Dicen: “Que soy la Lina Ron de los ricos” (¡JAMÁS!)
“Me siento bien trabajando en Unión Radio porque allí no están pendientes de si estoy gorda o flaca. A una radio chavista no voy ni muerta, claro, es que no creo que llegue viva a un estudio de una de esas emisoras”.
Es una periodista aguerrida, y aunque suene cliché, es amada por unos y odiada por otros. Pero no es ignorada por nadie. Sus seguidores no se pierden una sola de sus apariciones y ríen con sus ocurrencias, las mismas que la llevaron hasta la sede del imperio mismo para cantarle al ex embajador Charles Shapiro, quien muy emocionado rompió protocolos y hasta un beso le estampó en la mejilla.
Asegura que intentaron acabar con su vida por semejante osadía contrarrevolucionaria. Sus detractores señalan “que esta tarifada de la CIA” ha llegado a los medios para tratar de desestabilizar el proyecto humanista que lidera el comandante. Ella no lo niega, y reta a cualquiera a callarla. Aunque su paso por el canto fue fugaz no descarta volver a él si cierran más radios. Esta es la “verdadera” Marta Colomina y he aquí sus confesiones.
–¿Cómo le gusta que la llamen, Marta a secas, profesora Marta o la escuálida Marta?
-Como quiera. Con tal de que me llamen. Y por favor, cambia el repertorio porque a todo el mundo le haces la misma preguntita. Hasta a Michelletti le preguntaste eso, ¡qué falta de información y creatividad!
–¿Marta es tan ruda como la pintan o eso es pura pinta?
-¿Cruda? Por supuesto que sí soy cruda, sobre todo cuando veo las sandeces y las cosas que hace este gobierno. Porque en materia económica, Chávez está más perdido que un pingüino en Chichiriviche.
–Yo no le pregunté si era cruda, sino que si era ruda.
-Ah!!! ¡Habla mejor, mijito, porque no se te entiende nada! Ruda es lo que necesita la gente a ver si salimos de esta locura en la que estamos metidos.
–Tenemos varios meses detrás de usted para que nos concediera esta entrevista…
-¿Detrás de mí? ¿En serio? ¡Eso me gustó!
–Lo que pasa es que nos dijeron que a usted no le gusta este periódico porque y que es “muy chavista”, según su opinión.
-No, ¿quién dijo eso? A mí no me han llamado. No, ya va, un momento, ¿esto no es una celada, verdad? ¿No me estarán llamando del Sebim, uhm?
–Vamos a aclarar algo, profesora Marta ¿usted no dijo eso de verdad?
-Mijito, ¿pero este no es el periódico de Leocenis? ¡Cómo va a ser chavista, qué barbaridad! Dios mío, qué cosas dicen de mí. Bueno, ¿será que yo tengo multipolaridad? A mí se me sale el mister Hyde si se me tocan la tecla.
–¿Usted se siente bien trabajando en Unión Radio? ¿No le gustaría trabajar en una radio del gobierno, para variar la cosa?
-Con respecto a lo primero, sí, ¡claro que me siento bien! ¿Acaso no estás viendo mi circunferencia? Allí me dan trabajo sin importarles si estoy gorda o flaca. No están viendo si estoy buena o no. ¡Eso es perfecto! Con respecto a lo segundo ¡ni muerta! Es que no podría llegar a un estudio de una radio chavista, no creo que llegue viva.
Intentos de homicidio:
–¿Por qué se fue de Televen?
-Eso es con la otra. Pero yo también me fui. Te explico, cuando fui besada por el embajador de Estados Unidos me tiraron un bidón de gasolina pensando que era la propia y de allí no regresé más.
–¿Usted trabajaría con el señor Mario Silva?
-Bueno… si el señor ese no dice groserías, pudiera. Porque yo pienso que los derechos de uno terminan donde comienzan los de los demás. Si él asume eso como un credo, yo no tengo ningún problema.
–¿Es verdad que a usted le paga la CIA, cómo dicen por allí?
-Sí, pero me han rebotado varios cheques, eso me tiene indignada. Estoy molesta con la CIA.
–¿Hace algunos años a usted le dio por cantar y se fue a cantarle al ex embajador Charles Shapiro ¿Si siguen cerrando radios consideraría la posibilidad de hacer una carrera como cantante?
-Sí, por supuesto. Hace algunos años compuse una canción que era puesta constantemente por los buhoneros de la Plaza Altamira: “Chavez se fue ah!, se fue, se fue otra vez de viaje, se fue de rumba viajando por el mundo ya no está en el país, je!”… …pero me la robaron unas españolas,
las Ketchup, y no le pusieron ni letra por la premura de pegarla en la radio, y eso sonaba así: “Aserejé, ja, de je, de jebe tu de jebere sebiunouva,
majabi an de bugui an de buididipi”, allí no dice nada. Incluso los buhoneros se preguntaban si esa canción era la de la profesora Marta.
