El presidente ha amenazado estomacalmente a varias
instituciones con no darle recursos.
Metido hasta los tuétanos
La injerencia del presidente Chávez en las elecciones para la Asamblea Nacional es más que vergonzante y fuera de toda mesura en la tradición electoral.
No solo ha manejado cuantiosos recursos económicos que le dan sustento a grandes movilizaciones a nivel nacional con todo y personal de los canales de televisión del Estado, sino que también ha dispuesto de recursos que le dan color rojo a movilizaciones de gente de un lugar a otro para justificar el volumen de congregados que le apoyan en la campaña , así no voten en el circuito donde monta su caravana oficialista con derroche de plata y apoyo de empresas estadales como cantv, metro de caracas, fan y otros entes participantes en el proceso publicitario con manejo de transporte, sonido y toda la parafernalia .
Igual de desastrosa ha sido la intervención del CNE que no logra darle un alto al abuso gubernamental y más bien se tapa los ojos, los oídos y la boca como los monos que omiten todo por temor, cobardía o simple pánico de enfrentarse al causante de la agresión, complaciendo los desmanes procedimentales en la acción de viveza criolla para ganar a toda costa sin respeto a las normas…
Obviamente ha transformado el señor presidente esta interesante contienda electoral en un extraño plebiscito donde él aparece por todos lados como si fuera una campaña presidencial y los candidatos a diputados del oficialismo asemejan ser unos parapetos sin vida que caminan porque lo ven caminando y hablan porque previamente se leyeron una cartilla cual manual sacado de lo abstracto en su guerra heroica contra el capitalismo, que se yergue como un gran demonio o un supermán gigantesco.
De repente no podía ser de otra manera. La acción de gobierno tiene muchos aspectos que no aguantan la acción de la confrontación de las ideas y los menos que han hecho los candidatos gubernamentales es exponer sus criterios que solo se limitan a la cartilla vinculada al supuesto afianzamiento del comunismo y el derrumbamiento de las libertades democráticas, justificando un supuesto poder para el pueblo.
Adicionalmente, el presidente ha amenazado estomacalmente a varias instituciones con no darle recursos por ser claramente exponentes de una orientación contraria hacia gobierno como lo sucedido en el Hospital Pérez Carreño en Petare o como le ha señalado a los Tachirenses cuando dijo que tiene planteado un decreto habitacional para después de las elecciones, a manera de chantaje y acoso vulgar. Si mi abuelo estuviera vivo le hubiese soltado una palabrota bien fuerte y templada, estoy seguro.
Entonces, el proceso electoral para la asamblea ha dejado al descubierto varias cosas interesantes y una de ellas, son los pies de barro del presidente y el rechazo que subyace en la población que aspira un cambio eminente en la manera de parlamentar y controlar la acción del gobierno que sin lugar a dudas, marcará el próximo proceso que se avecina en menos de dos años y que si involucra al presidente.
Mientras, no queda mas que esperar cómo se expresará el pueblo en el proceso del voto, ya tendremos bastante material para la próxima semana, para opinar y reflexionar sobre nuestra vida inmediata.
LUIS ALFREDO RAPOZO
luisrapozo@yahoo.es
@luisrapozo