Marisol Valles, ha huido del país por
las amenazas del crimen organizado
■ Ella aceptó en octubre el cargo en una localidad cercana a Ciudad Juárez.
La joven estudiante que fue nombrada jefa de la policía de una ciudad al norte de México en octubre pasado por falta de otros candidatos al puesto ha pedido asilo político a los Estados Unidos, después de recibir amenazas del crimen organizado, según indicó ayer un familiar a France Presse.
Marisol Valles, casada y de 20 años, «se ha trasladado a los Estados Unidos con dos miembros de su familia y ha pedido asilo político, porque recibió amenazas de muerte por parte de una banda criminal que quería obligarla a trabajar para ella», afirma el familiar, que ha requerido el anonimato.
La joven fue nombrada en octubre jefe policial de Práxedis Guadalupe Guerrero, una ciudad de 10.000 habitantes situada en el estado de Chihuahua.
Marisol era todavía estudiante de criminología en Ciudad Juárez, a 60 kilómetros, pero todos los demás candidatos rechazaron el puesto y ella aceptó la pesada carga. El alcalde de Praxedis Guadalupe Guerrero había sido asesinado en junio, junto a su hijo.
La partida de Marisol Valles a los Estados Unidos se produce tras el secuestro el 26 de diciembre de Erika Gandara, la única policía municipal del poblado de Guadalupe Distrito Bravos (vecino de Ciudad Juárez), de la que no se tiene noticia.
En el municipio de Guadalupe, Erika era la única agente de Policía en funciones desde el pasado mes de junio, debido a que nadie se presentó para el puesto ante el temor de ser asesinado.
Marisol era la quinta mujer que dirigía uno de los departamentos de Policía de varios poblados conflictivos del Estado norteño. Quedan Verónica Ríos Ontiveros, comisaria en El Vergel, y Olga Herrera Castillo, quien se encarga de la seguridad en Villa Luz. «De repente me da miedo, pero me animan y se me quita», confesó Herrera, de 43 años y madre de cinco hijos.
Ese miedo reaparece con noticias como la del pasado 29 de noviembre cuando un grupo de sicarios asesinó a tiros a Hermila García, la primera jefa de Policía víctima del crimen organizado en el poblado de Meoqui.
O cuando se recuerda que en 2008 fue asesinada la directora administrativa de la Policía en Ciudad Juárez, Silvia Molina.
Ciudad Juárez, con más de un millón de habitantes y fronteriza con Estados Unidos, es la ciudad más violenta de México con más de 3.100 muertos en 2010.