“¡Que cese la persecución sindical!”
■ Grupos sociales del Zulia exigen eliminar juicios a dirigentes sindicales.
Es una exigencia que une a la oposición y al oficialismo. El Partido Comunista y la Unión Nacional de Trabajadores marcharán el 31 de marzo en Caracas en protesta por los juicios contra los dirigentes laborales, una nueva Ley Orgánica del Trabajo y por la estabilidad laboral; mientras que hoy en Maracaibo, estado Zulia, 7 organizaciones sociales que anunciarán su adhesión al Polo Patriótico, firmarán un documento en rechazo a las acciones judiciales y al asesinato de líderes sindicales. Los grupos son Únete Zulia, los sindicatos de Hidrolago y del hospital Coromoto, Red Socialista, Canal Z, Cooperativa Odos, Colectivo Revolucionario Juana de Ávila y Escuela de Formación Nuestra América.
Douglas Gómez, coordinador del movimiento sindical del PCV “Cruz Villegas”, advirtió: “Hay una ofensiva de la patronal privada, inclusive la patronal pública, que pretende criminalizar la protesta, amenazando a dirigentes sindicales y a delegados de prevención frente a la lucha por sus demandas”. Entre los casos están los dirigentes de Bolívar Rubén González detenido por manifestar a favor de los trabajadores y William Saud, que está enfermo.
Gómez dijo que marcharán también por otras razones: contra la violación sistemática del derecho a la negociación colectiva, que en la administración pública está paralizada; por un reajuste general de sueldos y salarios, y para exigir al Ministerio del Trabajo que responda a la calificación de despidos. El oficialismo prepara, además, los actos del 1 de mayo que buscan posicionar a la clase obrera como “sujeto histórico y conductor de la revolución venezolana”.
Plan transitorio:
A las demandas del PCV y de Únete se incorporarán hoy en Maracaibo grupos que participan en el “I Encuentro de Organizaciones Sociales, Trabajadores y Colectivos Políticos, hacia la participación en el Polo Patriótico”, en el club Inavi ubicado en la urbanización La Trinidad, donde aprobarán el Manifiesto del Zulia.
En el documento proponen elaborar un “plan de transición revolucionario socialista que blinde el proceso y termine de ganarse a los hermanos de clase que son presas de las maniobras de la oposición, de la derecha capitalista y lacaya del imperialismo”, y otro que construya la unidad del movimiento popular y los trabajadores.
Este último contempla:
El levantamiento de los procesos judiciales contra dirigentes sindicales, indígenas y luchadores sociales, “víctimas de expedientes tratados en tribunales ordinarios que los mantienen privados de libertad o en régimen de presentación”, y el cese a la criminalización de la lucha de trabajadores, sindicalistas y delegados de prevención.
Exigen “respuestas contundentes del Estado” para salvaguardar la vida de dirigentes sindicales, campesinos y líderes populares frente al sicariato que atribuyen a sectores de la burguesía, terratenientes y grupos violentos de la contrarrevolución, así como solicitan que se investiguen estos casos y que sean condenados los autores materiales e intelectuales.
Los zulianos propugnan la unidad de las fuerzas revolucionarias para construir el socialismo y quitarle el estado occidental a Un Nuevo Tiempo. “El peligro real que enfrenta la revolución bolivariana viene desde adentro. Una burocracia, apoderada del aparato del viejo Estado burgués, actúa como agente de éste y se asocia a una naciente burguesía local que hace negocios con el Estado y transnacionales, la burocracia usufructúa la renta petrolera, hace una distribución regresiva y hace fracasar los planes del presidente Chávez”, indican en el manifiesto.
Denuncian intentos por aislar a Hugo Chávez: “En Venezuela la derecha, animada por los resultados del 26 de septiembre y su presencia en la Asamblea Nacional, lanza una nueva ofensiva contra la revolución, calienta la calle con huelgas de hambre, y el discurso hipócrita y demagógico de impulso a leyes de carácter social”.
Oficialismo sindical en pugna:
En abril darán vida a CORS. Chavismo sindical se divide y surge otra central. Instan a Unete a integrar la nueva organización laboral y crear el polo patriótico de los trabajadores.
El sector sindical del chavismo se fractura. A partir de abril nacerá la Central Obrera Revolucionaria y Socialista que desplazará a la Unión Nacional de Trabajadores, que surgió para enfrentar a la CTV.
Un grupo de dirigentes y trabajadores de las federaciones Unitaria de Trabajadores del Petróleo, Gas y sus Similares y Derivados de Venezuela, de los Trabajadores Eléctricos y del Sindicato de Ferrominera Orinoco convocó una asamblea entre el 8 y el 9 de abril en el hotel Alba Caracas para ese objetivo y para formar el “gran polo patriótico de los trabajadores”.
Will Rangel, dirigente petrolero; Ángel Navas, de Fetraelec, y el secretario de Organización de Ferrominera, Alfredo Spooner, defendieron la nueva instancia que contará con 1.000 delegados en la asamblea. “Es el gran sueño de los trabajadores revolucionarios y clasistas; llamamos a Unete a que se incorpore para crear la central revolucionaria, socialista y clasista”, instó.
Ángel Navas dijo: “Serían bienvenidos todos los trabajadores revolucionarios y que acompañen al Gobierno bolivariano. Será un momento histórico. Todos sabemos la necesidad que tienen los trabajadores de una central obrera que unifique a todos los trabajadores revolucionarios. Una revolución no se profundiza sin los campesinos, pescadores, trabajadores de las industrias básicas y petroleros”. Alfredo Spooner informó que el viernes 25 marcharán en Bolívar en defensa de las empresas básicas y del control obrero.
Por: HERNÁN LUGO-GALICIA
hlugo@el-nacional.com
Política | Opinión
EL NACIONAL