Miles sustracciones de autopartes
se producen al mes en Caracas
■ Robo y hurto de vehículos abarca 40% del mercado legal.
■ La escasez de repuestos para vehículos por los problemas de liquidación de divisas y la falta de materia prima han provocado un incremento de 85 por ciento de hurto de automóviles y piezas automotrices. Así lo indicó el comisario Argenis Guillén, asesor en materia de seguridad.
El repunte data desde hace cuatro meses, cuando se agravó el déficit de repuestos en el mercado nacional. El año pasado, el robo y hurto de vehículos se había reducido en la Gran Caracas porque la mayoría de las bandas priorizaron otros delitos como secuestros y robos en inmuebles. Pero según Guillén la sustracción de piezas automotrices se ha impuesto como un negocio lucrativo.
“Las bandas tienen contacto con gestores o con dueños de talleres mecánicos que funcionan de manera ilegal porque en su mayoría no tienen patente de industria y comercio. Los hampones sustraen las piezas en estacionamientos a cielo abierto y en los centros comerciales que registran gran volumen vehículos y las ofrecen a los encargados de algunos talleres para luego venderlos a los interesados con un 50 por ciento de incremento”, indicó Guillén.
Los antisociales, explicó el experto, no tardan más de cinco minutos en extraer las baterías de los vehículos. “Usan instrumentos metálicos para violentar el seguro del capot y una vez que lo abren la sacan. También se ubican debajo del carro y extraen el arranque. Además de los cauchos. Ellos también usan una espacio de control remoto universal que opera con un sistema de selenoide para abrir los vehículos”, apuntó.
El miércoles pasado la policía judicial procesó 37 denuncias de robos o hurtos de vehículos en el Distrito Capital.
La cifra conocida extraoficialmente es 10% más alta que el promedio de 33 casos diarios. No obstante, sitúa a la capital como el lugar del país donde más vehículos pasan todos los días a manos de delincuentes.
Los fines de semana el promedio de este tipo de robo y hurto disminuye a aproximadamente 25 por día. En las jornadas laborales los cuerpos de seguridad han recibido hasta 46 reportes de ese delito.
De los casos procesados 70% se refiere a motocicletas, indicaron en Cicpc. De mantenerse esa tendencia, la actividad de los hampones se habrá incrementado en 25% con respecto a 2013.
El ex jefe de Vehículos de la policía judicial, comisario Carlos Belisario, atribuyó eso a la escasez de partes en el mercado legal: “La carencia de repuestos es en todas partes. Es total. No hay en las concesionarias y las plantas están paradas. Los delincuentes aprovechan esto”.
Curvas se cruzan:
Las cifras aportadas por la Asociación de Industriales, Fabricantes y Ensambladores de Motocicletas (Aifem) indican que durante los primeros 5 meses del año fueron vendidas 71.951 motos.
Eso representa una disminución superior a 60% con respecto a la producción reportada por las fábricas de estos vehículos en 2013.
Xiomara Hoyos, portavoz de la asociación, informó que las unidades en venta fueron fabricadas con partes adquiridas el año pasado. Este año los proveedores en el extranjero no han querido negociar nuevos envíos pues la deuda con ellos asciende a más de 860 millones de dólares.
En cuanto a los automóviles, solo han salido al mercado 6.161 unidades durante el primer semestre del año en todo el país. Si la crisis en el sector se mantiene tal como está, al final del año serán negociados en la capital aproximadamente 30.000 vehículos, entre autos y motos, equivalentes a 20% de las ventas para todo el país.
De igual forma, si los delincuentes mantienen su actividad con el mismo ritmo que el de la primera mitad del año para diciembre se habrán acumulado más de 12.000 casos de robo y hurto de vehículos, solamente en Caracas.
Eso equivale a 40% de los vehículos que entrarán en circulación este año en la capital.
Desvalijado express:
La demanda de partes de vehículos ha incidido en la frecuencia de otro delito, como es la extorsión asociada al robo y hurto de automóviles y motos.
Para los ladrones ahora la ganancia es mayor al vender las partes del vehículo desvalijado que al negociar una devolución con la víctima.
Según Carlos Belisario, las redes delictivas son capaces de colocar las piezas de un vehículo robado en menos de un día.
“Venden las partes en chiveras o contra pedido. Las chiveras no llevan un control de lo que venden. Por ejemplo, compran un carro en remate de aseguradora y luego con la misma factura ingresan otros tres del mismo modelo”, afirmó.
Las piezas más buscadas:
Los alternadores, cauchos, baterías y piezas pequeñas son los que reportan mayor déficit y, por ende, se convierten en blanco de hurtos. Rocky Porta, propietario de una venta de Autopartes de la avenida Nueva Granada, manifestó que maneja una lista de espera de 300 personas interesadas en la adquisición de baterías.
“Hasta hace cinco meses, los proveedores me despachaban hasta 40 baterías semanales, ahora solo dos. De los clientes que esperan el producto, 150 lo han solicitado porque han sido víctima del hampa. Se lo han sustraído de estacionamientos de El Paraíso, de los centros comerciales y de los parqueaderos de cadenas farmacéuticas y zonas residenciales”, explicó Rocky Porta.
Frank José Rodríguez, un vecino de la urbanización El Paraíso, reseñó que la semana pasada estacionó por espacio de tres horas su vehículo en un parqueadero del sector.
“Fui a hacer unas diligencias de trabajo en la Av. Principal y cuando regresé, el carro no prendió. Me bajé y vi que el capot fue violentado. La batería no estaba. El encargado y el vigilante del estacionamiento no se dieron cuenta de la acción delictiva y, por ello, no se hicieron responsables del hecho. Me enteré que en esa misma semana hurtaron piezas a otros usuarios del mismo local”.
Las cifras:
• El comisario Argenis Guillén afirma que Sucre, Libertador y Chacao reportan mayor incidencia de hurto de piezas automotrices: 1000 sustracciones mensuales en promedio.
• En esas zonas ocurren treinta casos semanales de robo y hurto de vehículos, cometidos por tres bandas.
• En Guarenas, Guatire y El Junquito se ubican “picaderos” para desarmar los carros.
Por: Natalia Matamoros
Javier Ignacio Mayorca
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EL UNIVERSAL/EL NACIONAL
domingo 3 de agosto de 2014