Temen ser secuestrados otra vez

■ Aseguran que la GN es cómplice de los reclusos.

■ Hoy se inicia la mesa de trabajo entre el MIJ, familiares y los reos.

Ayer en la mañana los empleados del área administrativa de la Casa de Reeducación Artesanal de el Paraíso, mejor conocida como La Planta, se negaron a trabajar en el penal por temor a ser otra vez víctimas de un secuestro o de algún otro hecho de violencia.

Ello ocurrió a pesar de que las autoridades del Ministerio de Relaciones Interiores y Justicia dieron su palabra de que la situación dentro del retén se había normalizado, después de que el sábado liberaron a los 16 funcionarios que fueron retenidos el viernes.

“Necesitamos que nos den garantías de que en un próximo conflicto no se meterán con nosotros. No es posible que tengamos que venir a trabajar, corramos riesgos de que nos maten y a nadie le importa”, expresó una de las funcionarias de La Planta. Solicitó que su nombre no se revelara, pues denunció que en las reuniones que han tenido con Consuelo Cerrada, directora de los Servicios Penitenciarios, han sido amenazados con despidos, si se quejan de las condiciones de trabajo.

Zozobra:

A las 8:00 am todos los empleados se congregaron en la entrada del retén. La mayoría son mujeres mayores de 45 años de edad. Cuando entraron y vieron que las condiciones de seguridad no eran óptimas, decidieron abandonarlo y esperar en las adyacencias hasta que culminara el horario laboral, a las 4:00 pm.

La calma que hubo el domingo tras el ingreso de la visita se vio interrumpida el lunes en la mañana. Mientras salían las mujeres que pasaron la noche dentro de la cárcel, llegó Miguel Jiménez, el funcionario que ocupó el cargo de jefe de Custodia y Seguridad penitenciaria en el Rodeo II y que fue destituido por petición de los reclusos que secuestraron a los 22 empleados durante 8 días.

Jiménez llegó acompañado por un grupo de funcionarios del MIJ y de los miembros del Equipo de Respuesta Inmediata Carcelaria, para acondicionar el área de la dirección y la secretaría que fueron saqueadas por los reclusos y organizar el espacio donde hoy se instalará la mesa de trabajo en la que participarán los presos, familiares, autoridades del Ministerio Público del MIJ y el sindicato de la dirección de los Servicios Penitenciarios.

Los empleados que esperaban frente al penal denunciaron que los reos soldaron la reja que da acceso a la zona administrativa, con el alegato de que de esta manera la guardia no podrá pasar a los pabellones a arremeter contra ellos.

“Los reos no quieren a Jiménez aquí tampoco, por eso nos salimos, porque se molestaron cuando lo vieron. Es un riesgo porque si se arma un tiroteo nosotros no podremos salir con esa reja soldada”, dijo la empleada de La Planta.

Mafias militares:

 “Nosotros quedamos en medio de todo el problema, porque a los presos sólo les importa su familia. Mucho de lo que pasa ahí es culpa de la mafia que tienen los guardias”, dijo la funcionaria.

La mujer comentó que los reos manejan recursos económicos incalculables que les permiten comprar las armas vendidas por los militares y pagar por otros privilegios que nadie se imaginaría que existen dentro de un penal. “¿Cómo es posible que los presos tengan un jacuzzi, Directv, televisores plasma, armas de todo tipo, una vende-paga de caballos y una miniteca, y que cuando hay cumpleaños contratan mariachis y strippers.

Además hay redes de prostitución, mujeres que sólo vienen a trabajar para ellos, cobran y se van y una vez hasta le celebraron los 15 años a la hija de uno de los presos, y todo eso con complicidad de la guardia”, expresó la empleada.

Por: THABATA MOLINA
tmolina@el-nacional.com
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