Gobierno reconoce que las
tarifas bajas impiden ahorro

■ En Cadafe hacen faltan 2,5 millones de medidores.

■ Diputados de la Asamblea Nacional observaron retrasos en cinco plantas de generación térmica.

■ La situación afecta las finanzas de Corpoelec, que aplicará cortes a los morosos del sector público, dijeron fuentes de la empresa.

■ Se reactivó venta de plantas eléctricas, precios subieron 25% el apagón de la semana pasada reanimó la demanda, que había bajado después de la suspensión de la emergencia eléctrica el año pasado.

El índice de energía no facturada en el sistema eléctrico, las pérdidas que registra por aspectos técnicos y tomas ilegales, aumentó 20,8% en 2010, con respecto a 2006, último año que estuvo presente el sector privado en esta área energética.

“Durante muchos años se han dedicado esfuerzos y recursos para su solución; sin embargo, la situación persiste y la tendencia va a un incremento del problema”, reconoció el Gobierno hace cinco años cuando presentó el Plan de Desarrollo del Servicio Eléctrico Nacional.

En 2006, las pérdidas fueron de 26.742 gigavatios hora, que es la medida de potencia energética que surge entre la generación y la energía no facturada, y eso representa 23,46% de la energía producida. El año pasado ese índice se elevó a 32.329 gigavatios hora, para abarcar 28,78% de la generación, según la memoria y cuenta del Ministerio de Energía Eléctrica de 2010.

El reporte anual no menciona la continuidad de los proyectos que desarrollaban las empresas privadas cuando el Estado asumió el control del sector en 2007.

Otro aspecto que ha reconocido el Gobierno es la imposibilidad de avanzar con programas educativos dirigidos a propiciar el ahorro eléctrico mientras no se revisen las tarifas. Se advierte que desde hace 30 años se ha intentado llevar adelante planes con esa orientación, pero no se han obtenido resultados.

“Si bien han existido políticas públicas sobre el uso racional y eficiente de la energía, no han sido efectivamente instrumentadas dada la falta de continuidad y la poca prioridad que se le ha dado al tema … La estructura del sistema de precios de la cadena energética no ofrece señales que propicien el uso racional de la energía y en particular de la electricidad”, señaló el Gobierno hace cinco años.

Revisión parlamentaria:

Los diputados de la oposición, miembros de la Comisión de Energía y Minas de la Asamblea Nacional, emprendieron un plan de inspección de las obras que anunció el Ejecutivo, con el apoyo de dirigentes sindicales del sector.

“La crisis eléctrica no es culpa de la iguana, de los papagayos, los pájaros, El Niño, sino del Gobierno que se comprometió a ejecutar obras que todavía no se han concluido”, dijo el diputado Gustavo Marcano, de Primero Justicia.

El parlamentario indicó que revisaron las obras de las plantas termoeléctricas Alberto Lovera en Puerto La Cruz y la de San Diego de Cabrutica, ambas en el estado Anzoátegui, al igual que la de Cumaná, estado sucre, que debieron entregarse en 2008 y sólo tiene 50% de ejecución.

El vicepresidente de la Comisión de Energía y Minas, Alberto Barreto Sira, de Acción Democrática, propuso la semana pasada que se interpele al ministro de Energía Eléctrica, Alí Rodríguez Araque, pero el titular de esa dependencia, Luis Acuña, diputado del PSUV, consideró que por el momento sólo seguirán las reuniones con técnicos de ese despacho.

Medidores:

La Compañía Anónima de Administración y Fomento Eléctrico es un peso para la solvencia financiera de la Corporación Eléctrica Nacional, dijo el dirigente sindical, Jhonny Echezuría. “Cadafe no cobra más de 40% de la energía que factura y tiene un déficit de 2,5 millones de medidores”, agregó.

El secretario general del sindicato de Monagas-Delta Amacuro indicó que los problemas de cobranza obstaculizan el proceso de fusión de las empresas en una sola corporación (Corpoelec).

“En Monagas hay 150.000 suscriptores y faltan 60.000 medidores”, afirmó Echezuría.

Agregó que además de la electricidad sin cobrar por la falta de medidores, está la morosidad, principalmente de los organismos oficiales.

Manuel Alí Araque, director de Distribución y Comercialización de Corpoelec Monagas, anunció el operativo para cobrar a los morosos del estado con entre 3 y 65 recibos vencidos, a los que le cortarán la luz si no cancelan la deuda.

Para evitar la suspensión del servicio, el usuario puede llegar a un convenimiento de pago con Corpoelec: cancela 30% de la deuda y el resto en porciones, señaló.

Se reactivó venta de plantas eléctricas:

Desde el apagón del jueves, que afectó 18 estados del país y se prolongó por más de una hora, las plantas eléctricas volvieron a colocarse en la lista de prioridades de los venezolanos. Avisos en los medios de comunicación impresos lo reflejan.

En pocos días las ferreterías han notado un incremento en el número de consumidores interesados en adquirir uno de los equipos. “Hemos vendido cinco plantas eléctricas en los últimos cuatro días”, expresó César Reyes, encargado de Campi Ferretería.

Jorge Botti, director del sector comercio ante Fedecámaras, dijo que después de que se suspendió la emergencia eléctrica en agosto de 2010 (decretada por el Ejecutivo en febrero de ese año) disminuyó el interés entre los consumidores en comprar plantas de energía, por lo que a muchos establecimientos le quedaron varios de estos equipos sin vender.

José Martínez, de Comercial La Cadena, coincidió con Botti. Desde que se levantó la crisis eléctrica el año pasado, las ventas de estos equipos bajaron 30%, dijo.

“Pensando que el racionamiento duraría más tiempo, los comerciantes importaron cantidades importantes de plantas que se les quedaron frías; pero con el apagón de la semana pasada seguramente las comercializarán rápidamente”, añadió Botti.

Samuel Garaicochea, de Ferretería Antonio Guzzo –establecimiento que el domingo publicó en un diario de circulación nacional un aviso en el que ofrecía plantas eléctricas-señaló que el local tiene en inventario equipos del año pasado y que en aproximadamente 15 días llegarán más plantas, lo que refleja que la empresa hizo nuevos pedidos.

En lo que se refiere a precios, César Reyes indicó que en comparación con 2010 subieron alrededor de 25%. De acuerdo con el uso –doméstico o industrial– los equipos se pueden conseguir desde 850 hasta 300.000 bolívares. Garaicochea apuntó que los equipos más grandes, que funcionan con diesel, pueden durar encendidas hasta 15 horas ininterrumpidas, pero no más.

Por: ANDRÉS ROJAS JIMENEZ
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