Trabajadores de Barrio Adentro de 17 estados se concentraron en el palacio
presidencial para exponer su larga lista de quejas.
Barrio Adentro piden un
sindicato y salarios justos
“No tienen cargos fijos, la estabilidad en sus puestos es precaria, la dotación de insumos es insuficiente y les adeudan bonos y otros beneficios. Daniel Padilla, paramédico y conductor de ambulancia en Carabobo, denunció persecución laboral contra quienes critican las políticas de la misión gubernamental”
“Somos los que estamos cargando en el hombro esta misión que no se ha caído porque le hemos metido mano”, dijo Héctor Castillo, uno de los 600 “trabajadores revolucionarios” de la Fundación Barrio Adentro que ayer se concentraron en las afueras del Palacio de Miraflores para exigir la reivindicación de sus derechos laborales.
Allí llegaron en la madrugada del miércoles solicitando conversar con el presidente Chávez para hacer sus peticiones, entre las que resaltan, pasar a fijos a sus 22 mil trabajadores contratados y que el Ministerio del Trabajo apruebe a Sutrabaden como su sindicato.
Rechazaron que, aun cuando el jefe de Estado ha anunciado que Barrio Adentro es parte del sistema formal de Salud, la ministra Eugenia Sader se niegue a reconocerlos como tal alegando que operan como fundación. Agregaron que el salario promedio, independientemente del nivel de instrucción, es de sueldo mínimo (Bs. 1.223) junto al ticket de alimentación y que no reciben beneficios por laborar domingos y días feriados.
Ayer 19 representantes del grupo se reunieron con la secretaria de la Fundación pero no bastó para complacerlos.
La concentración no tuvo nada que ver con las manifestaciones que trabajadores de la salud han llevado a cabo durante esta semana. Dailimar Chávez dijo al Presidente: “Que no olvide que nosotros venimos del pueblo y cuando llegaron los compatriotas cubanos fuimos los que les tendimos la mano. Merecemos un trato justo”.
ANYIMAR COVA LUGO | EL UNIVERSAL
jueves 18 de noviembre de 2010