–Si se mete a cantar, ¿se uniría a Las Grandes junto a Mirla y Mirta? Su nombre también empieza por M.
-Sí, yo soy “La Primerísima” pero de la lengua. No estaré muy bien de cuerpo, pero la lengua la tengo como una chamita de 15.
-¿A usted no le da miedo que la pongan presa por estar visitando a los embajadores del imperio?
-¡No, que va! ¡Ojalá me llamaran otra vez! Eso sería buenísimo. Estaría en todos los medios de comunicación de un solo guamazo, eso es sabroso. Todo el mundo habla de una. Que hablen bien, que hablen mal, pero que hablen, como dijo alguna vez Lila Morillo.
–¿Alguna vez se ha encontrado frente a frente con Lina Ron?
-No, no. Aunque sería bueno, porque a mí me dicen la Lina Ron de los ricos. No sé por qué me llaman así, pues yo nunca me he pintado el pelo de amarillo. ¿Te acuerdas de ella una vez que estaba haciendo una manifestación en Las Mercedes? ¿Verdad que se parece a Joselo con peluca? “Este socialismo no funciona”
–¿Qué opina del periodismo que hace el chavismo?
-¿Cómo es posible que en esos noticieros no veas ni un robo ni un asesinato? Eso que pasan en noticieros es Disneylandia. Yo me pregunto, ¿dónde está el periodismo allí?, ¿cuál es la jerarquización de la noticia? Todo es chévere, todo es una maravilla. Sencillamente eso que se hace en los medios oficiales no es periodismo, sino una descripción de la revolución.
–¿Y el que hace la oposición?
-Si te soy franca, en algunos momentos me parece que hay ciertos visos de parcialización. Pero si a ver vamos, siempre hay referencia de lo que hace el gobierno, lo que hacen los diputados del oficialismo,del Presidente. Desde una balanza se hace mejor periodismo del lado opositor.
–Y ya que toca la Asamblea, ¿por qué no se lanzó por una curul?
-No me lo propusieron porque si no, me lanzo.
–¿Usted se imagina debatiendo con Cilia Flores e Iris Valera en la AN?
-¡Upa cachete! ¡qué cosa tan buena! Deberíamos poner un ring de boxeo porque así no esté yo, lo que viene es candela, he dicho.
–Si tuviera la oportunidad de darle un consejo al presidente Chávez, ¿qué le diría?
-Le diría algo que a muchos les da risa, pero es muy serio. Le preguntaría si no se ha dado cuenta de que el bloque soviético ya probó lo que él cree que es nuevo y que eso fracasó. Lo que toca el Estado (y no precisamente el venezolano), lo que se nacionaliza, no funciona, como dice la canción:
“No funciona… este socialismo no funciona”…
–Si tuviese la potestad de cerrar y abrir medios, ¿cuáles cerraría y cuáles abriría?
-En principio, ninguno. Ahora, si algún medio muestra cómo hacer una bomba Molotov o cómo asesinar a una persona, por supuesto que lo cierro. Pero fuera de eso todo el mundo tiene derecho a pensar lo que quiera y dormir del lado de la cama que quiera. El problema llega cuando se le quiere imponer a una sociedad lo que uno solo piensa. Eso no es así, a lo Jalisco. Todo lo que sea una ventana de comunicación que no tergiverse los hechos ni sea maniqueo hacia un solo lado, es positivo para una sociedad plural.
El propio:
No sólo imita a Marta Colomina, el registro de Gilberto González incluye a otros importantes personajes de la vida pública como Henry Ramos Allup; Luis Vicente León, director de Datanálisis y Freddy Bernal, entre otros, y lo cierto es que por teléfono confunde.
Gilberto González es periodista y tiene una maestría de guión para cine y televisión de la Universidad Autónoma de Barcelona, España. Productor de espectáculos, justo por petición de sus compañeros en el recordado “El Pantaletazo”, creó la caracterización que más fama le ha reportado: Marta Colomina.
“Ella nació el 1 de abril de 2001” y sus presentaciones con ese personaje llegaron hasta la Embajada de Estados Unidos, creando una suerte de escándalos entre los sectores oficialistas, lo cual fue aprovechado por el comunicador para montarse en las tablas con “Te espero en la embajadita”, espectáculo que recreaba la criticada visita.
Gilberto González está próximo a montar otro show que se llamará “Mujeres por Venezuela” y está escribiendo un unipersonal llamado “Me da risa papá” que no tiene que ver con política sino con su experiencia personal. “Mi esposa y yo tuvimos algunos problemas para procrear y eso está plasmado en la obra, que cuenta las vicisitudes de un padre desde el momento de la concepción”.
Como guionista, Gilberto González también se desenvuelve en el área de los comerciales, no obstante está pendiente el guión de su película. Lleva años pensándolo, aunque allí no habrá comedia, sino drama.
Por: F0
folioso@6topoder.com
@fedor2611
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