Ultimaron a un adolescente
mientras volaba un papagayo

■Conductor recibió 7 disparos por chocar vehículo en la vía hacia La Colonia Tovar

■ En el tiroteo fueron heridas otras siete personas que fueron trasladas a varios hospitales de Miranda.

Un funcionario de la Policía Nacional, identificado con el nombre de Elvis Suárez, mató a uno del Cicpc y a un niño de 4 años de edad, el jueves a las 11:00 pm, en medio de una pelea que terminó en tiroteo, en la población de Tapipa, Miranda.

Las víctimas respondían a los nombres de Wilfredo Landaez, de 32 años de edad, agente adscrito a la subdelegación de Higuerote ­recibió 4 tiros­, y el niño Jerones Sifontes, quien recibió un tiro en el pecho.

Extraoficialmente se supo que ambos funcionarios policiales iniciaron una discusión, supuestamente porque el hermano del Cicpc dijo algunas palabras a la esposa del polinacional. Esta situación provocó que primero se dieran golpes y finalmente Suárez fue a buscar su arma de reglamento y se enfrentó a Landaez. En ese tiroteo otras siete personas fueron heridas y tuvieron que ser trasladados a distintos centros de salud de Miranda.

En Petare:

El miércoles al mediodía mataron a un adolescente de 17 años de edad en el sector El Chorrito del barrio Brisas del Zulia, en Petare.

El muchacho fue atacado por los integrantes de una banda delictiva, quienes llegaron a la zona supuestamente a buscar a los rivales y al no conseguirlos dispararon contra el muchacho y dos amigos que se encontraban volando papagayos en la platabanda de una casa.

El adolescente se llamaba Jesús Castellano, era estudiante de segundo año de bachillerato y eventualmente trabajaba como albañil con los familiares.

Su cadáver fue uno de los 25 ingresados a la morgue de Bello Monte entre el martes 19 en la tarde y el viernes en la mañana.

Castellanos recibió tres tiros y fue trasladado por su madre, Carmen Torres, hasta el hospital Domingo Luciani de El Llanito, pero llegó muerto.

Otra de las víctimas de la violencia durante la Semana Santa fue Ana Méndez, de 37 años de edad. Fue asesinada el miércoles en la madrugada, frente al bloque 5 del 23 de Enero.

Méndez estaba sentada frente a la casa de su comadre celebrando que le había nacido un nieto, junto a otras personas. Todos salieron corriendo cuando se armó un tiroteo y un hombre al que perseguían se les metió en la vivienda. Este sujeto le disparó al confundirla con los delincuentes que lo acosaban. La señora fue trasladada hasta el hospital de Lídice donde falleció después de ser operada.

Bala perdida:

El jueves en la tarde mataron a Rafael Castro, de 45 años de edad, cuando caminaba hacia su casa, en el sector Casa Blanca de La Pastora. Su cuñado, Juan Castro, contó que una bala perdida lo hirió en el pecho y que falleció al ser trasladado hasta el hospital de Lídice.

En la madrugada del jueves también mataron a Miguel Berríos, de 27 años de edad, cuando salió con unos amigos a comprar bebidas alcohólicas, en Las Adjuntas. Sus familiares relataron que la víctima había pasado toda la noche tomando y que a las 4:00 am se les acabó la bebida, por lo que salieron a buscar algún local y fueron sorprendidos por unos hombres armados, quienes les dispararon.

La Colonia Tovar:

Bernardo Gerig tenia 42 años, vivía en la Colonia Tovar junto a su esposa y su hija de 13 años. El jueves en la noche iba con su hermano por el kilómetro 33, vía Colonia Tovar, El Junquito. Inicialmente tuvieron un choque leve con otro carro, pero el conductor del otro vehículo se bajó y les disparó.

Gerig recibió 7 disparos, 5 en el abdomen, 1 en un brazo y otro en la pierna. Su hermano, quien también recibió 3 disparos, logró llevarlo al Hospital Perez Carreño. Allí lo operaron dos veces, pero murió la tarde de este viernes tras sufrir 2 paros cardíacos, producto de las complicaciones por el incidente.

Su esposa, Sidgia Sarmiento manifestó: “no entiendo en el país que nos hemos convertido. Le disparó porque le dio la gana y ya. No puede ser”.

Por: THABATA MOLINA
tmolina@el-nacional.com
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