Yoani escribió un primer e inocente
blog que le cambió la vida…

La bloguera y disidente cubana Yoanni Sánchez utiliza tácticas guerrilleras para infiltrase en los hoteles de Cuba y conectarse a Internet. Sus armas son el blog y el twiter. Su munición, la palabra. La próxima semana viaja a Lima.

Los hermanos Castro libraron batalla contra la tiranía de Batista con un contingente de bravos barbudos pobremente armados hace más de medio siglo. Yoani Sánchez, 36, libra ahora batalla contra la tiranía de los Castro, armada de tan solo de la palabra y una computadora con la cual mantiene un urgente contacto con el mundo. La bloguera cubana aterriza en Lima el próximo 9 de abril, como parte de una intensa gira internacional que se inició a fines de enero. El régimen de Cuba le permitió salir de la isla luego de múltiples solicitudes de visado, y como aparente muestra de tolerancia por parte de la implacable dictadura. La voz Sánchez corre la cortina de la opresión para dejar penetrar el sol de la pluralidad.

Yoani Sánchez escribió un primer e inocente blog que le cambió la vida, se la puso patas arriba, y a partir de entonces no conoce ni paz ni refugio, en abril del 2007. La Habana estaba embanderada de los colores de los equipos rivales que definían la final de béisbol, espontánea expresión de fervor pelotero en la isla. Desde su departamento en el piso 14, Sánchez formuló una simple pregunta en el ciberespacio: ¿Y si los cubanos tuvieran la libertad de expresar sus lealtades políticas, así como lo hacen para expresar sus simpatías deportivas? La reacción fue viral. A favor y en contra. “Ese día me cambió la vida”, confiesa Sánchez.

La bloguera cubana llega a Lima la próxima semana, seis años clavados después de ese primer blog, como parte de una gira internacional cargada de honores, temblores y humor negro. En Praga quiso visitar el Museo del Comunismo.

–En mi pésimo inglés pedí comprar un boleto. Percibiendo un acento español, la boletera me preguntó de dónde yo era.

–Yo vengo de Cuba, respondí.

–No, señora, usted no paga. Aquí usted entra gratis, porque usted vive esto todos los días.

Es inevitable admirar el coraje e integridad de la joven cubana. Produce escalofríos pensar qué tiene la tiranía cubana reservado para ella cuando regrese –como dice– “a la jaula”. Yoani Sánchez tiene previsto retornar a su país en el mes de junio. Aguardan su retorno en la isla su marido Reynaldo y su hijo Teo.

–¿Si el régimen cubano prohíbe su regreso a Cuba?

–Entonces me convertiré en una balsera al revés, responde con determinación.

–¿Qué piensa hacer cuando regrese a Cuba?

–Fundar un medio de prensa. Soy consciente de que el gobierno no lo va a permitir, pero no seré yo quien me ponga los límites.

En cuestión de ocho semanas Sánchez habrá cruzado el Atlántico tres veces. En Madrid recogió el Premio Ortega y Gasset concedido en 2008, en Nueva York el premio María Moors Cabot con la que fue distinguida en 2009, en Washington fue recibida en la Casa Blanca y en el Senado norteamericano.

A través de su blog Generación Y narra sus sugerentes impresiones sobre el viaje. De acuerdo con el último registro, ya tiene 439,000 seguidores. “Esa visibilidad nos salva la vida, literalmente”, dice.

A mediados de marzo, Sánchez fue la invitada estelar de la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa en Puebla, México.

Fue la primera vez en los 54 años de dictadura castrista en que una disidente cubana asumió la representación de los periodistas independientes cubanos ante el importante organismo de prensa hemisférico.

La bloguera tan solo reclama que el régimen abra los micrófonos para que los cubanos se expresen sin temor a las represalias. Su voz es un clamor de libertad.

–Cuba es una nación que tiene muchos matices, describió. Si existiera un marco legal para la existencia de otras fuerzas políticas, sin lugar a dudas, nacerían. Hay mucha gente talentosa. Hay mucha gente que tiene guardados proyectos de reconstrucción económica y social de la nación, esperanzados a que el gobierno acepte la discrepancia. Pero mientras el cubano común sienta que el opinar es tomado como un acto de traición y que pueda ser víctima de castigo institucional y gubernamental por el mero hecho de hacer una propuesta que quizá no esté en los cánones del partido comunista, seguiremos viviendo en un país de máscaras y simulación.

Pero no se hace ilusión alguna de que Raúl Castro vaya a abrir lo que llamó el “cerrojo al pluripartidismo”.

–No creo, y no veo, en el corto plazo, que el gobierno cubano vaya a permitir legalmente la existencia de esas fuerzas políticas. Saben que si nos dan acceso a los micrófonos, y la gente pueda expresar sus ideas y sus proyectos, tendrían bien pocas oportunidades de volver a gobernar a Cuba.

Ha sido amenazada vía correo electrónico, pero prefiere pensar que “se basan en el desconocimiento de mi labor que en un sentimiento auténtico de rechazo hacia mi persona”. En cuanto evento ha asistido, un reducido piquete pro cubano organiza una contramanifestación. Ocurrió en Brasil, en Puebla, en Washington y en Miami. Ella lo agradece. Prueban la opresión cotidiana que viven los activistas cubanos en la isla.

–Cuando alguien me pregunta por qué hago lo que hago, yo me remonto a una anécdota del año 2003, cuando llegó la Primavera Negra, y 75 opositores, periodistas independientes y activistas cubanos fueron a prisión acusados bajo la Ley Mordaza. Nosotros tuvimos que explicarle a nuestro hijo Teo que Adolfo Fernández Sanz, una persona muy cercana a nuestra familia, estaba en prisión.

–Mi esposo le dijo: Teo, tu tío Adolfo está en la cárcel.

–Teo, que tenía ocho años, preguntó: por qué.

–Reynaldo se le ocurrió decirle: Porque es un hombre muy valiente.

–Y Teo respondió con una frase que yo cargo hasta hoy: Entonces ustedes son un poco cobardes porque todavía siguen libres.

–Con un hijo así no se puede hacer otra cosa que hablar.

Madre, filóloga, periodista y un poco hacker, Sánchez descarta las etiquetas políticas. “Me defino como un electrón libre. A qué grupo o átomo me asocio depende de la honestidad de las premisas”. Cada día que pasa la aproxima al inevitable momento en que por voluntad propia ha de retornar a su patria. Sus miles de seguidores a través de su cuenta twitter y blog estarán pendientes de su riesgoso mañana. La cuenta regresiva está en marcha.

Escribe: MARCO ZILERI
Politica | Opinión
Ciudad | Lima
Perú, lunes 01 de abril, 2013