Las víctimas fueron trasladadas a diferentes hospitales, pero no lograron sobrevivir.
Vecinos se quejan de impunidad que reina en el lugar

El gobernador reconoció
que hay armas en el lugar

Dos personas fueron asesinadas el viernes en la noche en el interior de las residencias estudiantiles Domingo Salazar, donde fueron interceptadas por desconocidos que accionaron armas de fuego.

Las víctimas fueron identificadas como Artine Jacobo Kedjiadjian Urbina, de 39 años de edad, quien recibió un balazo en el tórax, y Héctor Matheus Pérez, de 33 años de edad, conocido como “Casi Loco”, quien era uno de los principales líderes de las residencias.

Este hecho se produjo a las 10:00 pm, luego de finalizada una reunión del consejo comunal de la zona.

Los vecinos relataron que se escucharon varias detonaciones y en cuestión de segundos los infortunados estaban en el suelo. No murieron de inmediato, por ello dio tiempo a que los trasladaran a centros asistenciales. A Matheus Pérez los llevaron al Hospital Sor Juana Inés de la Cruz y a Artine Jacobo Kedjiadjian Urbina, al Hospital Universitario de los Andes.

Los cuerpos de seguridad analizan varias hipótesis. Una de las versiones es que un grupo de personas llegó en dos camionetas, y luego de reconocer a las víctimas dispararon para asesinarlos; los sujetos lograron huir del lugar.

La muerte de Kedjiadjian fue registrada en el hospital a los 20 minutos de su ingreso, y más tarde fue certificado el deceso del apodado “Casi Loco”. Ambos cuerpos fueron trasladados a la morgue del hospital universitario para practicar la autopsia de ley y adelantar las investigaciones con respecto al doble asesinato.

Ciudad sin ley:

La comunidad afirma que el lugar se ha convertido en territorio sin ley.

En esas residencias habitan, en su gran mayoría, estudiantes de pocos recursos. El gobernador del estado Mérida, Marcos Díaz, reconoció que en ese sector confirmaron la existencia de gran cantidad de armas de fuego.

Hace varios meses fueron heridos de bala dos funcionarios de la Guardia Nacional, cuando intentaban controlar una manifestación. En el lugar también han quemados decenas de vehículos, sin que se identifique a los responsables.

Hace dos semanas, tres vehículos de la Universidad de los Andes fueron retenidos e incendiados. Cuando se produjo la actuación policial para rescatar los autos, los funcionarios fueron recibidos a balazos por encapuchados.

LEONARDO LEÓN MÉRIDA
Educación | Política
EL NACIONAL