Esperan que primer preso recapturado
diga quiénes y cuantos escaparon
■ Versión oficial de fuga de presos colide con vigilancia en el penal.
■ Vecinos pasaron 27 días tragando humo y esquivando las balas de reos y GN.
■ Fue recapturado el primero de los escapados de ElRodeo II con el pran del penal.
■ Fue detenido por Poliacevedo en el marco de una pelea doméstica. El Rodeo I casi está listo y le pusieron literas de hierro.
La cerca por donde, aseguraron las autoridades, se fugó Yorvis Valentín López Cortez, alias “Oriente” de El Rodeo II, está colocada en medio de cinco garitas y frente a una montaña. Durante los 27 días que duró la toma de ese penal, todo el perímetro inmediato de esa cárcel y hasta las zonas cercanas, estuvieron rodeadas por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana. Eran en total 3.500 efectivos los que se repartían las rutinas diarias.
Según explicaron fuentes de organismos de seguridad del Estado, desde “La Torre” donde se mantenían atrincherados “Oriente” y los 49 reclusos que se fugaron con él, había que caminar unos 50 metros aproximadamente, luego romper la cerca, salir, evadir las cinco garitas y subir por la montaña hacia un cementerio que colinda con las instalaciones del reclusorio. Luego, la libertad.
Toda esta versión fue explicada de forma extraoficial. No hubo acceso a ninguno de los voceros autorizados que la confirmara o la rechazara. La única declaración ante esta situación de fuga que por medios oficiales se pudo rescatar, fue la que ofreció el miércoles el ministro del Interior y Justicia, Tareck El Aissami, en la cual aseguró que en el sitio donde fue ubicado el hueco en la cerca, no había resguardo militar.
Las autoridades insistieron en que la fuga se concretó el martes en la noche y por eso se reportó un fuerte tiroteo que duró media hora. En ese episodio, murieron cuatro reclusos. Efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) dijeron de forma extraoficial que los cuerpos fueron hallados en la montaña, sin embargo, varios reclusos le contaron a sus familiares que quedaron adentro de La Torre.
Los mismos internos aseguraron que la fuga de alias “Oriente” y de 49 reclusos más se dio el sábado en la noche.
Primeras capturas:
Este jueves en la madrugada, efectivos de la Policía del Municipio Acevedo del estado Miranda, capturaron a un hombre que responde al nombre de Johan Ríos Espinoza. La aprehensión se llevó a cabo en su residencia, ubicada en Caucagua. Al ser chequeado en el sistema policial, se determinó que debía estar preso en El Rodeo. Así dedujeron que era uno de los fugados. Fue capturado por violencia de género.
Al parecer, llegó a la casa donde estaba su esposa, preguntó por algunas pertenencias y al enterarse que habían sido vendidas, comenzó a golpearla. Los vecinos llamaron a los policías.
La información del recapturado fue oficializada por el diputado Diosdado Cabello a través de un programa en VTV.
Este jueves se informó además que la Policía de Miranda capturó a los que podrían ser dos evadidos más. Se trata de Pedro Ignacio Yerdy Vallestero, de 24 años de edad, y Alison Llermes Ponce Ribas, de 25.
Fueron interceptados por las autoridades desarrapados, con ciertas heridas en la piel, vagando por la calle. Al ser interrogados, la comisión dudó sobre su procedencia. Podría tratarse de dos reos que escaparon de El Rodeo I haciéndose pasar por obreros que trabajan en la reconstrucción de las instalaciones.
“Quiten esa cárcel de aquí”
Ayer los vecinos y comerciantes de El Rodeo volvieron a la normalidad. Luego de 27 días de vivir como secuestrados en sus viviendas y esquivando los tiros que salía casi a diario del centro penitenciario El Rodeo, los vecinos y comerciantes de este sector de Guatire intentan volver ahora a la normalidad, pero con el temor que “los fugados puedan meterse a nuestras casas en cualquier momento”.
Desde que se inició el conflicto carcelario, el 17 de junio, cerca de 20 mil personas que habitan en los sectores Terrazas y Bloques El Rodeo, Las Brisas, Carrizal, Bautismo, las Guayas y Las Casitas, ubicados en las adyacencias del centro penitenciario, no solo fueron víctimas de la toma militar que mantuvo restringido el acceso a sus viviendas y la contaminación de gases lacrimógenos; sino que tenían que mantenerse prácticamente tirados en el piso por los constantes tiroteos.
