Keiko 40.6% y Humala 37.9%

Hace poco más de diez años se enfrentaron dos visiones de la política, dos proyectos para el Perú. Fue en octubre del año 2000 cuando un fallido levantamiento militar le dio un espacio en prensa al entonces Comandante Ollanta Humala, quien había decidido rebelarse contra el gobierno de Alberto Fujimori. Para la fecha Keiko Fujimori, primogénita de Alberto, ejercía las funciones de Primera Dama.

Ahora un nuevo enfrentamiento Humala – Fujimori se avecina, tiene fecha y reglas de juego definidas. El 5 de junio de 2011 Ollanta Humala y Keiko Fujimori se encontrarán en las urnas electorales, para disputarse la Presidencia del Perú. Deben plantearse nuevas estrategias y la inclusión de aliados para asegurarse el triunfo.

Ollanta se dispone a afianzar su imagen de izquierdista moderado para captar la mayoría de votos posibles, por lo que se ha mostrado abierto al diálogo con las fuerzas del centro. Asimismo pidió que no se le vinculara con Hugo Chávez y aseguró que como presidente del Perú reforzaría las relaciones con Estados Unidos.

Aparentemente, Humala está esperando recibir votos de los seguidores de Alejandro Toledo, en tanto Javier Diez Canseco, candidato al Congreso, aseguró que hay puntos en común con la plataforma de Perú Posible en materia de Derechos Humanos que pueden ser factor de acercamiento entre ambos grupos.

En declaraciones para el Diario El Comercio de Perú Castañeda aseguró que aunque aún no habían tomado una decisión partidaria, sería un factor importante para determinar a quien apoyarían en segunda vuelta “el respeto a la Constitución y la no utilización de esta como pretexto para llamar a una Asamblea Constituyente”, reiterando que el modelo chavista es “fracasado y obsoleto”. También Alejandro Toledo dejó entrever sus preferencias, declarando que Perú “no puede regresar al pasado oscuro de los 90 ni arriesgar lo que se ha logrado hasta ahora”, haciendo clara alusión a Keiko Fujimori.

Kuczynski ha sido más cuidadoso con las declaraciones que ha dado, reconoció que Toledo, Castañeda y su persona habían dividido los votos de los sectores democráticos, y ahora habría que hacer una elección difícil “Ollanta me parece más peligroso, pero la otra parte también tiene sus bemoles”, aseguró.

Son los factores de centro quienes tuvieron siempre en sus manos la oportunidad de definir la mejor opción para Perú, sin embargo la imposibilidad de lograr acuerdos entre sí los fija ahora en una posición donde ayudarán a inclinar la balanza a favor de una de las dos propuestas: la posible anexión de Perú como un país aliado a la Revolución Bolivariana, o favorecer a la hija del dictador de la década de los 90.

Encuestadora Datum:

Según Datum Fujimori ganaría a Humala por estrecho margen. La conservadora Keiko Fujimori vencería por un ajustado margen al nacionalista Ollanta Humala en el balotaje por la presidencia de Perú, aunque la cantidad de indecisos sigue alta faltando unas tres semanas para el comicio, mostró el jueves un sondeo de Datum.
La aspirante considerada amiga del mercado lograría el 40,6 por ciento de los votos el 5 de junio, mientras que el candidato izquierdista que inquieta a los inversores alcanzaría el 37,9 por ciento, según la más reciente encuesta realizada por Datum a nivel nacional urbano-rural.

A los contendores los separa una brecha de 2,7 puntos porcentuales.
El estudio, publicado por el diario Perú 21, confirma la tendencia alcista reflejada por Fujimori en otros sondeos y, en este caso, muestra un declive en el apoyo a Humala.

No estuvo disponible en forma inmediata la ficha técnica con el margen de error ni la fecha del trabajo de campo.

En la anterior encuesta de Datum, divulgada el domingo, Fujimori obtuvo el 39,1 por ciento de la intención de voto y Humala el 40 por ciento. La misma tenía un margen de error de 1,4 puntos.

Otra encuesta de la respetada firma Ipsos Apoyo dio por primera vez el fin de semana una leve ventaja a Fujimori de cara al balotaje, aunque dentro del margen de error.

El sondeo de Datum incidiría en los mercados peruanos, que han estado sensibles a las encuestas electorales.

La moneda local, el sol, y la bolsa limeña cayeron después de la primera vuelta del 10 de abril, aunque en las últimas jornadas han recuperado parte de sus pérdidas debido a que los operadores apuestan a un triunfo de Fujimori.

Los inversores y agentes financieros consideran que la legisladora mantendría en pie los lineamientos que han hecho de Perú una de las economías de mayor crecimiento en el mundo.

LUCHA CAMPAL POR INDECISOS:

Fujimori y Humala lucharán con fuerza en lo que resta de la campaña por conquistar el apoyo de los indecisos y de la mitad del electorado que no votó por ellos en la primera ronda.

Un 21,5 por ciento de los encuestados dijo que anulará o dejará su voto en blanco o reconoció que no sabe a quién elegir, detalló Datum, lo que será clave a la hora de inclinar la balanza en el balotaje y dificulta predecir su resultado pues el electorado peruano es muy volátil.

Una batalla crucial será Lima, que congrega un tercio del electorado y fue la única plaza ganada por el economista Pedro Pablo Kuczynski, quien arribó tercero en la primera vuelta.

Hasta el momento, la legisladora se habría posicionado mejor en la capital, mientras que el líder nacionalista mantiene como bastiones zonas empobrecidas a las que ha prometido llevar el auge de la bonanza económica.

DUDAS PERSISTENTES:

Pese a que el candidato ha buscado mostrarse como un izquierdista moderado, varias de las propuestas de su plan de gobierno siguen despertando dudas.

Algunos consideran que sus planes populistas pondrían en riesgo la estabilidad fiscal del país y cifras de crecimiento similares a las de China, pese a que éste ha dicho que respetará las reglas vigentes y sumó tecnócratas a su equipo.

Asimismo, críticos y muchos medios locales lo acusan de tener un “doble discurso” debido a que su tono cambia cuando aborda a los empresarios y habla en zonas rurales.

En un esfuerzo por aplacar los temores, un portavoz del equipo de Humala dijo que revelarían esta semana modificaciones al plan de gobierno, con lo que buscarían revertir el descenso en las preferencias electorales de las últimas semanas.

En el caso de Fujimori, analistas consideran que en la recta final de la campaña deberá desmarcarse con más fuerza de su padre, el ex presidente Alberto Fujimori preso por abusos contra los derechos humanos y corrupción.

La candidata ya ofreció una disculpa por los delitos cometidos durante la década en el poder de su progenitor, pero el legado de su gobierno sigue siendo el mayor pasivo de su candidatura, según analistas.

Por: REUTERS / Patricia Vélez
Dorianna Villafranca
@DoriannaV