El jefe del estado mayor de la Marina surcoreana, Yoo Nak-Joon, asiste al
funeral de dos soldados fallecidos.

Estados Unidos descarta que
ejercicios se dirijan a China

Pyongyang afirmó que las maniobras navales de Washington y Seúl colocan a la península coreana en situación prebélica. Corea del Norte realizó aparentemente un ejercicio de disparos de artillería en el mar Amarillo, luego de afirmar que las próximas maniobras navales conjuntas de Corea del Sur y Estados Unidos dejan la península coreana “al borde de la guerra”.

“Suponemos que Corea del Norte efectuó un ejercicio de disparos de artillería”, declaró un portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano. Según un corresponsal del canal televisivo YTN, los escasos habitantes que permanecieron en la isla de Yeonpyeong acudieron rápidamente a los refugios.

Estados Unidos y Corea del Sur iniciarán mañana maniobras aeronavales conjuntas en el mar Amarillo, en las que participará el portaaviones George Washington. Los ejercicios militares “de los imperialistas estadounidenses y sus títeres belicistas surcoreanos están dirigidos contra Corea del Norte”, denunció el régimen comunista. “La situación de la península coreana se acerca al borde de la guerra por el proyecto imprudente de unos fanáticos del gatillo”, insistió Pyongyang.

Por su lado, Seúl prometió responder más firmemente en caso de nueva agresión armada de Corea del Norte, después de efectuar una revisión completa de su política de respuesta militar, hasta ahora demasiado pasiva.

Para llevar a cabo la tarea, el presidente surcoreano, Lee Myung-Bak, nombró a un nuevo ministro de Defensa: Kim Kwan-Jin, de 61 años de edad, ex jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas y reputado por su dotes de mando y su experiencia en estrategia militar.

Kim tendrá como misión “responder rápida y firmemente a la actual situación de crisis y restaurar la confianza de la población en el Ejército”, aseguró Hong Sang-Pyo, un consejero presidencial.

El Departamento de Defensa estadounidense anunció que las maniobras no están dirigidas contra China, que expresó su oposición a tales ejercicios, por considerar como su territorio parte de las aguas del mar Amarillo.

SEÚL | AFP
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