No le pagan a los productores

Productores que por muchos años fueron clientes del antiguo consorcio Agroisleña denunciaron que desde que la empresa fue expropiada por el Gobierno fueron suspendidas las líneas de crédito para adquirir fertilizantes, semillas, urea y maquinarias.

Los agricultores se concentraron frente a las puertas de la oficina administrativa de la ahora Agropatria, en Cagua, y denunciaron que desde la expropiación tuvieron que suspender la siembra. Aseguraron que no cosechan pimentón, ají, cebollas, tomate y melón porque el Gobierno no les permite sembrar rubros variados.

“No hacemos nada. Para no otorgar los créditos, nos ponen trabas: si sembramos maíz, no podemos sembrar cebollas”, dijo José Francisco Soto, productor del sur de Aragua.

También denunciaron que las autoridades los presionan para que cancelen los créditos otorgados por los antiguos dueños, aunque la empresa no paga desde hace tres meses las cosechas de maíz, sorgo y soya que arrimaron a los silos de Agropatria.

En el caso del sur de Aragua, hace dos meses les deben la cosecha a 26 productores, a cada uno le adeudan entre 500.000 y 800.000 bolívares. Similar situación se presenta en los estados Guárico, Miranda, y Portuguesa.

Soto aseguró que muchos productores fueron presionados para que llevaran la cosecha a los silos de Agropatria.

Sin pago:

En la oficina administrativa también se concentraron ex trabajadores a los que desde octubre del año pasado no se les ha cancelado la liquidación. Héctor Enrique Nass, que ocupaba el cargo de gerente supervisor de Barinas, aseguró que los derechos laborales son violentados por el Gobierno.

Rechazaron la aplicación del cuestionario, por el Fondo de Desarrollo Agropecuario, a 74 técnicos que fueron llamados a Caracas con la excusa de asistir a una reunión. “Pretendían obligarlos a llenar un formulario que incluía información acerca de militancia en el PSUV, si estaban de acuerdo con la expropiación, si estaban inscritos en el REP y si eran miembros de mesas”, dijo Ness.

Afirmó que a los técnicos les desmejoraron sus ingresos económicos, pues ahora dependen del Fonda y reciben un salario por debajo de lo que ganaban con Agroisleña.

Por: LAUDELYN SEQUERA | MARACAY
EXPROPIACIONES | Economia
EL NACIONAL