Lucién considera que la autocensura es lo
más grave de reforma de Ley Resorte

Tres semanas de vida le restan a esta Asamblea Nacional (AN) para aprobar el paquete de “leyes revolucionarias” que anunció el chavismo luego de las elecciones regionales de noviembre y por eso, considera el comunicólogo y vocero de Ciudadanía Activa Oscar Lucién, se apura para blindar legalmente “el cerco a los medios de comunicación, como lo hace el modelo cubano”.

“La AN tiene tres semanas de vida para blindar la fachada legal para control de los medios”, indicó Lucien quien estima que la autocensura es la consecuencia más preocupante del contenido de la reforma de la Ley de Responsabilidad Social para Radio y Televisión (Ley Resorte) que ahora también regula Internet y que designa toda la responsabilidad de los contenidos a los proveedores de este servicio.

La autocensura, explica Lucien, es grave porque “resulta muy difícil medirla” y sin embargo, “ya se evidencia en el país que hay una inhibición tremenda, basta con ver la cantidad de programas desaparecidos de la radio y la televisión”.

El endurecimiento de las sanciones a los infractores que se observa en la reforma es una de las medidas que pueden provocar más autocensura en los medios, dice Lucien. La modificación de los bloques de horarios y la responsabilidad compartida con los generadores de contenidos y los productores nacionales independientes también inciden en esta práctica, agrega el especialista. “Es una espada de Damocles al prestador de servicio”.

Este es el tercer intento de controlar Internet y esta vez, señala, se está haciendo a través de una Ley cuyo nombre remite sólo a medios radioeléctricos. “Esta reforma a la Ley Resorte se inscribe en el plan sistemático de cerco a la libertad de expresión en Venezuela. Primero vimos el proyecto de delitos mediáticos de la fiscal y hubo otro proyecto en el paquete de leyes habilitantes, el de Informática y Servicios Postales; éstas tenían de trasfondo el control de internet”, recuerda antes de manifestar que gracias a la presión social y a los cuestionamientos de la opinión púbica se “echaron para atrás” con las normas pero en esta oportunidad, opina, hay que meter en el contexto a un Parlamento oficialista en casi su totalidad que sólo tiene tres semanas para actuar porque se vence el período constitucional.

El artículo más polémico de la reforma de la norma es el número 8 que prohíbe la difusión a través de radio, televisión y medios electrónicos de mensajes que “puedan constituir manipulaciones mediáticas dirigidas a fomentar zozobra en la ciudadanía o alterar el orden público”.

En la reforma también se lee que las imágenes o descripciones gráficas de violencia no podrán ser difundidas por los prestadores de servicio de radio y televisión una vez haya cesado la inmediatez del suceso. La misma ley establece que sólo en el horario adulto, de 12 am al 6 am, podrán transmitirse este tipo de imágenes.

La reforma, dice Lucien, forma parte del interés por limitar a los medios radioléctricos y es tan contundente como el cierre de RCTV y de las 34 emisoras radiales que impactó en el incremento del uso de las redes sociales. Ya Chávez ha dicho que había que meterle el ojo a Twitter”.

La reforma a la Ley Resorte está en la agenda de la Asamblea Nacional para ser aprobada en primera discusión el próximo martes 14 de diciembre.

SARA CAROLINA DÍAZ | EL UNIVERSAL
sábado 11 de diciembre de 2010