“Julet el Worge y Mary Korddina
Macht Hado en la comarca…”
Reuniose el Comando Sílvico-Nil-Atar, dirigido en esta oportunidad por el padrino de los Malt Ahndros. Ustedes saben a quién me refiero. Ese personaje corto de tamaño, ancho de corrupción, estrecho de pensamiento, gordo de propiedades y delgado de material gris.
Estaban en la comarca de la Asamt Blheak Nacionalstika.
El padrino exhibía una sonrisa perruna. Babeaba profusamente, y cada cierto tiempo sus intestinos gruesos y delgados rompían con fuerza el esfínter mayor para dejar escapar sonoramente gases propios de una manada de zorrillos. Sus ojos estaban rojos, como inyectados de sangre y de odio.
Su preferred partner Mr. Pedro el Gran Carroña se paseaba junto con otros miembros del grupo Alí Baba, con cabillas gruesas, manoplas horribles, palos, piedras, bofetones, allá en la galera 3.
Esperaban a los de la tribu de Arturo el Kadonski para demostrarles por la vía de los hechos pacíficos y sangrientos, amistosos y cobardes, parlamentarios y criminales, solidarios y miserables; oh, qué confusión. Alá me ilumine.
Me refiero sólo a hechos sangrientos, cobardes, criminales y miserables, olviden las otras palabras. Son las cosas que suceden y es el tiempo el que después dirá.
Uno de los escogidos por el padrino tenía preparada una sustancia prohibida por la Convención de Ginebra, era un ácido hiperactivo que pensaba rociarle generosamente en el rostro blanquecino a una de las amazonas de Arturo el Kadonski, quien era conocida en la comarca como Mary Korddina Macht Hado. El acido corrosivo no pudo ser usado, pero, en su lugar, Pedro el Carroña ordenó le pegasen con contundentes objetos en ambos pómulos y en la nariz.
Cuando se evidenció que el mandato había sido cumplido y el tabique de la nariz de la amazona estaba convenientemente desplazado 35 grados a la izquierda, varias de las hembras del padrino rieron a mandíbula maldiciente. Y exclamaron al unísono aquella vieja frase que pronunciase una vez la encarnación de Linda Blair, encargada de las ergástulas y galeras presidiómetras: “Tú lo que tienes son muchas patas de gallo”, que repitieron salvajemente y con movimientos propios del Major Ballet Nigeriano.
Alá, dame fuerzas para seguir esta historia sin vomitar la poca bilis que me queda. Ay, Señor, me queda por contar el caso de Julet el Worge, cuya sangre puede verse en los instrumentos de odio y tortura usados por Hel Bis Not Amort Ohso y en los pasillos de la Asamt Blheak.
La bruja mayor precavida del horroroso asunto del padrino tomó rápidamente las medidas necesarias y de nuevo, sin que nadie la llamase, la molestase, le preguntase o le sugiriese, actuando en su carácter de ama y señora del espejo y del reino del Tribunalzaso Premier declaró culpable y sentenciose a muerte a pedradas o a cabillazos a Julet el Worge por haber actuado inescrupulosamente usando su quijada, pómulo y frente, a la manera de Sansón contra los filisteos, digo, haber usado su quijada contra los puños indefensos de Hel Bis y así lo declaró. Dijo la bruja mayor que la falange proximal de ciudadano Not Amort Ohso había quedado sumamente rojiza, mientras su metacarpo, con marcas evidentes de los incisivos, caninos y premolares del terrible agresor.
Por su parte el heredero de los bigotes turbios, con la inteligencia que lo caracteriza rápidamente supo que lo del Worge no era más que un teatro preparado por Thaelman Urgelles, Óscar Lucien, Héctor Manrique. Afirmó que la sangre que se vio en las pantallas provenía de un cochino que temprano había sido sacrificado para la preparación de una Phar Ylla en honor de Barack Obbana.
Por otro lado, Korddina Macht Hado también habíase bañado en sangre de puerco, marrano, cochino y chancho.
Más tarde el padrino reuniose en el cantón de los Malt Ahndros para preparar nuevos sacrificios de su especie. Los rumores en la tribu de los verdes y soldados crecían. To be continued.
Por: EDUARDO SEMTEI
@ssemtei
POLÍTICA | OPINIÓN
EL NACIONAL
UNES 06 DE MAYO DEL 2013