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INSEGURIDAD: Las Farc mantienen secuestrados a 27 venezolanos



Así lo asegura una organización no gubernamental venezolana, según artículo del diario El Nacional.

Familiares anhelan liberación de
venezolanos cautivos de las FARC

 

Denuncian la falta de apoyo de las instituciones venezolanas.

Inicio de conversaciones en Oslo con apoyo del Gobierno genera esperanzas.

El gobierno de Chávez afirma que no hay ningún venezolano secuestrado por la guerrilla.

Piden que se trate el tema dentro de las negociaciones entre el gobierno de Colombia y las FARC.

“Ya cumplimos con un pago y diez años de pena”, expresó Luis Rosales, padre de Carlos Rosales, secuestrado en julio de 2002.

El presidente de ‘Venezuela Libre de Secuestros’, Porfirio Dávila, facilitó el domingo el listado de rehenes de las FARC a el diario ‘El Nacional’, denunciando la falta de apoyo de todas las instituciones estatales a las familias de los cautivos para investigar este hecho. “Aquí nos han fallado todas las instituciones estatales: el Ejército, la Policía, la Fiscalía, los jueces”. Explicó que la impunidad es tal que Venezuela carece de un banco de datos para cotejar la información sobre los secuestradores.

Los datos ofrecidos contradicen la versión del Gobierno de Hugo Chávez, que ha negado públicamente que haya venezolanos secuestrados por la guerrilla colombiana descartando llevar a cabo una investigación tal y como demandan las familias de los rehenes.

Dávila instó a las autoridades venezolanas que han de llevar a la mesa de negociaciones entre el Gobierno de Colombia y las FARC, en la que participan como acompañantes, el tema de los venezolanos secuestrados por la guerrilla para conseguir su liberación. “Tenemos derecho a exigir que se reconozca”.

El ex embajador venezolano en Bogotá Pável Rondón explicó que como acompañantes del proceso de paz las autoridades venezolanas no pueden introducir temas en la agenda de negociaciones entre el Gobierno de Colombia y las FARC. En cambio consideró que el diálogo de paz podría ser una ocasión única para plantear el tema de los venezolanos secuestrados en un proceso paralelo. “Quizá se podría abrir una oportunidad”.

En la misma línea, el también ex embajador Fernando Gerbasi explicó que las autoridades venezolanas no podrán plantear el asunto de forma directa, pero sí “en las conversaciones de pasillo”, especialmente cuando las negociaciones se trasladen a La Habana. “Allí se cocinarán las cosas y hay que aprovecharlo”.

Artículo completo de EL NACIONAL:

Luis Rosales no entiende por qué el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, da por ciertas las afirmaciones de los representantes de las FARC, en el sentido de que ya no tienen a personas secuestradas.

“Hay que creerles cuando dicen que no tienen en su poder a ningún secuestrado”, dijo el mandatario el 6 de septiembre.

El comerciante tachirense es el padre del venezolano Carlos Eduardo Rosales García, cautivo del grupo irregular desde el 6 de julio de 2002. En esa oportunidad, la víctima fue interceptada en la noche, cuando finalizaba el traslado del personal que laboraba en su local de comida, en San Juan de Colón.

“El Gobierno colombiano está al tanto del caso de mi hijo.

Yo fui al Gaula y luego hablé con representantes de Interpol en Bogotá. Eso fue en 2005. Les dejé fotos de mi hijo”, recordó.

Luego de negociar con los guerrilleros, Rosales pagó medio millón de bolívares en la población de Cordero. Desde entonces los captores cesaron las comunicaciones con él. A pesar de que ha transcurrido más de una década, el hombre tiene esperanza de que su hijo esté con vida.

“Ya cumplí con un pago y diez años de pena. Me dicen que está vivo y que lo tienen en Barinas. Allí le dicen el Peludo”, aseguró.

En su investigación personal, el comerciante entrevistó en la cárcel de Santa Ana a un comandante guerrillero apodado César, quien le aseguró que Carlos Rosales se identificaba como el hijo del “bombero de Colón”.

“No puede ser otro”, concluyó.

