La cacareada “Suprema
Felicidad Social”
Cuando el Presidente dice que Venezuela ya es libre, evidentemente no se refiere a nuestra independencia económica de Estados Unidos, porque según los Estados Financieros de Pdvsa en el primer año de gobierno de Chávez se enviaron a ese país 1,5 millones de barriles (pág.163) y al día de hoy les venden 1,2 millones (pág. 173). Saltarán las chicharras rojitas a decir: ¡recortamos 300 mil barriles! Si, pero sospechosamente le venden 35 mil barriles a Argentina, que es “casualmente” el mismo número de barriles que Estados Unidos recibe de Argentina; le venden 50 mil barriles a Aruba y eso es “casualmente” lo que la isla le vende a Estados Unidos; le venden 11 mil barriles a Bolivia que “casualmente” son los mismos barriles que Estados Unidos recibe de ese bolivariano país, y así pare usted de contar (DOE 2007-2011).
Así es que en la famosa gesta independentista chavista, Venezuela le entrega lo mismo a Estados Unidos que el criticado expresidente Caldera, pero el número de barriles vendidos al imperio son menos libres, por ejemplo, que adecos y copeyanos, que según el Departamento de Energía de Estados Unidos estos últimos solo le vendieron a ese país en promedio la mitad de barriles que los chavistas. En fin, que cada vez que un chavista viaja al imperio o a Europa, el 70% se los da el Tío Sam y la gran mayoría proviene de la enorme deuda que adquirieron con los bancos de ese “despreciable” imperio.
Por eso es asombroso cuando el Presidente se autoproclama como nuevo libertador, en un intento por hacer creer a su gente que ya se liberaron de ese pernicioso imperio. Y el asunto empeora cuando Venezuela les debía unos 27 mil millones a los bancos imperialistas y otros 12 mil a los europeos, pero durante su gobierno ha endeudado al país en 107 mil millones de dólares (BCV 1/2012), deuda que no le mencionan a los venezolanos que están en los bancos de Estados Unidos. Así es que después de tanta “cháchara” (como dice Henrique Capriles), los revolucionarios terminaron debiéndole más al imperio que la suma de los adecos y copeyanos juntos. Es de tal magnitud el endeudamiento revolucionario que rompieron otro récord, en apenas una década pagaron el equivalente a todo lo que debían los adecos y copeyanos, pero solamente en intereses de su propio endeudamiento. En el imperio (que tanto les gusta por cierto) deben estar diciendo: “si así llueve, que no escampe”.
Tampoco cuadran los números cuando chacharean que somos libres porque ya no importamos nada del imperio, porque las cifras del año 2011 nos dicen que la revolución chavista rompió el récord de importaciones imperialistas, incluso hasta el récord de importación de petróleo (sí, Venezuela importó 6 mil millones de productos petroleros el año pasado). Y no es un simple aumento, es que en los últimos 5 años el chavismo triplicó las importaciones estadounidenses de adecos y copeyanos juntos. Y no es que reeditaron el “ta’barato dame dos” es que por primera vez en la historia, de acuerdo al Departamento de Comercio estadounidense (2011), los venezolanos triplicaron, ajustado a inflación, el gasto en compras del mayor año de aquella nefasta época del ta’barato.
Así cualquiera entiende su cacareada “Suprema Felicidad Social”.
El chavismo destruyó la industria farmacéutica venezolana a tal punto que de los 254 millones de dólares en importaciones de productos farmacéuticos en 1999, pasaron a importar 2.538 millones de dólares (INE); en lugar de crear una red médico-asistencial venezolana empujaron a los venezolanos a una diáspora sanitaria en la que cerca de 6 mil médicos se marcharon (4 mil solo a España), desaparecieron cerca de 10 mil camas funcionales de los hospitales, desmantelaron la red hospitalaria y decidieron importar 38 mil trabajadores sanitarios extranjeros, mientras triplicaron el coste de seguros para atenderse en las clínicas privadas, hasta el punto que el gasto en seguro privado, solo del gobierno central es de 4,3 trillones de Bs. (Distribución Presupuesto págs. 3 y 4), imagínense a niveles descentralizados. Claro, así uno entiende también la defensa de los chavistas a los logros de salud, por supuesto que ahora los atienden mejor en las clínicas privadas.
En fin, que los chavistas nos han demostrado que en lo único en lo que sí son libres, es en hacer a lo largo de estos 13 años lo que les ha dado la gana con Venezuela. La libertad de destruir a su paso, cual plaga de langosta, cada rincón de nuestro país.
Por: THAYS PEÑALVER
tpenalver@me.com
@thayspenalver
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EL UNIVERSAL
jueves 12 de julio de 2012
