Ataca con tanques y francotiradores cadáveres
en las calles, hospitales repletos de heridos
■ Evacuados libios relatan “infierno” en Misrata.
■ La ONU negocia el envío de ayuda humanitaria.
■ Gadafi bombardea zonas residenciales de Misrata.
■ Enviado de Gadafi en Turquía en busca de una solución.
■ La sublevación de Libia atrae a participantes por todo el mundo.
■ Los rebeldes criticaron hoy duramente a la OTAN por no intentar frenar los ataques de las tropas de Muamar el Gadafi.
■ El Ankara, un barco humanitario turco que rescató a más de 250 heridos en la ciudad libia de Misrata, arribó este domingo a Bengasi.
BEIRUT, 4 Abr. (Reuters/EP).- Las fuerzas leales al líder libio, Muamar Gadafi, están bombardeando zonas residenciales de la ciudad de Misrata, el reducto más importante de los rebeldes en el oeste de Libia, según ha denunciado un portavoz de la oposición.
“El bombardeo, con morteros y artillería, comenzó a primera hora de la mañana y continúa”, ha declarado a la agencia Reuters Gemal, quien considera que “esto es puro terrorismo” porque “el bombardeo apunta a las zonas residenciales”. “Sabemos que hay víctimas, pero no sabemos cuántas”, ha agregado.
Misrata, la tercera ciudad más grande de Libia, está rodeada, y los ataques de las fuerzas de Gadafi, que comenzaron hace varias semanas, han matado o dejado heridas a cientos de personas.
Gemal ha indicado que la ciudad, incluida la zona del puerto, también sufrió intensos bombardeos este domingo y que murieron dos personas.
Varios barcos han atracado en el puerto, controlado por los rebeldes que quieren derrocar a Gadafi, para evacuar a los heridos, pero el portavoz de los sublevados ha subrayado que se necesita más ayuda.
Misrata no dispone de un hospital en condiciones y los médicos que están trabajando en una clínica improvisada dicen que no pueden atender a todas las personas que acuden allí por haber resultado heridas en los enfrentamientos.
“La situación médica sigue siendo difícil”, ha explicado Gemal, que ha agregado que “hay que evacuar a muchas más personas”. “Varios Estados hermanos nos han prometido que hay más ayuda en camino”, ha asegurado.
Los ataques aéreos que están llevando a cabo varios países en Libia con el apoyo de la ONU no han logrado de momento proteger de los ataques de Ejército libio a la población civil de Misrata.
El portavoz de los rebeldes ha señalado que la única solución es que los gobiernos extranjeros contribuyan a derrocar a Gadafi y a su familia. “Proteger a los civiles significa acabar con este régimen, que es la única amenaza contra los civiles”, ha concluido.
Pero las autoridades libias dicen que no están atacando a civiles en Misrata, sino que está luchando contra bandas armadas relacionadas con la red terrorista Al Qaeda.
Barco turco rescata a más 250 heridos en Misrata:
Un barco humanitario turco con más de 250 personas a bordo, heridas en la ciudad de Misrata (oeste de Libia), arribó este domingo a Bengasi (este).
Ambos territorios son controlados por los rebeldes. Sin embargo, Misrata se encuentra bajo el asedio de las fuerzas leales al gobierno, por ser la única ciudad bajo el mando rebelde en el oeste del país.
El ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Ahmet Davutoglu, dio el permiso para que el Ankara -un ferry que se convirtió en un hospital improvisado- entrara a Misrata, luego de esperar durante cuatro días el permiso para atracar.
El barco, que también transportaba suministros médicos para los doctores en Misrata, viajó protegido por 10 aviones de combate F-16 y dos fragatas de la marina turca, según lo informó el funcionario consular, Ali Akin, a la agencia de noticias Reuters.
Heridos a bordo:
Mientras las fuerzas especiales de la policía turca -fuertemente armadas- custodiaban la operación, los heridos fueron trasladados a bordo, algunos en compañía de sus familiares.
Akin dijo que el barco tuvo que salir más temprano de lo previsto, luego de que una multitud -entre la que se encontraban cientos de egipcios- se trasladara al muelle con la esperanza de escapar.
El enviado especial de la BBC, Jon Leyne -viajó a bordo del Ankara- asegura que muchos de los pacientes tienen lesiones muy graves.
Un hombre perdió parte de su pierna en una explosión mientras llevaba a su esposa al hospital, para que recibiera tratamiento. Un niño de 13 años de edad describió el momento en que un francotirador le disparó.
Mohammed Muftah, con heridas de metralla en las piernas, la espalda y el cuello, dijo que las tropas Gadafi habían “matado a familias enteras” en zonas residenciales.
“Uno de mis vecinos perdió a su esposa y a sus tres hijos”, dijo a la agencia de noticias AFP. “Lo hacen para aterrorizar a la gente”.
Leyne señaló que, según las historias que escuchó en el barco, las condiciones cada vez están peores en Misrata. Cortes de agua y electricidad han ocurrido en casi toda la ciudad, y cada vez es más difícil resguardarse de los disparos de los francotiradores.
Los médicos a bordo aseguran que “la atención médica en Misrata es insuficiente y que muchos de los pacientes están heridos de gravedad”.
Informes no confirmados sostienen que unas 160 personas podrían haber muerto en esa ciudad esta semana.
Mientras el barco arribaba a Bengasi, simpatizantes de la causa rebelde esperaban en el muelle coreando: “La sangre de los mártires es derramada por la libertad”.
El Ankara planea recoger a unos 100 heridos más antes de zarpar al puerto turco de Cesme, en donde las víctimas serán tratadas en un hospital moderno “bien equipado y bien abastecido”, según lo explicaron las autoridades.
