No hay paso a Tocuyo de la Costa, San Juan de los Cayos, Mirimire,
Boca de Mangle y Boca de Tocuyo
El río Tocuyo se desbordó
y partió el embalse
La represa de Játira se fracturó en cuatro partes e inundó la carretera de la costa que comunica las poblaciones de Chichiriviche, Tocuyo de la Costa, San Juan de los Cayos, Mirimire, Boca de Mangle y Boca de Tocuyo, en los municipios Monseñor Iturriza y Acosta.
“Las fuertes lluvias hicieron que se desbordara el río Tocuyo y partió esa represa. Eso dejó cuatro poblaciones incomunicadas. Tuvimos que restringir el paso en la vía Morón-Coro, que comunica con Carabobo, para evitar mayores daños”, dijo el general en jefe Henry Rangel Silva, jefe del Comando Estratégico Operacional.
Además, la recta de Chichiriviche quedó fracturada debido a la cantidad de agua que salió de la represa.
El Tocuyo, San Juan de los Cayos, Boca del Tocuyo y Chichiriviche fueron las poblaciones más afectadas por el desbordamiento del río. “La gente está en canoas y las aguas llegaron a la mitad de las casas de los pueblos”, dijeron algunos lugareños mientras intentaban huir de la zonas anegadas.
Aproximadamente 12.000 personas viven en esos sectores, pero en la temporada de diciembre suelen alojarse allí cientos de turistas. Ciudad Flamingo, que recibe gran cantidad de visitantes, está bajo las aguas. Sus habitantes se subieron ayer a los convoyes de los militares. En total, más de 500 personas han sido desalojadas de esos poblados.
Hay dos refugios que albergan a la mayoría de los damnificados en Coro. El hotel Venetur Morrocoy, en el municipio Silva, es uno de ellos. “Tenemos 270 habitaciones y están full. Alrededor de 600 personas están acá, la mayoría son del Tocuyo de la Costa y Tucacas”, informó un empleado.
Vialidad al borde:
Tres personas han fallecido por las lluvias en Falcón, según cifras oficiales. “A excepción de Caracas y otros estados, en esta entidad el problema básicamente es de vialidad”, dijo Rangel Silva.
Las autoridades estudiaban la forma de evitar que la fractura de Játira cause la ruptura de la represa Tacarigua. Ambas están unidas, simulan la forma del número ocho.
“Los deslaves se ven como cuando se rompe una montaña. El agua sale por todos lados”, dijo Nahum Sánchez, vecino.
Por: MAOLIS CASTRO
macastro@el-nacional.com
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