Se crean “comités populares” en Bengasi
■ Civiles se encargan de la seguridad desde la frontera con Egipto hasta Bengasi.
■ “El único miedo que tenemos es que Gadafi envíe más mercenarios”
■ WikiLeaks desnuda derroche de los Gadafi.
Los comités creados en diferentes barrios de la ciudad han tomado como base la mezquita Saad Ben Zeid, y se han diseminado por toda su extensión para proteger las empresas y otros bienes públicos y privados y recuperar lo que se ha robado en los saqueos realizados, según las fuentes.
El dictador libio, Muamar Gadafi, está perdiendo el control de parte del país. Desde la frontera con Egipto hasta la segunda ciudad de Libia, Bengasi, los comités populares se han hecho dueños de la situación.
No se ve un solo militar, mejor dicho, un solo uniforme, ya que muchos soldados se han despojado de su vestimenta oficial y ayudan a controlar el territorio libio vestidos de civil y fuertemente armados con kalashnikov.
Los habitantes libios de la ‘zona liberada’ enarbolan banderas anteriores al régimen de Gadafi y corean consignas a favor de una monarquía, ligándola a la ansiada libertad.
En la ciudad de Tobruk, cientos de personas se manifestaban esta mañana a favor de la democracia y en contra del dictador. En la localidad hubo tres días de revueltas, en las que murieron cuatro personas. Donde sigue habiendo muertos en las calles es en la ciudad de Bengasi.
“El único miedo que tenemos es que Gadafi envíe más mercenarios para retomar el control”, decía Alá Faddala, miembro de uno de los comités populares que ‘gobiernan’ Tobruk. “Pero incluso así, no nos rendiríamos”, añadía.
La situación copia el esquema de la revolución egipcia, al más puro ‘estilo Tahrir’, la plaza de El Cairo donde se gestó y triunfó la revuelta. Los comités populares se encargan de gestionar y organizar todo, el día a día, la seguridad en las calles, en las carreteras (fuertemente vigiladas por civiles armados), la limpieza, el reparto de comidas…
WikiLeaks los Gadafi:
El periódico estadounidense The New York Times analiza los documentos filtrados en el sitio en internet WikiLeaks sobre las excentricidades de la familia del mandatario de Libia, Muamar Gadafi.
El diario cita el pago de un millón de dólares a la cantante estadounidense Mariah Carey para que interpretara cuatro canciones en una fiesta organizada por uno de sus hijos, Saif al-Islam Gadafi, en la isla caribeña de San Bartolomé, en 2009.
El hecho fue negado por Saif al-Islam en uno de los periódicos del cual es propietario. De acuerdo con él, el malbaratador es su hermano Muatassim, señala uno de los documentos de la diplomacia estadounidense en Tripoli que fue filtrado.
También, según ese documento, Muatassim le pidió en 2008 US$1.200 millones al presidente de la corporación estatal de petróleo libia para financiar una milicia destinada a proteger al gobierno.
Gadafi tiene ocho hijos. Sin embargo, Al-Saadi –jefe de las Fuerzas Armadas-, Mutassim y Khamis, son en los que el gobernante se apoya en los momentos de necesidad.
Saif al-Islam desempeña un papel destacado en el panorama político y suele representarlo en actos oficiales. De hecho, fue la primera cara del gobierno libio que salió a defender a su padre en medio de los disturbios del domingo en la noche.