El día de Navidad se cayeron tres casas
y otras 30 están en alto riesgo
Oscar González, quien tiene 54 años viviendo en Colinas de Telares de Palo Grande, en Ruiz Pineda, estaba ayer tratando de sacar los últimos enseres de su hogar. Mientras lo hacía, las paredes de su vivienda crujían hasta que terminaron por desplomarse y tuvo que retirarse antes de lo previsto.
Y es que desde la noche de navidad, cuando otros estaban cenando, las familias que viven en este sector -estimadas en una tres mil, según afirman Francisco Méndez, vocera del Consejo Comunal- se declararon en emergencia por los deslizamientos que se estaban presentando. Justo el 25 de diciembre se terminó de caer la vía principal, un transformador de la electricidad, se rompieron las tuberías de aguas blancas y negras, mientras tres casas y otras 30 están a punto de desplomarse. “Ahora estamos incomunicados, no tenemos luz, ni agua. Ni el camión del gas o de la basura pueden pasar”, dijo.
Por esta razón los vecinos cerraron el acceso principal desde las ocho de la mañana y se mantuvieron durante todo el día en espera de las autoridades municipales, pero solo acudieron funcionarios que no tomaron ninguna decisión sobre el problema.
“No queremos mesas de trabajos, ni refugios. Lo que queremos son soluciones inmediatas. Estamos cansados de las promesas de la autoridades cada vez que se cae una casa”, afirmó Maricarmen Villalobos.
Amenazan con cerrar hoy la autopista Francisco Fajardo a la altura de Montalbán para ser escuchados por las autoridades. “Queremos que venga el alcalde Jorge Rodríguez, Jaqueline Faría y hasta el mismo Presidente de la República para que vea en que condiciones estamos viviendo” señaló la vocera de los afectados.
Derrumbes recurrentes
Los representantes del consejo comunal informaron que desde hace 21 días se vienen presentando deslizamientos en la zona y fueron desalojadas unas 1200 familias que ahora están en refugios. “Ya no hay cupo en los refugios y los desalojos se paralizaron, pero a diario la tierra se mueve porque hay un bote constante de aguas negras que filtra la tierra y por más que hemos denunciado esa situación a Hidrocapital, no han venido”, denunció Isidro Vargas, quien también es uno de los afectados.
Ayer solo permitieron el paso de motos, así como de personas que tenía alguna emergencia. Para hoy será la misma situación, por lo que serán afectados no solo los vecinos sino las industrias de la zona.
– Mientras, las mujeres se turnaron para hacer la comida para todos, mientras ellos laboraban.
– Ante la falta de atención, los habitantes decidieron hacer este trabajo, “pero eso será por tres semanas, mientras que las autoridades nos ayudan, porque no podemos permitir quedar incomunicados”.
– Mientras, habilitaron los servicios de mototaxis que llevan a los vecinos hasta el punto donde se desplomó la vía.
MIGDALIS CAÑIZALEZ V. | EL UNIVERSAL
lunes 27 de diciembre de 2010
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