Sebastiana sin Secretos
CURACAO. En esa isla existe una empresa, visitada por miles de venezolanos. Es una gran casa con cientos de jóvenes, sentadas frente a escritorios individuales. En cada mesa de esas hay máquinas de puntos de venta. El venezolano tramita sus cupos de Cadivi argumentando viajes para cualquier parte de Europa, Estados Unidos o Asia. Adquieren el pasaje, pero no van a ese destino. Viajan a Curacao y en esa sede de la empresa raspan las tarjetas. “¿Sus cupos son para qué país?”, pregunta la chica que atiende al viajero. “Yo tenía que viajar a España”. “Ah, entonces es por este punto”, responde la empleada de la empresa. Y zasss pasa la tarjeta que automáticamente extrae el monto de los dólares. La empresa deduce el 10% de la transacción. Los venezolanos se saludan con gran afecto. Ni una pizca de rubor por desangrar al país.
EMPRESA. Es una transnacional de origen turco, que llegó a Venezuela en el 2011, para trabajos de construcción. Empezaron sacando un millón de dólares al mercado negro para cubrir problemas de liquidez que tenían. El gerente de esa empresa en Venezuela ve más lucrativo el negocio del mercado negro que las obras de construcción. Así empiezan a colocar hasta 3 millones de dólares semanales en el mercado paralelo. Cuentan con la colaboración de funcionarios nacionales y regionales. Un gerente de la transnacional le indica a un alto funcionario del gobierno regional la cantidad que van a vender en la semana; el funcionario consigue los compradores, que en su mayoría son comerciantes con necesidad de divisas para comprar mercancías y reponer inventarios en varios rubros. El monto lo fijan en base a las páginas que indican cuál es el dólar negro. Pactan la tasa de cambio. La transnacional le transfiere al comprador desde una cuenta de una empresa filial, a la cuenta del comprador en Estados Unidos, Panamá o Europa la cantidad de dólares negociada. El comprador lleva en los días posteriores cantidades enormes de bolívares en efectivo a las oficinas del gerente de la transnacional, quien recibe el dinero y lo entrega al contador de la empresa, luego de descontar su comisión, la del Gerente General y la del alto funcionario del gobierno nacional y regional. Eso se repite todas las semanas, en transacciones que oscilan entre 50 mil y 3 millones de dólares.
CONTRABANDO. En Guasdualito, Guacas y Cantón (frontera Barinas, Apure) la gente hace hasta 8 horas de cola para comprar 40 litros de gasolina. El contrabando de combustible y alimentos tiene azotadas esas poblaciones. El grupo de contrabandistas no tiene problemas para llenar los tanques, pimpinas y tambores, porque pagan Bs. 100 para no hacer cola.
MUNICIPIO. Es el de San Cristóbal. Las nuevas autoridades empezaron poniéndole la mano al seguro de los trabajadores. Las primas cobradas del año 2013 eran de Bs. 26 millones por HCM, vehículos y riesgos patrimoniales. El nuevo alcalde pidió cambiar la empresa y sin consultar a los trabajadores contrataron una nueva. Y duplicaron el monto del contrato casi en 100%.
GUÁRICO. Es en la REDI Los Llanos en San Juan de Los Morros. Unos militares han aplicado un plan de extorsión a los mineros. Les quitan dinero. Les dicen que reciben órdenes superiores para prohibirles explotar las minas. Habría un oficial que es dueño de una mina en Guanayén. Los mineros han hecho denuncias pero no les dan respuestas. El llamado es para el mayor general Jatar Medina.
OFICIALES TÉCNICOS. Hay muchos molestos. La ministra de la Defensa presentó un proyecto para que en diciembre 2013 ascendieran los primeros Generales Oficiales Técnicos. Pero en la comandancia del Ejército, en la presidencia de la Asamblea Nacional, generalato del Estado Mayor presidencial, los comandantes generales de la Aviación y la Guardia Nacional, se opusieron. Eso fue decisivo para que no ascendiera ningún oficial técnico a general. Los que sí ascendieron fue a Diosdado Cabello a capitán, a Arias Cárdenas, a Rodríguez Chacín y a otros oficiales del 4F. Además ascendieron a coroneles de comando a Generales, aunque estaban retardados porque no cumplían con los requisitos mínimos. La excusa para no ascender a ningún oficial técnico a General es porque causaría malestar en la FAN.
