Cercanos al ministro de la Secretaría,
Francisco Ameliach, lograron cargos

Al TSJ como principales y suplentes, en la Sala Electoral y la Político Administrativa, entre ellos su prima María C. Ameliach. Los nueve magistrados principales y los 32 suplentes del Tribunal Supremo de Justicia, designados la noche del martes por la Asamblea Nacional, simpatizan con el “proceso”. Allí no hay novedad.

La cuestión es identificar qué corriente del chavismo se impuso en la elección de los magistrados. “Aquí salimos reivindicados nosotros”, evaluaba ayer un diputado fundador del extinto Movimiento Quinta República (MVR) y que se considera digno representante de la “izquierda revolucionaria”.

Para justificar su análisis, el legislador citaba algunos ejemplos: “la selección de cinco parlamentarios -entre principales y suplentes- es una manera de reivindicar al colectivo frente a los atropellos que ha sufrido internamente por parte de gobernadores, alcaldes y demás burócratas”, argumentaba.

Dentro de ese lote figura Juan José Mendoza (PSUV-Trujillo), quien se pensaba llegaría meses atrás a la Defensa Pública avalado por la presidenta de la Asamblea Nacional, Cilia Flores. Al final, Mendoza no conquistó ese cargo, pero ahora estará como titular en la Sala Constitucional del TSJ junto a la ex procuradora Gladys Gutiérrez, fiel al comandante.

Cuidando los votos:

Con la Sala Electoral se alzó el ministro de la Secretaría, Francisco Ameliach, quien colocó en ese espacio a dos estrechos colaboradores: Oscar León Uzcátegui (principal) e Indira Alfonzo (suplente). Además, entró como titular en esa instancia Jhannett Madriz, promotora del MBR-200 que ha tenido roces con la mismísima jefa del Poder Legislativo.

En la Sala Electoral también ubicaron a otros tres diputados: Malaquías Gil (PSUV-Trujillo), Roberto Quintero (PSUV-Zulia) y Carmen Álvarez (PSUV-Miranda), cercana a su colega Saúl Ortega (PSUV-Carabobo).

Amealiach también movió fichas en la Sala Político Administrativa, que tendrá entre sus suplentes a María Carolina Ameliach (prima) y Emilio Ramos. El cargo de titular en ese despacho recayó en Trina Omaira Zurita, a quien relacionan con Flores.

El avance de Ameliach es celebrado por miembros de la “izquierda revolucionaria” dentro del PSUV, que destacan su lealtad al presidente Hugo Chávez. Además, este grupo se siente identificado con el vicepresidente Elías Jaua.

Por otra parte, la AN ungió como titular de la Sala Penal a la abogada Ninoska Queipo, hija de la diputada María de Queipo (PSUV-Zulia).

¿Y qué pasó?

En el TSJ esperaban la ratificación en la Sala Penal de la magistrada Miriam Morandy, amiga de Flores. Sin embargo, Morandy fue marginada.

No obstante, mayor sorpresa representó la exclusión del ex fiscal general de la República, Isaías Rodríguez. ¿Qué pasó allí? “Esa fue una jugada maestra de Chávez. Así desmontó la estrategia de la oposición que se limitaba a criticar la escogencia de Rodríguez”, concluyó una fuente.

PEDRO PABLO PEÑALOZA | EL UNIVERSAL
jueves 9 de diciembre de 2010