El manejo irregular de bienes
del “turco” lo señalan

■ Dan casa por cárcel a uno de los empleados de Makled.

■ TSJ radicó en Caracas juicio contra dos supuestos sicarios del capo.

■ Rafael Blanco, según fuentes del Ministerio Público habría ignorado deliberadamente que propiedades del presunto narcotraficante están a la orden de la Organización Nacional Antidrogas (ONA). La fiscalía prepara todos los recaudos para presentarlo ante los tribunales en próximas horas.

Caracas.- Este jueves fue detenido en Valencia, estado Carabobo, uno de los abogados del presunto narcotraficante, Walid Makled, por estar supuestamente vinculado a la falsificación de documentos de varias propiedades.

Los bienes del presunto narcotraficante estarían siendo objeto de acciones irregulares por parte de Rafael Blanco, quien, según fuentes del Ministerio Público (MP) habría ignorado deliberadamente que los mismos están a la orden de la Organización Nacional Antidrogas (ONA).

Se indicó que la fiscalía prepara todos los recaudos para presentarlo ante los tribunales en próximas horas. El fiscal, José Miguel Medina tiene el caso.

En la continuación del juicio a Makled, el Ministerio Público acusó en días pasados a Rafael Reales Hoyos y a Álvaro Ospino Illera, quienes fueron extraditados desde Colombia Venezuela en julio, por estar presuntamente vinculados con las muertes del veterinario Francisco Larrázabal y el periodista Orel Sambrano, ocurridas los días 5 y 16 de enero de 2009, en Valencia, estado Carabobo.

La información la suministró el despacho dirigido por Luisa Ortega Díaz en un comunicado de prensa, en el cual explicó que sus investigadores señalaron a dos supuestos sicarios, que habrían sido contratados por el supuesto narcotraficante.

Casa por cárcel:

Tras pasar cuatro años en la cárcel, José Fernando Soto, uno de los seis empleados del presunto narcotraficante Walid Makled, quienes están siendo enjuiciados junto a él, pasó ayer su primera noche junto a su familia, pues el juez 20 de Juicio de Caracas, Alí Fabricio Paredes, decidió darle casa por cárcel visto su estado de salud.

La resolución la adoptó el funcionario en la tarde de este lunes, al concluir la audiencia número 40 del proceso oral y público que se le sigue al supuesto capo, sus tres hermanos, el comerciante Erik Echegaray; y los seis trabajadores de la finca que tenía en Carabobo, donde las autoridades aseguraron haber encontrado 300 kilos de cocaína en 2008.

Soto, de 72 años de edad, tenía meses quejándose de que orinaba sangre, lo cual hizo temer que pudiera padecer de cáncer de próstata. Sin embargo, los estudios que el juez ordenó practicarle el Hospital Oncológico Padre Machado echaron por tierra esas especulaciones, pero confirmaron que la condición del campesino, a quien el Ministerio Público señala de cómplice en delitos relacionados con el tráfico de drogas, no era la mejor.

Ante este panorama Fabricio Paredes decidió enviar al procesado a casa de una hija en Palo Negro (Aragua), de donde no podrá salir más que para ir al médico cuando lo necesite y siempre acompañado por agentes de la Policía regional.

Esta es la segunda medida de este tipo que el titular del Tribunal 20 de Juicio otorga a alguno de los acusados por este caso. La primera se la dio a Alex Makled, quien se encuentra en silla de ruedas desde que hace unos años sufrió un ACV.

Testigo sospechoso:

En la audiencia de ayer sólo compareció un experto: Eliécer Aponte, exagente de la policía política y quien participó en las primeras pesquisas contra los Makled y los posteriores allanamientos a sus propiedades.

El experto reiteró lo señalado por dos colegas suyos en las sesiones de la semana pasada. Sin embargo, un momento tenso se presentó cuando el defensor privado de Makled, Rafael Blanco, le preguntó los motivos por los cuáles salió del organismo de seguridad.

Casi de inmediato las fiscales Betsy Andrade y Marisela Abreu objetaron la pregunta por impertinente y el juez les dio la razón. La defensa tenía la información de que Aponte fue destituido por estar incurso en irregularidades.

Ayer también se conoció que la Sala Penal del Tribunal Supremo ordenó la radicación en Caracas de la causa seguida contra Rafael Reales Hoyos (36) y Álvaro Ospino (25), supuestos sicarios contratados por Makled para asesinar al veterinario Francisco Larrazábal y al periodista Orel Sambrano en enero de 2009.

Por: JUAN FRANCISCO ALONSO
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EL UNIVERSAL
jueves 13 de septiembre de 2012