contra la Droga.
Apelación:
Luego de la acusa- ción presentada por el Ministerio Público contra Custodio e Hidrogo, la defensa interpuso ante el Tribunal Supremo de Justicia un recurso de amparo, solicitando la revocatoria de la medida privativa de libertad contra los detenidos, por considerar que no hubo flagrancia al momento de la captura.
Uno de los delitos que se les imputa, que es el tráfico ilícito de sustancias estupefacientes y psicotrópicas, sólo está fundamentado en el testimonio de Renny Ramón Núñez, el pescador que aportó la información, por lo que “no existe en autos otros elementos que puedan configurar la existencia de tal delito”, expresa el texto del amparo, con fecha 24 de marzo de 2010. Ese recurso fue desestimado y se ordenó pasar a juicio a los acusados.
Por: THABATA MOLINA
tmolina@el-nacional.com
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