El golpeadillo urde la pendejera que de no
salir electo vendrán la “guerra civil”
Falta un mes para las elecciones. Los tiempos se vuelven urgencias. Sobre todo para los que no han visto sino angostarse sus caminos, y por supuesto hablamos del “candidato de la patria” y su cortejo. La mejor muestra de ese desespero es la cantidad y la magnitud de los disparates que han inventado recientemente para que el milagro de multiplicar los votos se produzca.
Para empezar, el programa de Capriles. Este lo ha predicado a voz en cuello por todos los villorrios y ciudades, por montes y llanuras del país. En él trabajaron centenares de personas, venidas de todas las comarcas ideológicas y oficios. Se difundió hasta más no poder.
Y, estamos seguros, las formulaciones inteligentes, concretas y sintéticas de éste, hechas por el candidato no solo han arrastrado esas multitudes que asombran al más escéptico sino que han puesto a sudar a los adversarios que solo saben de letanías patrioteras, reverencias al amo y que ya ni el socialismo mientan.
Para tratar de parar la avalancha se ha inventado la siguiente solución: demostraremos que todo lo que dice es mentira.
Esa cosa tan temible que conmueve a campesinos, obreros y empleados públicos, jóvenes y mujeres, es solo un espantapájaros y detrás, en las sombras, está el verdadero, un paquete tan drástico como el de Pérez II que ya sabemos lo que trajo, hasta madrugonazos felones.
Para montar la obra, vaya a saber usted porqué, se la encomendaron a uno de esos sujetos que lame la mano que lo golpea y, como segunda voz, a un diputadillo de dudosa reputación, autor de un libro famoso. Ellos encontraron la piedra filosofal, el documento donde constan todas las perversiones antipopulares ocultas del indetenible peregrino tricolor.
Pero inmediatamente, todos a una, encabezados por Chaco, empezaron en coro a repetir la triste conseja. Qué se puede hacer, continúen la función. Pero, de paso, no olviden que, como se demostró en estos días en un acto muy sui generis, nadie en la historia venezolana ha dicho más mentiras, falsas promesas y ocultado realidades que el gobierno que el destino nos deparó desde 1998.
De manera que si de credibilidad se trata… Notable es también la solicitud de que se den los resultados del simulacro electoral, convocado por el CNE con la firme promesa de que éstos no se darían y que se trataba de un inodoro chequeo de los procedimientos del 7-0.
Pues los “patriotas” dicen que ganaron y es imaginable que hasta sea verdad, la movida comienza allí, movilizando socarronamente sus huestes para luego hacer la insólita petición; por boca de Chacu nuevamente y con documento y todo ante los rectores.
No podía haber tanta bajeza moral en las rectoras y no la hubo, por mal que algunos hablen de ellas. Aquí lo importante es hacer notar que hay que estar bien golpeadillo para urdir semejante pendejera. Y, seguramente lo más grave: las amenazas impúdicas que solo Chacu salva y que de no salir electo vendrán guerras civiles, caos y anarquía…sangre y muerte, pues.
Después que usted oye tales cosas, dichas con saña, se supone que debe decirse “oye, mejor dejar este lunático, lo otro es guatepeor”. Pero nosotros suponemos otra conclusión, opuesta, “de éste hay que salir y rápido”.
Por: Fernando Rodríguez
Diario TalCual