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Isa Dobles: Chávez quedó como un “asomao”


Chávez regreso iracundo arremetió contra
la oposición, los bancos, las empresas…

 

Por supuesto que la visita del Papa a Cuba dio y dá mucho para hablar y para escribir, sobretodo para nosotros los venezolanos porque está involucrado Hugo Chávez – que no perdona pantalla para hacerse sentir y esta visita, por supuesto, era “imperdible” para el muchachote de Barinas.

En primer lugar porque por esa cabeza calenturienta – ¡antes que eso! – no pasaba nada que pudiera no dársele como él quería. Y aquí menos – en este espacio donde él es el “benefactor” y la “salvación” del mismísimo héroe de su propia historia.

Por allí apareció un Twitter de la foto de Fidel y el Papa… y tras la puerta de fondo, sobresaliendo apenas en lo que supongo en un estupendo montaje, la cabeza de Hugo Chávez.

Yo no la distinguí al abrirla. Pero volví sobre ella: Es que en esa presunción gráfica estaba el Hugo Chávez de hoy tras ese intento fallido para forzar el encuentro.

Confieso que me dejó un sabor lastimero… y eso es lo que queda de este capítulo en esta telenovela barata que vivimos. Encontrarse con el Papa, lograr esa foto significaba que nada ni nadie podía decirle que no. Que todos le obedecían. Que nadie ni ninguno era más poderoso.

Pero no.

Sobre la tierra, el más cercano a Dios, Jesús, o Cristo, como quiera y le convenga llamarlo, es, en este momento cuando la enfermedad lo hace creyente, el Papa.

Una vez aseguró arrogante que Jesucristo no necesita que nadie lo representara en la Tierra, que el Papa no era quién para decirlo.

Pero cuando los medios del mundo entero se dan cita en la isla que depende de él, cuando ha manifestado ante una Venezuela agobiada y harta de sus amenazas que Cuba y Venezuela son lo mismo, que él y Fidel cogobiernan, cuando según esa mente aquejada todos están obligados a servirle, este revés es insoportable .

Y es una realidad. Con Chávez la verdad había perdido muchas veces. Pero ganó esta vez. Hugo Chávez quedó mal ante nosotros y ante el mundo. Quedó como esa foto montada por la creatividad de alguno… como un “asomao”.

No crean que no me he paseado por la reflexión de un Chávez asustado, convencido hoy en esa incoherencia de su crisis, que una bendición Papal puede ayudarle en su desesperación hasta calmar el miedo ante lo previsible. Pero ese no es Hugo Chávez.

Como sea o será, alguien le dio un “parao”. Y este no es, precisamente, el mejor momento para recibirlo. Al llegar enfrenta otra verdad: los policías de Miranda señalados en el secuestro del mánager del grupo musical “Caramelos de Cianuro”, utilizados en los discursos rojos rojitos para descalificar a Henrique Capriles, pertenecen a las filas del PSUV, el partido de gobierno. En Miranda, trabajaron con Diosdado Cabello…¿Y entonces?

El Papa debe estarse reponiendo. No ha sido fácil este viaje. Dijo lo que tenía que decir con la amenaza encima de un hombre que desmontaría la autoridad del Vaticano y enredaría el momento. Si fue resuelto por el Vaticano, por el Papa, por la Iglesia cubana, por los mismísimos Castro, no lo sabremos. Por ahora.

El Chávez iracundo que arremetió contra la oposición, los bancos, las empresas, todo lo que él supone “conspiran” contra él, acusó el “golpe” recibido. Y hoy regresa a Cuba. Pero no es el mismo. A su alrededor hay vientos huracanados de voluntades buscando escribir su propia historia. Venezuela se niega a vivir maldiciones infinitas.

¡Ya falta menos para el 7 de octubre!


Por: Isa Dobles
Politica | Opinión
sabado 24 Marzo, 2012