Sede del Grupo Boulton
aloja damnificados

La filial de Pequiven comenzó a descargar piezas de PVC para construir 40 albergues por piso.

Las piezas que sirven para hacer las petrocasas no sólo se utilizan para levantar viviendas unifamilares agrupadas en urbanizaciones, como había adelantado Pequiven, sino que ahora también se emplearán como paredes para hacer como una suerte de apartamentos en los edificios ocupados por damnificados.

La primera prueba comenzó en la Torre El Chorro en la avenida Universidad en Caracas, donde ayer, pasado mediodía, llegaron dos camiones con las piezas de PVC (a base de cloruro de vinilo) que fueron descargadas con la intención de empezar a armar las paredes para separar los refugios.

“Nos dijeron que teníamos que comenzar hoy mismo con la construcción de paredes”, dijo uno de los hombres que estaba al frente de la descarga de los listones de casi tres metros que servirán para hacer una petrocasa, que se pegan como piezas del tradicional juego de Lego y son solidificadas mediante el uso de un cemento especial.

La Torre El Chorro estaba abandonada y desde finales del año pasado se convirtió un refugio de 20 pisos, aunque hasta el momento sólo permanecían ocupados 6 y en cada uno había entre 150 y 200 personas provenientes de diferentes localidades, pero la intención es evitar hacinamiento y por eso se prevé utilizar todo el inmueble y hacer 40 cubículos por piso.

Los ingenieros y peritos de Petrocasa dictan talleres a las personas que habitan este refugio con la idea de que sean ellos los que construyan las paredes, tal como se ha hecho con las viviendas edificadas en otras partes del país.

En lo que respecta a los servicios sanitarios, se aprovechará que en cada uno de los pisos hay baños y lo que se está haciendo es adecuarlos para incorporales duchas.

Este inmueble fue construido a mediados de los años setenta y su diseño arquitectónico se hizo para alojar oficinas, que han servido de sede a las empresas del Grupo Boulton, incluida la extinta aerolínea Avensa, hasta 2002, cuando fue adquirido por Seguros La Seguridad. Posteriormente se vendió en 2007 y permanecía desocupado hasta finales de 2010, que comenzó a ser utilizado por el Ejecutivo para alojar a familias que perdieron sus viviendas debido a las lluvias.

Por: ANDRÉS ROJAS JIMÉNEZ
arojas@el-nacional.com
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