Rosales García es uno de los 27 venezolanos que estarían en poder de algún grupo irregular, de acuerdo con Porfirio Dávila, presidente de la asociación Venezuela Libre de Secuestros, formada en 2006 para generar conciencia sobre a la gravedad del delito en los estados fronterizos.

Dávila cree que el Gobierno cuenta con una excelente oportunidad para lograr la liberación de los venezolanos cautivos de ese grupo guerrillero, al ser designado como acompañante de las FARC en las conversaciones de paz que se iniciaron esta semana en Oslo, Noruega.

“Nos sentimos un poco extraños con estas conversaciones.

Nosotros nunca hemos tenido apoyo del Gobierno, a pesar de que manejamos pruebas. ¿Cómo se puede acompañar ahora a un grupo que secuestra venezolanos?”, expresó.

Añadió que los casos conocidos por la asociación tienen como factor común la ausencia de respaldo de las instituciones venezolanas.

“Insistimos en que el Gobierno primero debería dar respaldo a los familiares de los secuestrados. Aquí nos han fallado el Ejército, los cuerpos policiales, la Fiscalía y los jueces. Todas las instituciones.

Ahora estamos en el derecho de exigir que eso se reconozca”, afirmó.

Indicó que la ausencia de mecanismos para procesar este delito llega hasta el punto de que Venezuela carece de un banco de datos para procesar y comparar números telefónicos y las voces de las personas que exigen los pagos de rescates. Dijo que el Gaula colombiano sí los posee, y en ocasiones hace las diligencias correspondientes, a petición de la familia de los cautivos venezolanos.

La figura a la izq. en segundo plano es de un venezolano, víctima de reclutamiento forzado. Fue reconocido por su madre.

Cuentas pendientes:

En el Zulia, Jorge Guillanders quisiera que por lo menos algún integrante de la guerrilla colombiana le confirme si es cierto el rumor de que su padre, del mismo nombre, falleció mientras estaba en poder del Frente 59.

Guillanders padre fue interceptado por irregulares el 6 de marzo de 2006, cuando iba a gestionar un permiso para el transporte de queso. El hombre de origen argentino no podía manejar debido a una afección cardíaca, así que se movía en transportes colectivos hasta su finca, llamada La Porteña. En ese momento tenía 80 años de edad.

El caso pasó por las manos de agentes de Cicpc y del GAES, hasta que los militares detuvieron a Enrique Balmaceda, alias subcomandante Osnayder. El colombiano quedó en libertad, y la unidad de la GN suspendió las pesquisas.

“Nunca investigaron el origen de las llamadas que me hacían.

Ahora he podido saber por mi cuenta que usaban teléfonos públicos o de buhoneros. Uno de ellos estaba en la plaza de Carrasquero”, relató.

Guillanders cree que el caso de su padre fue tratado en correos electrónicos intercambiados entre miembros de la cúpula de las FARC en febrero de 2008. Estos mensajes habrían sido recuperados de las computadoras de Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes.

El frente guerrillero que plagió al ganadero sería el mismo que posteriormente se llevó al chileno Víctor Santamaría Serrano en Ciudad Ojeda.

“A su familia la llamaban de la misma forma que a mí. En mi caso, siempre fue la misma persona la que llamó. Ellos se identificaron como miembros de las FARC, pero nunca me dieron fe de vida”, recordó. 

Carmen Contreras relató que su hija María José Molina fue plagiada por las Narco-Farc en junio de 2008.

Reclutada:

En el portal colombiano www.lasvocesdelsecuestro.com Samuel Molina y Carmen Zulay Contreras relataron que su hija Mariajosé Molina fue plagiada por miembros del Ejército Popular de Liberación en junio de 2008. Los captores posteriormente “vendieron” a la joven de 18 años de edad a las FARC, supuestamente para que sirviera como enfermera.

En este caso, el testimonio viene de primera mano, pues Carmen Contreras fue cautiva con su hija y liberada poco tiempo después.

Mariajosé Molina, indicaron sus padres, “está viva y está en manos de las FARC”. “Comenzamos a exigir al Gobierno venezolano y escasamente hubo una respuesta que afirmaba la existencia de la pequeña. Sin embargo, no hubo más detalles”, añadieron en la carta divulgada por el portal.

La joven, según pesquisas efectuadas por sus familiares, estaría en un campamento guerrillero en el piedemonte de Perijá, en territorio venezolano.

