Expertos dicen que podría interpretarse
como una renuncia al territorio
■ El reclamo terrestre pasó a segundo plano.
■ Delimitación del Esequibo retorna a la negociación.
■ En 1999 Chávez rechazaba concesiones en el Esequibo.
■ Venezuela sólo defendió su derecho de soberanía en el Atlántico.
■ En la declaración conjunta quedó al margen la disputa sobre la zona en reclamación.
■ La posición de Caracas puede significar un reconocimiento implícito a las acciones de Guyana.
■ La reunión de ministros de Relaciones Exteriores de Guyana y Venezuela se centró en la delimitación marítima.
Angelina Jaffé, experta en derecho del mar, considera que haber minimizado uno de los aspectos del diferendo “puede significar un reconocimiento implícito de que Venezuela abandona su posición, dejando de lado el reclamo y limitándose a que en el futuro se busque una delimitación marítima”. En el documento emanado en Puerto España no se expresa nada sobre el territorio. Emilio Figueredo, ex embajador para las negociaciones, dijo: “Casi nos obligan a conformarnos y a renunciar al Esequibo”.
En la reunión que mantuvo el viernes en Trinidad el canciller Nicolás Maduro con su par de Guyana, Carolyn Rodrigues, Venezuela le recordó a Georgetown el “legítimo derecho de soberanía y jurisdicción del país en la fachada Atlántica” motivo actual de disputa por la pretensión de la república cooperativa de extender su plataforma continental pero en la declaración conjunta emanada de la cita en Puerto España quedó al margen el centenario reclamo de Caracas sobre el territorio del Esequibo.
Emilio Figueredo, ex embajador ante Naciones Unidas para la aplicación del Acuerdo de Ginebra, opina al respecto: “Se puede negociar la extensión y delimitación de la plataforma deltana del lado venezolano, pero en pocas palabras se interpreta de esta reunión que casi nos obligan a conformarnos con esta negociación y renunciar al Esequibo. En el comunicado no se expresa nada que se refiera al territorio, salvo un lenguaje sibilino y extraño donde puede haber una referencia a esta materia”.
A juicio de Angelina Jaffe, experta en derecho del mar, el hecho de haber dejado de lado la parte territorial del diferendo “puede significar un reconocimiento implícito de que Venezuela abandona su postura dejando de lado el reclamo del territorio y se limita simplemente a que en el futuro se busque la delimitación marítima con Guyana”.
“La plataforma continental significa la parte terrestre sumergida en del mar. Guyana está sumando en la definición de su plataforma, la zona marítima que se proyecta desde el territorio en reclamación. Entonces, limitar la negociación a un diferendo marítimo, es como asumir que ese reclamo territorial ya no tiene vigencia”, añade.
Ambos expertos coinciden en que la reunión sirvió para aplacar a la creciente opinión pública adversa, más que para que Venezuela fijara una posición clara sobre el diferendo.
“Retirar la reclamación puede tener un costo político muy alto, pero por vía de hecho se está debilitando la posición negociadora de Venezuela, cualquiera que sea la solución”, destacó Jaffe.
Figueredo rebatió algunos puntos acordados en la reunión y que recogió la declaración: “¿Cuál es la concesión que hace Guyana aceptando el Acuerdo de Ginebra? Ellos están obligados a acatarlo al igual que nosotros y ambos Estados hemos sometido ese procedimiento a Naciones Unidas. Entonces, ¿estamos descubriendo la pólvora con ese hecho? También el hecho de que admiten que tiene que haber una delimitación es algo obvio, ¿no se supone que somos vecinos?” Desesperados. El presidente Hugo Chávez se refirió, en Consejo de Ministros, al encuentro Maduro-Rodrigues en Puerto España.
Agradeció el apoyo del Gobierno de Trinidad y Tobago y criticó a “algunos sectores que andan desesperados buscando cualquier tema para levantar vuelo”, con referencia a la oposición.
“Trataron de inventar un conflicto donde no ha habido conflicto. Hay un manejo responsable de nuestras relaciones internacionales, en este caso con Guyana, con un reclamo que es histórico y que hemos continuado en un marco distinto de relaciones de cooperación, respetando los convenios internacionales que firmaron gobiernos anteriores, como el Protocolo de Puerto España, en 1970. Igual pasa con el diferendo del golfo de Venezuela, que hemos venido manejando diplomáticamente”, destacó.
Maduro calificó la reunión, en la que participó el buen oficiante del secretario general de la ONU, Norman Girvan, como “larga, en la que se habló con franqueza, entre pueblos hermanos”.
Por: JESÚS UZCÁTEGUI SUPERLANO
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