El Ministerio tiene seis años sin
honrar la Ley del Servicio Exterior
■ Trabajan irregularmente.
■ Cancillería tiene en limbo legal a más de 60 diplomáticos.
■ Como consecuencia, no pueden ir a misiones en el extranjero y se les niegan peticiones para hacer posgrados o aceptar becas fuera del país.
■ Profesionales de carrera que fueron contratados en 2003 y 2005 por el Ministerio de Relaciones Exteriores llevan más de cinco años esperando ser ratificados en sus cargos.
■ Ysrael Camero, seleccionado por concurso en 2005, dice que en el proceso se discriminó a los que firmaron en el referéndum. “Esto es una ilegalidad”, lamentó Ernesto Kébler, ex consultor jurídico del despacho.
Más de 60 diplomáticos de carrera de la Cancillería están en un limbo jurídico. Tienen más de cinco años esperando su ratificación, lo que debilita sus condiciones de trabajo y constituye, según expertos, un incumplimiento de la Ley del Servicio Exterior de 2005, todavía vigente.
La normativa divide al personal de carrera en 6 rangos que van desde el tercer secretario, con el que se comienza, hasta embajador. El artículo 28 establece que el ingreso se produce a través de un concurso de oposición que hará un jurado calificador.
El procedimiento se cumplió en junio de 2003 y en 2005, antes de la llegada de Nicolás Maduro al Ministerio. Del primer grupo ingresaron 36 profesionales como terceros secretarios. Dos años después entraron 50 más.
En ambos casos debían recibir dos años de formación.
Después los evaluaría un jurado para ratificarlos y enviarlos a misiones. Nada ha ocurrido.
“El retraso ha hecho que la Oficina de Recursos Humanos les niegue peticiones para asistir a cursos de más de 3 meses; postgrados en el extranjero; aceptación de becas para el exterior; permisos no renumerados; comisiones de servicio o ir a un destino porque no estamos formalmente en la carrera”, indicaron funcionarios que solicitaron mantener sus nombres en reserva.
“En los carné que les asignaron en el Ministerio aparecen como `aspirantes a terceros secretarios’; crearon un rango de facto”, dijeron otra fuentes.
Misiones.
La convocatoria al concurso se publicó en la prensa en junio de 2003. El proceso duró hasta diciembre. Los 36 escogidos debían cumplir con el XIII curso de formación diplomática en el Instituto de Altos Estudios Diplomáticos Pedro Gual. “Integramos el último concurso del mandato de Roy Chaderton”, dijo Ysrrael Camero, quinto en el proceso pero que renunció tres años después.
En el primer año de información estudiaron diplomacia y relaciones internacionales.
En el segundo, trabajaron en la Cancillería.
Treinta y cinco personas comenzaron el curso en febrero de 2004 y culminaron en diciembre. “Los obligaron a ver las misiones sociales; a los que entraron en 2001 los devolvieron para estudiarlas”, precisaron fuentes.
“Hubo que estar en las misiones y se presionó a las comunidades para que nos evaluaran con parámetros distintos” indicó Camero.
Fuentes aseguraron que hubo un proceso de ideologización para garantizar la fidelidad de los diplomáticos.
Señalaron como responsables al entonces director del Instituto Pedro Gual, Jhony Balza, hoy embajador en Malí, y a Edgardo Ramírez, actual jefe de misión en Cuba.
“Una embajadora de carrera hizo lo posible por preservar la institucionalidad. Todo cambió cuando la sacaron. Ramírez tenía la lista de los que firmamos para el referéndum revocatorio de 2004; nos preguntaba e independientemente de lo que respondieramos estaba malo. Él fue un comisario político. Miguel Madriz, siendo director general, nos dijo a los 11 firmantes que 11 personas no iban a ser ratificadas”, explicó Camero.
En enero de 2005 comenzaron las pasantías. “Debimos volver a la academia para repasar asuntos ideológicos”, dijo Camero. En junio se hicieron evaluaciones, que se repitieron en enero de 2006. En febrero se les haría el test definitivo. “Nunca publicaron un baremo e incluyeron una entrevista que no estaba prevista y cuyo peso nunca conocimos.
No dieron las notas”, indican fuentes.
“En las entrevistas se veía la intención de eliminar a los no afectos al Gobierno”, aseveraron fuentes. “Fueron muchas entrevistas; yo toreaba; no me contradije pero no confronté.
Cada pregunta era un juego de ajedrez; se buscó dañarnos”, explicó Camero.
Desde esa fecha, más de 30 funcionarios esperan el informe de ratificación firmado por el Canciller. Hubo muchas promesas. Una de las últimas fue en 2010: si iban de misión humanitaria a Haití serían ratificados.
“Los dividieron en tres grupos y fueron en julio. Cuando uno de ellos estaba en la antigua sede de la Embajada en Puerto Príncipe entraron a robar; a otros los asaltaron cuando viajaban hacia un poblado. No les cumplieron”, explicaron fuentes.
Adoctrinados:
En ese año se produjo el último proceso de ingreso a la Cancillería, durante la gestión de Alí Rodríguez como titular del Despacho.
Como en 2003, los participantes cumplieron todos los pasos establecidos por la ley.
Más de 50 profesionales ingresaron al curso de formación que pasó a ser la maestría de Política Exterior de Venezuela, de la que tenían que presentar tesis, a la par de cumplir con sus pasantías en la Cancillería. Debían ser ratificados en 2009 o 2010 a más tardar. “Hubo muchos chavistas; por eso sorprende que no los hayan ratificado”, advirtieron fuentes.
“Hoy unos están en comisión de servicio en otros ministerios de forma irregular; no han sido ratificados pero comparten la visión oficial”, precisaron otras fuentes.
La formación fue más ideologizada, sobre todo en los primeros 6 meses de propedéutico. “Les hablaron del gobierno, del socialismo del siglo XXI y de las misiones”, aseveraron las fuentes.
La pasantía también se cumplió. “Hay gente no ratificada que tiene cargos que por su edad y experiencia no están preparados para asumir”, denunciaron.
Fuentes aseguraron que 30 de los terceros secretarios han defendido sus tesis, algunos obtuvieron mención publicación, pero no ha sido suficiente para ingresar a la carrera.
“Están desmoralizados y desvalidos; muchos están sin cargos; solamente firman semanalmente para garantizar su sueldo”, indicaron las fuentes.
Incertidumbre:
Fuentes coincidieron en afirmar que la Dirección de Recursos Humanos del Ministerio responsable del proceso- les ha dicho que no los han ratificado porque el jurado calificador cesó en sus funciones y no hay uno sustituto. Se intentó confirmar la información con la Cancillería pero no fue posible.
El artículo 117 de la Ley de Servicio Exterior indica que los miembros del jurado cesarán en sus funciones cuando su sucesor se juramente.
Mientras tanto, están en el cargo. “Es una excusa, el objetivo es la carrera diplomática”, denunciaron fuentes.
Juan Francisco Contreras, presidente del Colegio de Internacionalistas de Venezuela, pidió la ratificación de los funcionarios.
“Esto es una ilegalidad. Ellos tienen razón pero nadie se las dará”, lamentó Ernesto Kléber, consultor jurídico de la Cancillería.
La Asociación de Funcionarios Diplomáticos llamó a dejar de lado “falsos argumentos y a cumplir la ley vigente”.
Por: ARMANDO AVELLANEDA
aavellaneda@el-nacional.com
DENUNCIA | CANCILLERIA
Internacional | Diplomacia
EL NACIONAL
Al profesor Ysrrael Camero de la UCV le gusta acostarse con sus alumnas.