El ministro Giordani considera que la renta petrolera es condición
necesaria para el nuevo modelo.

El economista Ronald Balza advierte
que serán compañías subordinadas

En todas las expropiaciónes ejecutadas en 2010 se ha negado que solamente sea un cambio de propietario ­de uno privado al Estado- y por el contrario se asegura que es la manera como se pretende construir un esquema de propiedad social que, según el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 20072013, debería predominar sobre el público y el privado.

El objetivo es crear un sistema de productores libres asociados que marque una diferencia con respecto a las empresas públicas, pero que sobre todo ocupe el espacio que actualmente tiene el sector privado, señala el ministro de Planificación y Finanzas, Jorge Giordani, en su libro La Transición Venezolana al Socialismo.

“En el caso de la transición política que vive la sociedad venezolana, una aceleración rumbo al socialismo significa la profundización necesaria de las formas productivas asociadas al trabajo colectivo, que en los términos clásicos significa la formación de empresarios libres asociados, que sujetos a la racionalidad prevalente permitan ir creando las condiciones de formas productivas alternativas”, dice el ministro.

“Sabemos que no se trata de un proceso de largo aliento que simplemente no se decreta ni por la voluntad política ni a través de la creación de un cuerpo jurídico diferente, adaptado a la norma ideal que se desea implantar”, añade el funcionario en su libro.

Destaca el soporte que debe tener el Estado en la formación de esa nueva modalidad empresarial, y considera que la captación de la renta petrolera es “una condición necesaria” para avanzar en ese modelo de producción.

El economista Ronald Balza, docente de la UCV y de la UCAB, señala que en los documentos del Gobierno de los últimos cinco años, referidos a la instauración del socialismo, se plantea una disminución del sector privado o su sustitución por un modelo estatal que emula lo que se ha criticado del esquema que dominó en varios de los países del socialismo del siglo XX, como la antigua Unión Soviética.

“Cuando se habla de propiedad social es como si se dijera que un grupo fuera el dueño, pero a la hora de la verdad termina siendo propiedad pública o del Estado”, indica. “En el caso de lo que propone el ministro Giordani como empresas libres y asociadas, se trata de compañías subordinadas porque el Gobierno le impondrá el precio al que deben vender un bien o servicio.

A definir sectores:

El economista Víctor Álvarez, investigador del Centro Internacional Miranda, es un defensor del proceso revolucionario que lidera el presidente Hugo Chávez. Afirma que en 10 años el sector privado ha aumentado su presencia porque representa cerca de 70% del producto interno bruto del país, cuando en 1999 era de 65%.

Álvarez no critica las medidas de expropiación, pero sí exhorta al Gobierno a definir los sectores que estarán bajo el control del Estado, y cuáles de las empresas intervenidas estarán dentro del modelo de propiedad social o su manejo gerencial será asumido por los trabajadores.

“Lo que tiene que ver con la producción de bienes y servicios de las canastas básica y alimentaria deberían estar sujetos a esa nueva forma de propiedad, porque allí es donde la mayoría de los venezolanos invierte su dinero y donde más se ve el acaparamiento y la especulación”, argumenta Álvarez.

“Se cae de maduro que hay actividades que por su naturaleza deben estar reservadas al Estado como petróleo, gas, generación de electricidad, telecomunicaciones, sistemas de metros y ferrocarriles, aeropuertos, recursos naturales del subsuelo o del espacio radioeléctrico”, añade.

Una propuesta que hace al Gobierno y a la Asamblea Nacional es aprobar una legislación que defina los sectores que estarán bajo el régimen de propiedad social y una ley de consejos de fábrica que establezca la participación que tendrán los trabajadores en la industria manufacturera.

ANDRÉS ROJAS JIMÉNEZ
Política | Economia
EL NACIONAL