Porfirio Dávila asegura que este es el último caso conocido de secuestro atribuido al grupo guerrillero que esta semana inició conversaciones en Noruega.

“Pedimos a las FARC que señale si los tiene; y si no los tiene seguramente podrán aportar información. Hay territorios muy extensos en los que ellos están, y las instituciones del Estado no”, dijo.

Observador atento:

El representante del Comité Paz y Vida por los Derechos Humanos, Oscar Pineda, afirmó que los guerrilleros colombianos tendrían por lo menos cinco rehenes que residían en Barinas cuando fueron secuestrados.

En dos de los casos las víctimas habrían sido blanco de “reclutamiento forzado”. Refirió el nombre de Wilfredo Valero Díaz, de 23 años de edad, quien desapareció en abril de 2009 y quedó retratado por casualidad en el segundo plano de la foto de una cuadrilla de las FARC divulgada por medios del país vecino.

El rostro del joven fue reconocido por su madre.

“El primer papel del Gobierno venezolano debería ser luchar por la liberación de sus ciudadanos. Al Presidente le hemos enviado seis cartas sobre el asunto. Queremos respuestas”, aseveró.

Lobby ejecutivo

El nexo entre las FARC y el Gobierno de Venezuela quedó documentado en los correos electrónicos recuperados de las computadoras de Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes. Según estos mensajes, los acercamientos se profundizaron en 2004 como consecuencia de la crisis política que se vivía en Venezuela. 

En diciembre de 2007 el Presidente designó al ex titular del MRI capitán de navío retirado Ramón Rodríguez Chacín para que sirviera de enlace entre el Ejecutivo y el grupo guerrillero, en función de las negociaciones para la liberación de rehenes. 

En enero del año siguiente Chávez solicitó públicamente que se le diera carácter de beligerante al grupo irregular. 

En marzo del año siguiente el mandatario ordenó el retiro del embajador en Bogotá, como consecuencia del bombardeo en Putumayo contra el campamento donde permanecía el canciller de las FARC. La llegada al poder en Colombia de Juan Manuel Santos propició un acercamiento entre ambos gobiernos que ha posibilitado la captura de traficantes de drogas y guerrilleros de importancia menor. Venezuela, sin embargo, aún se niega a deportar a Guillermo Torres, alias Julián Conrado, conocido como el Cantante de la organización guerrillera. 

Embajadores

No están en agenda:

Pável Rondón, ex embajador en Colombia y colaborador del centro de estudios de la Cancillería Pedro Gual, aclaró que el papel de Venezuela como acompañante no le permitirá proponer temas en la agenda de las negociaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y las FARC.

Indicó que representantes de ese grupo guerrillero, como del Ejército de Liberación Nacional, han declarado que no tienen secuestrados venezolanos. Sin embargo, señaló que de tenerse alguna evidencia sería importante enviarla al Gobierno.

“Comparto las angustias de las personas que tienen algún familiar secuestrado. Yo también fui víctima en 2003.

He presenciado reuniones de este tipo. Por eso es importante conocer el formato que seguirá. Quizá se podría abrir una oportunidad para plantear el asunto, en paralelo”, dijo.

Rondón observó que la inclusión de Venezuela en estas conversaciones, junto con Chile, fue por decisión colombiana.

“Tenemos que apostar por la paz. No porque nos afecte directamente. No podemos ser mezquinos. Pensemos en Colombia y la cantidad de vidas perdidas, en el freno al desarrollo y el gasto en el combate”, señaló.

Otro ex embajador, Fernando Gerbasi, indicó que el representante venezolano Roy Chadderton no podrá plantear el asunto de manera formal, pero sí podrá hacerlo durante las “conversaciones de pasillo”, especialmente cuando las negociaciones se trasladen a La Habana.

“Es entonces cuando se cocinarán las cosas. Si el acompañante puede tener algún papel para la liberación de los venezolanos, eso hay que aprovecharlo”, dijo.

Indicó que durante su última gestión en Colombia (19972000) nunca se habló de rehenes de las FARC, sino del ELN.


Por: JAVIER IGNACIO MAYORCA
jmayorca@el-nacional.com
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DOMINGO 21 DE OCTUBRE DE 2012