El ingreso de carga por el muelle
El Guamache cayó 80%

Los recursos que se obtenían en estos terminales eran destinados a mejoras de infraestructura y planes sociales. Las arcas de la Gobernación de Nueva Esparta dejan de recibir 26,2 millones de bolívares anuales por la centralización del puerto internacional El Guamache y del aeropuerto General en Jefe Santiago Mariño de la isla de Margarita.

Marielena Garrido, directora general de Puertos de la Gobernación de Nueva Esparta ­quien representó al Ejecutivo regional en la directiva de El Guamache hasta que el 17 de marzo de 2009 se revirtió la administración de esas instalaciones­ aseguró que desde el año 2005 la actividad portuaria generó ingresos que permitían a las autoridades neoespartanas hacer mantenimiento al puerto e impulsar planes sociales para los sectores más necesitados.

Indicó que en 2004 se alcanzaron a recaudar 636 millones de bolívares, cifra que se elevó a 1,05 millardos de bolívares anuales hasta 2009 cuando el Gobierno regional fue despojado de la administración del principal puerto de Nueva Esparta, utilizado para la llegada de cruceros y la entrada de mercancía.

“El aporte del puerto al Gobierno regional alcanzó los 1,2 millardos de bolívares de los viejos. La merma de ese monto impide realizar actualmente inversiones en otros sectores como salud, educación e infraestructura, que antes eran beneficiados”, recalcó.

En manos de la gobernación, el aeropuerto aportaba al fisco regonal 25 millones de bolívares anuales aproximadamente, los cuales se reinvertían en obras para mejoras de la aeroplaza y ayudas sociales.

El gobernador Morel Rodríguez refirió que de esos ingresos destinaban recursos a otorgar becas a estudiantes y ayudas para intervenciones quirúrgicas, tratamientos médicos, pasajes a personas de escasos recursos, además de donativos a las comunidades para obras colectivas. También entregaban recursos a instituciones educativas, deportivas y culturales para el desarrollo de sus funciones.

El cambio de administración afectó severamente al Cuerpo de Bomberos Aeronáuticos, pues desde entonces no han recibido equipamiento ni renovado sus implementos de trabajo, por lo cual no están en plena capacidad para atender cualquier contingencia que se presente, según algunos funcionarios que pidieron anonimato.

Obras paralizadas:

En el año 2007 fue aprobado el proyecto de extensión del puerto internacional de El Guamache, que incluía la ampliación de la zona de atraque para una segunda posición del muelle que facilite la entrada de dos buques al mismo tiempo.

A partir de entonces, las inversiones se paralizaron y, en consecuencia, los trabajos para ampliar 200 metros el muelle con el fin de permitir el atraque simultáneo de buques de carga y de cruceros quedaron inconclusos.

Rodríguez explicó que la paralización de la ampliación afecta directamente la afluencia de cruceros, pues las empresas dedicadas a esa actividad consideran que el muelle no es adecuado, y menos cuando deben esperar la salida de los buques de carga para poder atracar.

Indicó que la nueva administración no ha fomentado el turismo de cruceros ni las importaciones para el puerto libre, pues lejos de facilitar laentrada de los buques de carga, obstaculizan el atraque de las embarcaciones con la implementación de requisitos innecesarios.

“Todo lo que el Gobierno regional invertía en el puerto y en las comunidades vecinas gracias a los ingresos portuarios fue eliminado de un plumazo por el Gobierno central”, apuntó Rodríguez.

Campo de fútbol:

Pese a las restricciones que imponen las autoridades portuarias para impedir el acceso a los medios de comunicación a las instalaciones de El Guamache, trabajadores de esa corporación aseguran que en los últimos años no ha habido inversión en este puerto, donde la entrada de carga ha caído más de 80% en los últimos dos años.

Uno de los trabajadores aseguró que porlo general los tres primeros meses de cada año son lentos, pero en 2011 la situación se preve peor, al punto de que la zona de descarga está vacía y es utilizada para actividades de esparcimiento.

“Este año no ha entrado ni un solo barco de carga por el puerto y los cruceros han sido pocos. Para matar el tiempo nosotros jugamos fútbol”, aseguró un trabajador.

Precisó que las grúas y montacargas que utilizan para movilizar los contenedores se encuentran en buen estado porque son alquilados a una empresa italiana.

“Ni siquiera han invertido para adquirir la maquinaria propia, y las instalaciones cada día se deterioran más por falta de recursos para el mantenimiento”, acotó.

Por: DEXCY GUÉDEZ
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