No es en Colombia. Tampoco en Ecuador, Perú o Bolivia. El 41% del total de
casos de dengue registrados en el área andina se concentran en Venezuela,
según la Red de Sociedades Científicas.
La tasa de incidencia de dengue en el país
es de 360 por cada cien mil habitantes
La situación del dengue en Venezuela sí es grave, incluso si se compara con el resto del continente y se considera que la enfermedad ha repuntado en toda América.
Como “mal de muchos, consuelo de tontos”, consideró José Félix Oletta, exministro de salud y directivo de la Red de Sociedades Médicas Científicas de Venezuela, el argumento presentado por las autoridades venezolanas que justifica el crecimiento de los casos de dengue en Venezuela con el número total de enfermos en la región.
“En una cita superficial, insuficientemente analizada sobre cifras de dengue, se compara con escaso rigor el número de casos nacionales con los del continente y esto no refleja la realidad nacional”, respondió ayer Oletta.
El análisis correcto de las cifras debe ajustarse a los indicadores epidemiológicos y a los criterios geográficos y demográficos para estudiar el impacto de la enfermedad sobre la población venezolana y compararlo con lo que ocurre en otros países.
Sobre la base del boletín epidemiológico 43 del Ministerio de Salud y al último reporte de la Organización Panamericana de la Salud, actualizado al 5 de noviembre de este año y que se encuentra disponible en www.paho.org, Oletta remarca que el dengue en Venezuela es de los peores de la región.
El 41% del total de casos de dengue de la región andina -que incluye a Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia- se concentran en territorio venezolano y si se trata de dengue hemorrágico la situación empeora: 53,8% de los enfermos con esa forma grave de dengue son venezolanos.
Oletta también calcula que, según la tasa de letalidad de la enfermedad en el país, el 36,7% de las muertes por dengue en esos cinco países corresponden a venezolanos. “Ocupamos el segundo lugar de la región andina, después de Colombia, en número de casos de dengue, de casos graves y de muertes”, asegura el exministro.
Otra forma de medir si los países están peor o mejor en dengue que el resto de sus vecinos es comparando las tasas de incidencia. En Venezuela es de 360 por cada cien mil, lo que significa que a 360 de cada cien mil de sus habitantes les da dengue. En la región andina, la tasa es de 251,2 por cada 100 mil habitantes.
“Aún comparando la situación con las de todo el continente, las cifras venezolanas son resaltantes”, añade Oletta.
Aunque los venezolanos representan el 6% de todos los casos de dengue común en América, que son 1 millón 536 mil 899, los de dengue hemorrágico representan un alto 26% y el “número de muertes estimadas”, el 11,1%. En cuanto a la tasa de incidencia acumulada, en Venezuela es de 360 por cada 100 mil y la de todo el continente en 293, 6 por cada 100 mil. Oletta apunta que solamente ocho países superan la tasa de incidencia venezolana. “A nivel continental, ocupamos el tercer lugar en número total de casos, de casos graves hemorrágicos y de muertes”. Venezuela es también uno de los cinco países donde circulan simultánamente los cuatro serotipos existentes del virus. “Esto no es normal. Estas cifras son para preocuparse”, añade Oletta.
Para la semana 43, que cierra el 30 de octubre, el número acumulado de casos de dengue fue de 106 mil 725 casos, lo que triplica la cifra alcanzada para ese período en 2009, y las más elevadas de la historia epidemiológica. Los estados más afectados son Miranda, Zulia, Mérida, Táchira, Lara, Aragua y el Distrito Capital. Diez estados se mantienen en epidemia y otros diez muestran cifras en ascenso.
Síntomas:
– Los síntomas más comunes son dolores de cabeza, músculos, huesos y detrás de los ojos; fiebre y malestar general.
– También puede presentarse una fina erupción corporal.
– Deben visitar al médico, quienes experimenten signos de alarma como debilidad extrema, dolor abdominal, vómitos y diarrea .
– Deben hospitalizarse quienes registren menos de cien mil plaquetas o presenten sangramiento por nariz o encías o que luzcan puntos rojos en la piel.
GIULIANA CHIAPPE | EL UNIVERSAL
viernes 19 de noviembre de 2010