El empresario que se
entendía con Chávez
■ El dueño de Venevision esperó dos años para obtener su ciudadanía en un país donde posee varias propiedades.
■ Con un patrimonio neto de US$4.000 millones, Gustavo Cisneros Rendiles, nacido en Venezuela, de 69 años de edad, es uno de los cien latinoamericanos más ricos del mundo, según la revista Forbes.
■ El magnate venezolano Gustavo Cisneros, propietario del canal Venevision, adquirió la nacionalidad dominicana, confirmó a Efe una fuente de la Junta Central Electoral (JCE), encargada del registro civil local.
Cisneros, que inició este proceso en 2012, recibió el domingo la cédula de identidad y electoral dominicana de manos del presidente de la JCE, Roberto Rosario Márquez, precisó la fuente.
El empresario, considerado uno de los hombres más ricos de Latinoamérica, dijo en el encuentro que con su cédula podrá disfrutar “de todos sus derechos y deberes de nacionalidad y ciudadanía en la República Dominicana”, según la JCE.
El magnate venezolano adquirió la nacionalidad dominicana poco más de cinco años después de recibir la autorización para residir de manera permanente en la República Dominicana. Cisneros posee varias propiedades inmobiliarias en la República Dominicana.
Cisneros es el presidente y accionista mayoritario de la Organización Cisneros, uno de los emporios empresariales más grandes de la región, entre los cuales se encuentra en Venezuela el canal de televisión Venevisión, con la filial plus en Estados Unidos.
Gustavo Cisneros:
En República Dominicana (La Romana) El avión de Gustavo Cisneros, un G-V, se llama “El Expedito”, igual que el autobús con el que su padre, Diego Cisneros, inició su primer negocio. Es una muestra de admiración por quien fuera su gran mentor, pero es también una muestra del pragmatismo que le heredó, y que en su caso no es sólo una filosofía de vida: es la vida misma.
En su casa de la Romana, en República Dominicana. Cisneros no es el clásico multimillonario déspota, frío y distante. Al contrario, es un hombre amable y su poder, que es enorme, contrasta con su sencillez, que parecería estudiada si no fuera tan natural.
Cisneros maneja su propio carro. La mayoría de los multimillonarios latinoamericanos, no sabe manejar, si su fortuna es heredada, o lo olvidaron a medida en que se hacían más ricos. Después de un encuentro que sostuvimos la noche antes de la entrevista, Cisneros nos llevó en su automóvil de regreso a Casa de Campo.
Recibe a sus visitantes en “La Serenísima”, una casa diseñada por Jacquelin Robertson, decano de arquitectura de la Universidad de Virginia, y que antes perteneció a Henry Kravis, famoso por la toma hostil de Nabisco. En esa casa tiene la infraestructura necesaria para atender una cumbre presidencial (varios jefes de estado se han hospedado allí) o reunir una junta directiva de cualquiera de sus empresas. A un minuto en lancha está “Casa Bonita”, la residencia privada de la familia. Y tiene un helicóptero –no recordamos si tiene nombre– para ir a una hacienda cercana.
Detrás de sus modales amables se esconde un aparato empresarial que, como en todos los grupos de poder, a veces interpreta los deseos del jefe y suele repeler a los intrusos y contraatacar cuando se siente atacado. Cisneros es el más sofisticado de los magnates latinoamericanos y su organización es enervantemente eficaz. Además de La Romana, tiene oficinas en Madrid, Caracas, Miami, Nueva York y Colorado. Y las de Nueva York funcionan 24 horas al día, todos los días del año.
No es el más rico, pero sí el más poderoso y el mejor conectado entre los magnates iberoamericanos. Se mueve en los círculos políticos, académicos y periodísticos más importantes del mundo. Es socio de Time-AOL, amigo de Rupert Murdoch y muy cercano a los Graham (del Washington Post y Newsweek). Compañero de pesca de Bush padre, visita con frecuencia a los jefes de Estado en Argentina, El Salvador, España, Brasil y Colombia, entre otros. Y su interés por los destinos de la región lo ha posicionado como el empresario más involucrado con las Américas.
Por estos días, uno de los eventos más importantes que tienen lugar en Nueva York es la exposición Matisse-Picasso, que se realiza en el MOMA de Queens. Miles de personas –que reservaron su boleta con la debida anticipación–, la visitan diariamente. A la salida hay una gran cartelera con los nombres de los fundadores del nuevo Museo de Arte Moderno. Y allí, en un lugar de honor entre apellidos ilustres como Lauder, Rockefeller, Bass, Bronfman, Kravis, Morita, y entidades como JP Morgan, Bank of New York, Hearst Foundation, John Getti Trust y Sony Corporation, están los nombres de Mr. and Mrs. Gustavo Cisneros.
Aunque es venezolano, hoy menos del 20 por ciento de sus intereses están en su país. AOL Latin America, tiene su base en La Florida y Univisión es un gigante en el mercado hispano de Estados Unidos. Claxson opera desde Buenos Aires y tiene un canal de TV y varias emisoras de radio en Chile. El pasado 13 de abril la Cámara de Comercio Latina de Estados Unidos, Camacol, en nombre de las cámaras de comercio latinoamericanas, le dió el premio de El Empresario del Año. Y el próximo 3 de junio The Americas Society hará una gran fiesta en su honor, para la cual está vendiendo las mesas a 10.000 dólares.
En general, el Cisneros que encontramos es un hombre tranquilo, agudo, informado, con buena memoria, que lee rápido a la gente, disciplinado y de muy buen trato. Y que además se interesa por su gente. A Sandra Zanoletti, quien lo acompaña desde hace más de 21 años y hace las veces de asistente personal cuando está en La Romana, la saluda de beso y ella se desvive por él. Marilú, que está en la oficina, lleva 37 años con los Cisneros. Pero más importante que eso: ni la una ni la otra le dicen “don”; si acaso señor, y muchas veces Gustavo a secas.
Es muy bueno en la diplomacia y lo hace con la libertad que le otorga el no tener que rendirle cuentas a nadie. Es un tomador de riesgos, un jugador de largo de plazo que ha tenido momentos difíciles, pero un jugador absolutamente exitoso. Su última partida no fue casada por él sino por Hugo Chávez [1], quien lo eligió como contendor. “No soy contraparte política de nadie”, dice Cisneros, pero lo cierto es que Chávez le ha dedicado una buena parte de sus ataques a la clase empresarial. Sin embargo, Cisneros pasa mucho tiempo en Venezuela y recibe, como si fuera un líder político [2], a Carter, a Bush padre, a Gaviria… No hay duda: Chávez escogió un enemigo poderoso.
Hay analistas dedicados a seguirle el paso a sus inversiones y ver qué pasa con su fortuna. Más allá del precio de sus acciones o de la suerte de sus compañías, no cabe duda que Cisneros tiene su estrategia clara. (Fuente: Objetivo “militar” de Chávez).
Por: Antonio Navalón
Corresponsal en Caracas
Politica | Opinión
Oficialismo | Psuv
Estudiantes | Protestas
Ciudadanos | DDHH
lunes 17 de marzo, 2014
Tweets about “Gustavo Cisneros adquiere la nacionalidad dominicana”