Petróleo Liviano
[V]enezuela enfrenta hoy un cambio estructural, no coyuntural, en el negocio petrolero mundial. Por el lado de la oferta, los avances en la explotación de las lutitas petroleras y de campos petroleros en aguas profundas y ultraprofundas ha incorporado en el inventario de crudo cantidades importantes de reservas probables a reservas probadas, con la utilización de desarrollos tecnológicos como el fracturamiento hidraúlico y las FPSO (Flotating Processing Storage and Offloading) costa afuera. Por el lado de la demanda, el aumento de la eficiencia del consumo energético de los países desarrollados y la debilidad intríseca de la demanda energética de los países poco industrializados, hace prever que el nivel general de precios del crudo para los próximos años tenderá a sufrir variaciones a la baja.
Llega el país a esta coyuntura, que comenzó a perfilarse desde 6 años, desde el año 2008, (leer ”Se terminó el superciclo de precios petroleros“) con una industria petrolera, bajo la administración marxista de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, en pleno proceso de deterioro.
Destaca de la Pdvsa actual (la roja rojita) lo siguiente:
– Alto nivel de endeudamiento y con producción futura hipotecada
– Altos niveles de reservas de crudos extrapesados y muy pocas reservas de medianos y livianos
– Enorme burocracia politizada, con mínima capacidad de manejar las actividades de exploración y producción, lo que la obliga a asociarse o tercerizar esas operaciones
– Parque refinador con operaciones intermitentes por poco mantenimiento, bajas inversiones en renovación y malas prácticas operativas.
– Capacidad de producción de crudos en descenso pronunciado
– Vaciada financiera y tecnológica.
El Chávez entreguista y antinacional
El manejo personalista y poco profesional de Hugo Chávez es un ejemplo que describe a la perfección su entreguismo petrolero. Hugo Chávez ha sido el presidente más antinacional que haya tenido el país. Ignacio “Lula” Da Silva lo percibió inmediatamente, y masajeando el ego, la retórica nacionalista y antiimperialista del barinés, lo puso a jugar a favor de los intereses de Brasil. Lula le”bailó un samba” al teniente coronel quien le cedió impensables espacios en el negocio petrolero mundial a la estatal brasileña Petrobras, una de las grandes contribuyentes que 20 millones de brasileños entraran a la clase media durante el boom petrolero que Brasil aprovechó al máximo.
En el año 2000 la producción de Venezuela fue de 3.460 MBD, la de Brasil de 1.534 MBD, para una producción conjunta de 4.994 MBD, de la cual la de Venezuela representó el 69,36%. Catorce años después, en el año 2013, la producción de Venezuela llegó a 2.489 MBD y la de Brasil a 2.693 MBD, para una producción conjunta de 5.184 MBD, de los cuales la de Venezuela representó el 48,0%
En apenas catorce años, Brasil revirtió una diferencia de 1.926 MBD a favor de Venezuela en el año 2000 a 204 MBD a favor de Brasil en el año 2013. En catorce años la producción petrolera venezolana cayó un -28% mientras que la brasileña subió un 76%.
Mis estimados de producción para los años 2014 y 2015 apuntan a que se seguirá ampliando la brecha a favor de Brasil. En 2015, Brasil deberá estar produciendo 2.900 MBD versus 2.380 MBD de Venezuela (unos 2.198 MBD de crudos)
Y como ñapa, Rafael Correa también la bailó un marimba esmeraldeña a Chávez
Ecuador, un país miembro de la OPEP, aprovechó el antinacionalismo de Hugo Chávez, aumentando dramáticamente la producción petrolera de su país, dentro del inmenso boom de precios petroleros.
En el año 2000, Ecuador produjo en promedio 396 mil barriles diarios de petróleo crudo y líquidos, y para el año 2013 produjo 527 mil barriles diarios. Un incremento de 131 mil barriles diarios, equivalente a un aumento del 33% respecto a la producción del año 2000.
Un perdedor, dos ganadores:
Venezuela perdió con Hugo Chávez en la presidencia. Su política petrolera entreguista y antinacionalista llevó al país a perder en catorce años 971 mil barriles diarios de capacidad de producción, un -28% cuando los precios petroleros alcanzaban su valores más altos y por más tiempo en la historia. Mientras, Brasil fuera de la OPEP metía en los mercados petroleros 767 mil barriles diarios de petróleo en 2013 comparado con el año 2000 y Ecuador, dentro de la OPEP, 131 mil barriles diarios en el mismo lapso.
Brasil y Ecuador sumaron en 2013 898 mil barriles diarios respecto al año 2000 mientras Venezuela perdía 971 mil barriles diarios.
Dos nacionalistas sensatos tomaron las oportunidades que el entreguista antinacionalista le robó a su pueblo.
Por: David Moran
@morandavid
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Caracas, martes 25 de noviembre, 2014
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