Discusión sobre riesgos
de viviendas de PVC

■ Cinco Petrocasas se han incendiado en Carlos Arvelo.

■ Familiares del infante afectado reclaman ayuda a Pequiven, organismo que construyó el urbanismo La Esperanza Mía.

El incendio que ocurrió en la casa de Brayan Antonio Figueroa, de 3 años de edad, tiene en vilo a la comunidad La Esperanza Mía, en Mariara, estado Carabobo, integrada por 110 petrocasas, viviendas prefabricadas con policloruro de vinilo.

“Pequiven nos dijo que estas casas no se incendiaban, pero ocurrió”, dijo José Torrealba, miembro del consejo comunal del urbanismo, quien agregó que la empresa petroquímica estatal no ha entrado en comunicación con ellos a pesar de que el suceso fue registrado en la prensa local.

Brayan está recluido en cuidados intensivos del Hospital Central de Valencia donde se mantiene con un respirador artificial; no tiene quemaduras, según informaron los familiares, pero sí problemas pulmonares debido a una neumonitis producto del incendio que ocurrió el lunes 27 a las 11:00 am, cuando se quemó el colchón de la habitación donde veía televisión. Al momento del siniestro, se encontraba solo. Su madre había salido a buscar el almuerzo.

Los vecinos lo rescataron al percatarse del humo negro que emanaba de la vivienda.

Cuatro hombres tumbaron la pared de la fachada y entraron para rescatarlo. Uno de ellos, Benjamín Antonio Brito, sufrió fractura en los dedos de los pies al caerle unos pedazos de los perfiles de PVC rellenos con cemento. El cuarto quedó ennegrecido, las paredes desconchadas, el colchón reducido a resortes y el televisor totalmente derretido. Los perfiles que integran el techo quedaron colgados sobre las vigas de metal, como hojas de papel doblado.

Un llamado a Ameliach. Lisett Camacho, madre del menor, indicó ayer que los médicos le han informado que el niño está en condiciones delicadas.

“Los días los ha pasado bien, pero en las noches se descompensa. Los médicos me han llamado varias veces porque piensan que no sobrevivirá”, dijo desconsolada.

Representantes del concejo comunal se movilizaron ante la alcaldía del municipio Diego Ibarra, donde les prometieron ayuda luego de que entreguen los informes de los médicos y de los bomberos. “Hacemos un llamado al Gobierno para que nos ayude en este caso, sobre todo, al presidente de Pequiven, Saúl Ameliach”, indicó Torrealba.

Desde que en 2007, el Ejecutivo lanzó el proyecto de petrocasas como solución al déficit habitacional en el que expuso las ventajas del PVC como elemento para la construcción.

Indicó que el material es “una resina de plástico no combustible”, reciclable y de bajo costo en comparación con otros elementos tradicionales; sin embargo, la fundación Agua Clara y Provea exigieron al Ministerio de Energía más información sobre la toxicidad del PVC fabricado por Pequiven.

Inclusive, interpusieron un recurso ante el Tribunal Supremo en el que exigen conocer más sobre el material.

Ambas organizaciones argumentan su preocupación por cuanto en algunos países el PVC está eliminado como elemento para la construcción, o elaboración de muebles y juguetes.

La Fundación Agua Clara especifica que la quema o calentamiento genera vapores que pueden ocasionar toxicidad en el cuerpo humano.

En la Carlos Arvelo:

El sueño de los vecinos de “La Bolivariana” en Carlos Arvelo, se interrumpió una noche del pasado mes de mayo, por las inmensas llamas que arropaban la casa 08 de la manzana 31. Aunque no era la primera vez que vivían situación similar, el incendio de esa madrugada dejó un fallecido: un niño de 9 años.

Cinco viviendas se han incendiado en la comunidad conformada por 706 Petrocasas. La causa: cortocircuitos producidos por deficiencias eléctricas en las residencias, aseveró enfáticamente Milexis Calderón, vocera del consejo comunal, quien recalcó que las casas se entregaron con muchos defectos.

Las viviendas quedaron sin techo y las paredes reemplazaron su blancura para asemejar al carbón. Ante los repetidos incendios, vecinos se dirigieron a representantes Petrocasa y a la empresa constructora Palmichal, para exigir las mejoras. “Quedaron en venir a repararlas y modificarlas, pero no han llegado”, exclamó Calderón.

El Carabobeño intentó conocer la versión de Petrocasa, pero el vocero oficial no respondió. Sin embargo, trabajadores de la compañía resaltaron que el material con el que se construye estas viviendas (PVC) es no inflamable porque está compuesto por moléculas de cloro, las cuales desplazan las moléculas de oxígeno, uno de los componentes principales para la producción de un incendio. Explicaron que para que el PVC se funda debe estar a una temperatura mayor a 200 grados. Aseguran que aunque este material no suele incendiarse, los objetos que estén dentro de la casa sí.

Por: FABIOLA ZERPA
fzerpa@el-nacional.com
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