Alto

LA HABANA. Regresando a Caracas tras asistir a la VI Cumbre de Unasur en Lima, el vicepresidente y canciller Nicolás Maduro, hizo escala en la capital cubana para saludar al presidente Chávez y conocer, en detalle, la realidad de su enfermedad tras habérsele realizado un Pet Scan el viernes. Maduro compartió esa información privilegiada y confidencial con el presidente de la AN, Diosdado Cabello. Ambos han estado trabajando juntos ante la ausencia del caudillo, desmintiendo así los chismes de que estarían enfrentados. Cada uno por su lado se ha movido llamando a la calma a sus compañeros de partido y de armas. Recalcan desde Cuba la necesidad de unidad interna tanto en el PSUV como en los cuadros militares. Todos están acordes en insistir que Chávez “regresará repotenciado” y asumirá el poder en enero, como previsto. Es la orden de arriba hacia abajo. Nada de hablar de presencia en la campaña de los gobernadores. Quieren detener las especulaciones sobre un “chavismo sin Chávez”. La situación del país está muy difícil en medio de las fiestas decembrinas y las decenas de protestas diarias, desde refugiados hasta los empleados públicos. El drama de las finanzas sigue rondando la inercia gubernamental y la inseguridad en aumento pese a los anuncios de planes y policías. A estar atentos…

Medio

EL IMPACIENTE. “No podrán tapar el sol con un dedo…ni con 5…ni con 10″… “Poco a poco iremos corriendo la cortina que no quieren que despejemos de un solo tirón”… “Hasta Teodoro Petkoff en su programa dominical, por Globovisión, habló de la lucha por la sucesión que arrancó en el PSUV”… “Lo de la cámara hiperbárica es una mentira piadosa como lo abordó ayer El Nacional”… “A medida que se acerque el 10 de enero o antes hacia el Año Nuevo, podremos presenciar a un presidente reelecto muy disminuido y enfermo, del que no sabremos si asume o no el período de 6 años para el que fue reelecto el pasado 7-O”. Todas esas frases que coloqué en mi portal, www.runrun.es, pertenecen a distintos colegas de medios venezolanos que, hurgando en torno a la verdad de la salud presidencial, como yo, se han topado con una barrera de secretismo, sigilo, censura, autocensura y sobre todo miedo, por parte de las autoridades rojas rojitas que en el mejor de los casos nos han pedido “prudencia”. Uno fue más allá cuando me dijo, en medio de una risita nerviosa, una sentencia que destilaba el temor de que al saberse la verdad los demonios -tanto rojos como de todos colores- se podrían desatar en el país con impredecibles consecuencias: “Está bien que te coronaste con el tubazo de su cáncer el 25 de junio de 2011 y nos madrugaste a todos los que estamos con el “proceso”, pero ten mucho cuidado en esta oportunidad, pues si lo haces sin piedad algunos no te lo perdonarían”. Ya antes había sabido que tres diferentes cuerpos de inteligencia me tenían espiados mis correos electrónicos y el teléfono, para “dar con la fuente que lo informa”. Cuando lo supe, un zamarro amigo me advirtió: “debe ser por temor a que te enteres de cualquier plan de los que quieren asumir el poder en cualquier eventualidad”. Conocí de altos funcionarios conversando con gente de medios libres y con periodistas no complacientes. Les solicitaban mas como un favor al país que al régimen, esa cordura informativa. Era lo que garabateaban en sus diálogos, por primera vez “muy respetuosos”. La procesión va andando. La situación del paciente es seria y delicada. Harán todo lo inalcanzable para mejorarlo y repotenciarlo en La Habana. Su deseo, por ahora, más que hacer campaña en el país por sus candidatos -que se sienten huérfanos de su apoyo como lo tenían previsto- es hacer todo el esfuerzo para asistir a la Cumbre de Mercosur este jueves y viernes. ¿Podrá ir para hacerse ver? Para ello, esta vez, sí harán falta todos los milagros de los que en oportunidades habló en estos 17 meses tras habernos confirmado su padecimiento. El abuso de la morfina para los dolores en la pelvis y los esteroides para aparentar estar bien en su campaña, le está pasando factura. Su organismo ha desarrollado lo que médicos denominan “resistencia orgánica” a esos componentes.

Un ex ministro de Información comentó entre militares amigos, que “tenía lacerada la entrepierna por la radiación aplicada”. En Cuba esa ha sido una de las preocupaciones. La llaman “desarrollo dermatológico agresivo”. En fin, podremos verlo en una que otra aparición televisiva, bien en vivo o grabada, pero nunca como el aguerrido luchador que, en lo que él mismo catalogó como batallas, las había venido ganando con su “carisma esperanzador de multitudes”.

Ojalá y se mejore pronto y venga repuesto a asumir el gobierno de 2013 a 2019. Un período en el que cosechará lo que ha sembrado en estos 14 años. Cosecha muy deficiente por sembradores que, como Jorge Giordani, Elías Jaua, Juan Carlos Loyo y casi 200 ministros en tres lustros, creyeron en revivir el fracasado comunismo soviético, muerto en el mundo. Hará falta que esté el caudillo repuesto para esos retos. Que se mejore cuanto antes es nuestro deseo.

Bajo

¡COSA MÁS GRANDE!. En los ensayos militares en El Pao, Bolívar, el pasado 15 de noviembre, causó muchísima molestia en oficiales y la tropa, que generales cubanos estaban vestidos con el uniforme de sus pares venezolanos y además dirigiendo las operaciones militares. Como si eso fuera poco en el CEO los coroneles cubanos están permanentemente revisando y dirigiendo los planes de defensa de Venezuela, algo que nunca se vio con los oficiales extranjeros que, como asesores o agregados, manejaron esa información dentro de Fuerte Tiuna. ¿No se podría considerar todo ello como una traición a la patria? Aquella excusa de sacar a los gringos por intromisión en nuestros asuntos, ha sido replicada a la enésima potencia en este Gobierno rojo. Hay cansancio uniforme…

ROJA KENIA. Tras haber sido embajador de Venezuela en Mali y Burkina Faso, el Gobierno designó a Jhony Fredy Balza embajador en Kenia. Fue en esa embajada, en Nairobi, donde asesinaron, estrangulada, a la representante diplomática de Venezuela en Kenia, Olga Fonseca. Ella tenía días de haber arribado al país para hacerse cargo de la Embajada, luego de la salida del anterior Encargado de Negocios, el embajador Gerardo Carillo Silva. Por el hecho permanece detenido el primer secretario Dwight Sagaray. Lo último que se supo de la embajadora fue una llamada a la Cancillería en Caracas pidiéndole “no le enviaran más valijas diplomáticas”. ¿Por qué? Nadie se ha dado por aludido en el Gobierno.

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NELSON BOCARANDA SARDI | EL UNIVERSAL
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martes 04 de diciembre, de 2012