GANADO. Fueron 600 bovinos que llegaron desde Colombia hasta el matadero en Ciudad Bolivia de Barinas. Los primeros animales los mataron a los 4 días. Pero esperaron hasta 13 días para matar los últimos 180 bovinos, sin darles comida. Argumentaban que no había espacio en las cavas. No se explica por qué el Estado obliga a matar el ganado importado en sus mataderos si no hay cupo. El matadero estaba full de ganado en canal, que llegó de Colombia. Facturan a Bs. 500 los cueros y en realidad se venden a Bs. 2 mil. Los importadores están enfrentando pérdidas, porque en muchos casos se le mueren animales antes de ser beneficiados, además esa carne que resulta, después de 13 días, proceden de animales que en algunos casos están enfermos por no comer durante tanto tiempo. El Gobierno decidió que el ganado vivo importado, sobre todo el de Colombia, se mataría en los mataderos del estado. Pero 70 % de esos mataderos no están aptos. Eso causa que los maten hasta 13 días después como en Ciudad Bolivia, pero en otros casos se mueren en los corrales. Además los envían a mataderos muy distantes, lo que agrava el problema por la dificultad de conseguir combustible, por lo que tardan hasta 2 días para seguir; salen desde Ureña (Táchira).
BORGES. Es Jorge Luis, el poeta argentino, el que está entre los grandes del mundo. Un día escribió: “¿Dónde estará mi vida, la que pudo/ haber sido y no fue, la venturosa/ o la de triste horror, esa otra cosa/ que pudo ser la espada o el escudo./ ¿Y que no fue? ¿Dónde estará el perdido/ antepasado persa o el noruego,/ dónde el azar de no quedarme ciego,/ dónde el ancla y el mar, dónde el olvido/ de ser quien soy? ¿Dónde estará la pura/ noche que al raudo labrador confía/ el literato y laborioso día,/ según lo quiere la literatura?”
Última Hora:
■ Pésima la carretera que comunica a Barinas con Mérida. ¿Será que los gobernadores Alexis Ramírez y Adán Chávez se ocupan de ella?
■ Larguísimas colas para surtirse de combustible en Táchira.
ANCIANO. Se llama Federico Pérez. Vive en extrema pobreza monte adentro de Guaremal, Los Teques, estado Miranda. Vive en ese ranchito frente al que posa. Allí no hay electricidad ni agua potable. El Consejo Comunal de la zona ha puesto electricidad en parte del sector, pero le falta un poco para llegar hasta el ranchito de Federico. Algún dirigente podría ocuparse para mejorarle la casita de bahareque al anciano y que tenga algo de luz y agua. Federico cocina a leña, pero no puede hacerlo seguido porque la casita se le inunda de humo y entonces no ve ni siquiera la olla en el artesanal fogón. Federico, a pesar de todo, es feliz en su parcelita. Está lúcido y tiene muy buen humor. Llevarlo a un ancianato no es la opción. Tenía un vecino que lo ayudaba mucho, pero ya murió y sólo le quedaron sus dos perritos, que complementan su compañía con tres gaticos. Su única sobrina vive en Carrizal y antes lo llevaba con ella, pero lo ponía a dormir en el suelo argumentando que “olía a feo”. Federico cuenta con vecinos que están pendientes y pasan en las mañanas a saludarlo y le llevan su taza con café. Una amiga le compró almohada, una camisa, medias, comida, y dos botellas de agua mineral. Dice que ella y su hermana se dan una vuelta por allá cada vez que pueden. En la parte de afuera del ranchito hay unos pipotes que es donde Federico recoge agua de lluvia, con la cual lava la ropa y hace la comida.
*Sebastiana Barráez, Periodista del Semanario Quinto Día, egresada de la Universidad de Los Andes como licenciada en Comunicación Social. Ex jefe de prensa de la comisión de Finanzas del Senado. Con amplio conocimiento de la fuente militar y de fronteras. Publicaciones en varios medios de Venezuela y el extranjero. Conferencista en eventos nacionales e internacionales.
Por: SEBASTIANA BARRÁEZ
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viernes 10 de enero, 2014
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