De acuerdo con los vecinos, durante el tiempo que duró este conflicto al menos un vecino quedó gravemente herido y la gran mayoría de las viviendas fueron perforadas por balas. Solo en la vivienda donde fue herido el vecino se contabilizan tres orificios de bala de todos los tiroteos que se produjeron durante los 27 días.
Ana Alvarez, quien vive en el barrio Las Brisas, ubicado a cerca de 500 metros de la cárcel, cuenta que su tío Margarito Nava (58), resultó herido el pasado martes cuando se presentó uno de los tiroteos más fuertes desde la toma, “porque decían que se estaban fugando. Eso comenzó a las 8:30 de la noche, mi tío que vive en la platabanda de la casa, había terminado de cenar cuando empezó el tiroteo, junto a mi hermana trataron de lanzarse al piso, pero en ese momento una bala de FAL le perforó el cráneo del lado izquierdo, pegó en la ventana y luego cayó en la cama”.
“Como pudimos -agregó- lo llevamos al hospital de Guatire pero no había ni un médico, luego lo llevamos al CDI de El Marques (Guatire) y de allí lo trasladaron para el hospital de El Llanito, donde permanece en cuidados intensivos. Nosotros lo que queremos es que nos ayuden y le llevamos la bala a los Guardias para que vieran y nos dieran algún oficio para trasladarlo a una clínica, pero nos dijeron que no podía porque todavía seguia el conflicto”.
Otro de los casos de heridos es el de Lucila Rojas, quien vivía en la calle 6 de El Rodeo. “Ella estaba cerrando la puerta de su casa cuando entró una bala y le rozó en una prótesis que tiene de una cadera; solo le quemó, no fue tan grave, pero el susto que pasó fue enorme y de hecho huyó del barrio, porque vivía alquilada”, afirmaron los vecinos.
“Queremos que nos quiten esa cárcel de aquí. Ahora tenemos más miedo porque se fugaron unos presos y nos pueden secuestrar dentro de la casa”, afirmó Vilaria Lara.
Servicios restituidos
Mientras eso sucedía en los barrios ubicados frente a la cárcel, en los otros sectores adyacentes todo volvían a la rutina. Los efectivos militares que mantenían una alcabala a la altura de la urbanización La Rosa decidieron retirarse, desde el martes, por presión de los vecinos y transportistas. Las líneas de transporte público operaban tal como lo acostumbran todos los días, los comercios volvieron abrir sus puertas y los camiones de recolección hicieron su recorrido por primera vez en semanas.
Literas de hierro:
El anexo de El Rodeo I, que fue el primero en ser tomado y remodelado, está listo, indicaron fuentes ligadas a la reparación del penal.
Los 350 obreros que trabajan de lunes a lunes, poco más de ocho horas cada día, cumplieron con todo el remozamiento en tres semanas. Después del cambio de las tuberías, se acomodaron los cuartos, los baños, las duchas y los lavanderos. Trabajan aún en el comedor.
Según se pudo conocer, también colocaron 576 literas de hierro, que alcanzan para 1.152 reclusos. Las mismas obras que se hicieron en “el Anexo”, se adelantan en unos galpones y en los próximos días se harán en “La Torre” de El Rodeo I. Luego se iniciarán en El Rodeo II.
Este jueves, los familiares citados para que pudieran entrar a visitar a sus pariente recluidos en El Rodeo I se enteraron al llegar que la visita había sido suspendida.
Solo les permitieron que dejaran una muda de ropa y los implementos para el aseo personal de sus presos.
Se presumen que la suspensión obedece a los traslados de los reclusos de El Rodeo II, que comenzaron en la mañana. Salieron tres helicópteros con reclusos rumbo a Yare III y El Dorado.
Alias “Yoifre” el lugarteniente de el líder de El Rodeo II, figuraba en la lista de reos que iban a El Dorado, cuando el acuerdo era que sería trasladado a la “mínima” de Tocuyito desde el Sebin, donde pasó una noche.
Por: MARÍA ISOLIETT IGLESIAS
iiglesias@eluniversal.com
CÁRCELES | EL UNIVERSAL
viernes 15 de julio de 2011
