Mujeres viven un calvario
buscando a sus muertos
■ Víctimas de Rodeo I están en una lista aparte
■ En la Medicatura Forense de Bello Monte contaron 27 reos muertos y en la de Los Teques recibieron otros 10.
■ Grupos de esposas, madres y novias deambulan por hospitales de Caracas y Miranda buscando información sobre posibles heridos.
■ Dentro del penal todavía hay numerosos reos que resultaron heridos durante el motín y se niegan a ser trasladados a los hospitales.
■ Ante la ausencia de información oficial, se enteraron de lo ocurrido a sus familiares mediante información de los presos y listas extraoficiales. Por lo menos se calculan 37 fallecidos
Es el cadáver número 27 de los presos muertos el domingo durante el motín que se registró en Rodeo I. Harry José Pérez Naranjo, de 24 años de edad, fue llevado a la morgue de Bello Monte. En esta dependencia las víctimas son anotadas en una lista aparte a la que se lleva de los fallecidos por diferentes causas.
Entre lágrimas, Carmen Naranjo, madre de Harry José, relató el calvario que ha vivido desde que un conocido la llamó para avisarle que su hijo estaba muerto. “No podía creerlo”, dijo al recordar que la última vez que lo visitó fue el viernes y le extrañó la actitud del menor de sus tres hijos que ese día no la esperó ni la despidió como acostumbraba. Esa tarea estuvo a cargo de uno de los evangélicos de “La Torre”. La visita duró apenas dos horas y el detenido le dijo a su mamá que el ambiente estaba tenso y que lo mejor era que se fuera. Ella piensa que ese día su hijo estaba presionado y que el motín fue aprovechado para matarlo. Anteriormente estuvo en el internado de Los Teques y en Yare, en este último le dieron cuatro tiros.
Harry José fue sentenciado a 11 años por robo agravado, tenía 2 años preso y un juez de ejecución le daría un beneficio. La madre responsabilizó al juez de juicio por la muerte del joven porque éste había pedido que lo enviaran a Yare III y no le hicieron caso.
El domingo, después de las 4:00 pm, Naranjo recibió una llamada de su hijo que le dijo: “Mamá, te amo mucho, te quiero mucho”, pero a una de sus hermanas le escribió: “Hermana estoy herido, pero estoy bien. Te amo mucho”.
Naranjo relató que cuando Harry José la llamó, ella sintió tristeza en su voz.
Pérez Naranjo estaba en La Torre porque tuvo que salir de otra área pues debía mucho dinero de la “causa” y la madre no tenía para darle la contribución semanal que debe pagar para diferentes tareas, entre ellas, fiestas de los días del padre y de la madre cuando la cuota es de 100 bolívares.
Vía Internet:
Madres, esposas, hermanas y novias de los presos de Rodeo I deambulan por hospitales y morgues de Caracas y Miranda en busca de información para saber si sus seres queridos están heridos o muertos. Se quejan de la falta de información oficial.
Tibisay y Aura González son las hermanas de Yorwill Jackson Antequera Rodríguez, de 20 años de edad, que estaba recluido en “La Torre”. Tenía 9 meses en Rodeo I, por robo a mano armada.
Ambas recorrieron hospitales y morgues sin hallar al detenido, pero el martes en la noche hubo una llamada que les notificó que el recluso había muerto y eso lo constataron en la página Web de un periódico que contiene una lista. Fue llevado al hospital de El Llanito.
Aura González expresó su indignación por la falta de atención a los familiares de los presos que murieron. “Estoy muy molesta porque el deber del Estado es informar lo que pasó allí. Fuimos a los hospitales y no lo conseguimos. El culpable es el Gobierno porque allí hay droga y armas de fuego. ¿Me pueden explicar como entró todo eso?”.
En la fosa:
Luis Alberto Rivas, de 26 años de edad, estaba recluido en el Anexo, piso 2, de Rodeo I y murió de un tiro en la cabeza. El cuerpo fue llevado a la morgue de Bello Monte el lunes en la noche; sin embargo, su familia se enteró a las 8:00 pm de ese día, cuando un recluso llamó para informar que el cadáver estaba en una fosa del penal. Los parientes estuvieron buscando a Rivas en los hospitales porque no figuraba en la lista de muertos y heridos que había en Rodeo I y se quejaron porque las autoridades del penal no dieron información, y porque la Guardia Nacional los insultó y los empujó. Los Rivas llegaron el martes a la morgue para reconocer el cuerpo.
Rivas, que era evangélico, tenía tres años preso. Lo sentenciado a ocho años por robo.
Si a la morgue de Caracas fueron llevados 27 cadáveres procedentes de Rodeo I y si a la medicatura forense de Los Teques trasladaron 10 cuerpos de ese mismo penal, el total sería 37 víctimas. Esta cifra sería la más alta en un penal.
“Preferimos morir aquí, a que nos piquen en otra cárcel”
A pesar de la aparente normalidad que, hasta ayer, se observaba a los alrededores de Rodeo I, en el interior del penal se respira tensión, porque las diferencias entre los reclusos de La Torre y el Anexo no han sido dirimidas.
Los presos aseguran que los líderes de La Torre negociaron con la Guardia Nacional y las autoridades del penal para que trasladaran a otros penales sólo a los reos del anexo.
“No hemos dormido desde el domingo. No vamos a dejar que entre ni salga nadie para traslado. Preferimos morir aquí, en nuestra casa, a que nos piquen en pedacitos cuando lleguemos a otras cárceles, porque cayó una visita y eso se paga con la vida. Además, que hay compañeros que tienen problemas en otros lados y eso también es peligroso”, contó un recluso.
Dentro del penal todavía hay numerosos heridos -algunos más delicados que otros-, entre ellos el líder del penal, conocido como “Freddy Mechita”, quien se creía que estaba muerto. Según algunos compañeros, no está muy bien de salud, pero fue uno de los que se negó a ser trasladado a los hospitales.
Ayer, después de la zozobra que hubo debido a la suspensión de la visita, todo se tranquilizó a las afueras del penal luego que las autoridades le anunciaron a un grupo de punteras que pasarían las bolsas con comida, agua y medicamentos para los reclusos.
Por: SANDRA GUERRERO
sguerrero@el-nacional.com
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