“Nadie se dio cuenta de que robaban”
No descartan complicidad de vigilantes

 
Eduardo Fernández, dirigente político de Copei, todavía está perplejo ante el asalto a su vivienda, ocurrido el miércoles a las 4:00 am. “Vivo en una zona muy tranquila; estoy sorprendido”, dijo vía telefónica.

El robo fue curioso:

Aunque el edificio carece de cámaras de seguridad, está resguardado por vigilantes y protegido por un muro de 2, 30 metros de altura.

Es la primera vez, según vecinos, que la residencia La Castellana Sol, en La Castellana, es visitada por delincuentes.

Ayer, los tres vigilantes que resguardan el edificio declararon en el Cicpc. “Nos citaron en el Ministerio Público. Creo que pudo ser un descuido del compañero de guardia. Igualmente estamos dispuestos a presentarnos en las autoridades”, dijo un custodio.

Los funcionarios que estudian el caso no descartan complicidad interna.

El dirigente político estaba de viaje en San Cristóbal, Táchira. Al regresar ayer a su casa, esposa e hijos detallaron sobre el robo. “Entraron por la ventana y estuvieron casi dos horas en el apartamento”.

La familia fue despertada por dos delincuentes que amenazaban con armas de fuego. Al despertar a la esposa de Fernández, María Isabel, y a su hijo Ignacio Fernández procedieron a maniatarlos con corbatas y cinturones.

Los antisociales robaron celulares, un Ipod, una computadora portátil y la camioneta Terios. El dirigente político dijo que el estacionamiento tiene una garita de vigilancia cercana. “Nadie se dio cuenta de que robaban”.

De acuerdo al modus operandi, el robo a la vivienda de Fernández es similar al perpetrado al cónsul de Chile, Axel Eduardo Cabrera Martínez, ocurrido el pasado 1° de agosto en Los Palos Grandes, municipio Chacao.

Indignados. “Me siento muy indignado, pero solidario con todas las familias venezolanas que pasan por esto o por cosas peores. No hay derecho de tener estos niveles de inseguridad. Me robaron por casualidad, no creo que supieran que vivía ahí”, reclamó Fernández. Él considera que la responsabilidad reposa sobre el Estado.

M. C. MARÍA JOSÉ MAIRENA
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EL NACIONAL