Enfrentamientos:
Mientras tanto, en el puerto petrolero de Brega han continuado los enfrentamientos entre rebeldes y fuerzas pro-Gadafi.
Más temprano, un corresponsal de la BBC dijo que los rebeldes se encontraban en “un punto muerto”.
Al parecer, las tropas del gobierno permanecen en el terreno, cerca de la universidad, sin planes de enfrentar a los rebeldes porque temen un ataque de las fuerzas aéreas de la OTAN.
El corresponsal asegura que los rebeldes están desorganizados y no poseen las armas adecuadas para seguir avanzando hacia Brega, por lo que piden más ayuda de occidente.Por su parte, el viceministro libio de Relaciones Exteriores, Abdelati Obeidi, se reunió con el primer ministro griego, Yorgos Papandréu en Atenas, la capital de Grecia.Tras el encuentro, el canciller griego, Dimitris Droutsas, dijo a los periodistas que “parece que las autoridades libias están buscando una solución”.
Hijos de disidentes libios:
Creciendo en Fairfax como el hijo de disidentes libios, Hesham Mansur era bien consciente de los horrores del gobierno de la columna Moammar Gaddafi.
Pero cuando el estudiante nacido en Estados Unidos del establecimiento de una red de la computadora se colocó para las clases este semestre en la universidad del masón de George, él no tenía ninguna idea que él pronto estaría en Libia, intentando derrocar a ese gobierno mismo.
“Uno de los comentarios de Facebook era, `si usted es tan valiente, va lo hace usted mismo, ‘ ” Mansur, 27, dijo, recordando la ráfaga de los mensajes del Internet entre los libios al extranjero como el vapor ganado sublevación. Tan el 28 de febrero, menos de dos semanas después de que las protestas comenzaron, él embaló encima de los suministros médicos donados de libios en los Estados Unidos, voló a El Cairo y cruzó en Libia por tierra.
Él no era solo. Para los libios que vivían en los Estados Unidos, Alemania, Suecia, Gran Bretaña y a otra parte, la vista de sus paisanos que se levantaban contra la regla de 41 años de Gaddafi les inspiró a que pusieran sus propias vidas en asimiento y la raza hacia fuera para ayudar.
“Sentía como había hecho todo el Twittering que podría hacer,” dijo a Ahmed Hnesh, 29, consultor en administración de empresas de Falls Church que es amigos con Mansur y llegué aquí algunos días antes de él.
Los retornados numeran en los centenares, si no más. Muchos eran disidentes o son los niños de disidentes. Volvieron proporcionar el músculo de la ayuda humanitaria, de la ayuda moral, de la maestría y de la linea.
El gobierno provisional de los rebeldes incluye un número de retornados del extranjero, su cosmopolitanism y fluidez en las idiomas europeas que les ayudan para construir relaciones diplomáticas. Para los que elijan luchar, la experiencia de ultramar tiende a ser menos provechosa, aunque el comandante autoproclamado del ejército rebelde, generador Khalifa Haftr, años gastados viviendo en Fairfax.
Hnesh salió de los Estados Unidos sin decir a sus padres. Otros que vivían al exterior han recibido bendiciones tentativas de los padres rasgados entre el miedo para su seguridad y el orgullo en sus acciones.
Un enviado del líder libio Muamar Gadafi:
Se encuentra en Turquía para buscar conversaciones que pudieran acabar con el conflicto armado en el país norafricano.
Abdul-Ati al-Obeidi llegó a Turquía proveniente de Grecia y se dirigirá luego a Malta, como parte de su misión.
Turquía ha mantenido contactos regulares tanto con el gobierno de Gadafi como con los rebeldes libios, pero también ha jugado un rol en la operación militar internacional que tiene como objetivo declarado proteger a la población civil.
Y la misión de Abdul-Ati al-Obeidi se enfrenta a claras dificultades.
Este lunes, Italia se convirtió en el segundo país europeo, después de Francia, en reconocer oficialmente a los rebeldes como los únicos representantes legítimos del pueblo de Libia.
Y el Reino Unido dijo estar considerando la posibilidad de apoyar a los soldados rebeldes con equipo no letal.
La ONU:
La ONU mantiene contactos con todas las partes implicadas en el conflicto libio para intentar facilitar el envío “lo más pronto posible” de ayuda humanitaria para las víctimas.
“Nada está sobre la mesa (…). La situación es muy cambiante e impredecible”, ha declarado el coordinador de la ONU para cuestiones humanitarias en Libia, Rashid Jalikov, en rueda de prensa desde Túnez.
“Fechas… Solo puedo daros una fecha: lo más pronto posible porque tenemos que hacer algo para reducir el sufrimiento de la población (…). El diálogo sigue abierto con las partes en conflicto y seguirá así el tiempo que sea necesario”, ha explicado Jalikov.
La ONU evacuó a sus trabajadores extranjeros de Libia a finales de febrero debido a la inseguridad tras las protestas contrarias al régimen de Muamar Gadafi, pero las agencias alimentarias y para refugiados han podido seguir trabajando en el este del país. Sin embargo, la ayuda no puede llegar adecuadamente debido al peligro aún latente.
“Estamos preocupados por los civiles atrapados en las hostilidades, por los que no pueden acceder a los servicios básicos”, ha indicado Jalikov. “No tenemos acceso a esta población en varias partes del país y estamos trabajando con los implicados en el conflicto para insistir en la necesidad de cumplir estrictamente los principios del derecho internacional”, dijo.
Por: Agencias/R24
