Cuba única en América Latina
que reprime el disenso político

El hecho ocurrió luego de que Fariñas saliera de su casa junto a un grupo de personas a las que impartió un taller de periodismo y se dirigió a un lugar donde se estaba produciendo el desalojo de una familia.

La Habana, 26 ene (EFE).- El disidente cubano Guillermo Fariñas, premio Sájarov 2010 del Parlamento Europeo, fue conducido hoy a una estación de policía en la ciudad central de Santa Clara, donde se encuentra retenido, confirmó a Efe su madre, Alicia Hernández.

Fariñas salió hoy de su casa junto a un grupo de personas a las que impartió un taller de periodismo y se dirigió a un lugar donde se estaba produciendo el desalojo de una familia, según explicó su madre, quien dijo que pudo que contactar con él por su teléfono móvil.

“Estoy aquí detenido en la tercera unidad de policía y no puedo ir al mandado contigo”, dijo escuetamente el disidente, según relató su madre en una conversación telefónica con Efe.

El psicólogo y periodista independiente y unas 15 personas que le acompañaban fueron conducidas a varias estaciones policiales en las que aún permanecen retenidos desde aproximadamente las 16.00 hora local (21.00 GMT), dijo Reinaldo Escobar, esposo de la bloguera Yoani Sánchez.

Yoani Sánchez informó esta tarde de la detención de Fariñas en su cuenta de la red social “Twitter”.

Escobar también citó que el apresamiento de Fariñas ocurrió cuando asistía a “una acción civil y no política”, aunque indicó que solo conocía que el periodista independiente “estaba apoyando a una madre embarazada con dos hijos, que iban a ser desalojados en la calle Toscano 474, en Santa Clara”.

“Tenemos el deseo, la presunción, de que solo se trate de una detención temporal”, manifestó Escobar.

También tiene esa impresión el portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez, al ser consultado por Efe.

El pasado 24 de febrero, tras la muerte del opositor preso Orlando Zapata Tamayo a causa de un ayuno de 85 días, Guillermo “Coco” Fariñas se declaró en una huelga de hambre para exigir la liberación de los prisioneros políticos más enfermos.

Abandonó la huelga el pasado 8 de julio, después de que el Gobierno cubano anunciara su compromiso de liberar a 52 disidentes del Grupo de los 75, condenados en 2003, fruto de un inédito diálogo abierto en mayo pasado con la jerarquía de la Iglesia católica de la isla.