Manejo comunicacional del
siniestro ha sido errático
■ Frases del Presidente revelan poca empatía.
■ El pesimismo causado por sucesivas tragedias puede provocar abstención en el chavismo.
■ Mariana Bacalao afirmo que los venezolanos quieren que Chávez deje de lado ser candidato y atienda la emergencia como presidente.
Hugo Chávez, Stella Lugo, Rafael Ramírez, Elías Jaua, Luisa Ortega Díaz, Diosdado Cabello, Eugenia Sader, el director de Seguridad Industrial de Pdvsa, dirigentes del sindicato de trabajadores de la empresa estatal, el alcalde de Los Taques y el gerente del Centro de Refinación de Paraguaná son sólo algunos de los voceros que desde el sábado en la madrugada han ofrecido información sobre la tragedia que enluta al país.
Desde el día del siniestro, esos y otros funcionados del Gobierno se han contradicho sobre datos como el número y nombre de los fallecidos, la posibilidad de una nueva explosión, la magnitud de los daños, el reinicio de las operaciones de la refinería o la existencia de personas desaparecidas.
Mariana Bacalao, especialista en opinión pública y profesora de la UCV y de la UCAB, señaló que lo primero que debió hacer el Estado era unificar su mensaje y vocería.
“El Gobierno necesita una comunicación más fluida.
Además de cuestionar si hubo o no fuga de gas, hemos visto al vicepresidente informar de una tercera explosión de la que el Presidente no estaba enterado; al presidente Chávez, desmentir a una periodista que le consulta sobre versiones dadas por la comunidad. Vimos a la gobernadora dar una cifra de víctimas y la fiscal, otra cifra.
Toda esa situación causa zozobra porque la gente no sabe a quien creerle”, advirtió.
Eso, sin contar el uso de algunas expresiones como “la función debe continuar”, “canta y no llores” o “yo salí más fuerte de la candela esa”, que fueron empleadas en los últimos días por el Presidente y que han recibido fuerte crítica por considerarlas irrespetuosas del dolor ajeno.
Luis Vicente León, analista de opinión pública, explicó que toda crisis tiene dos etapas. En la primera lo importante para los afectados es tener atención inmediata, mientras las causas de la crisis y los responsables pasan a un segundo plano. “La primera fase es la del duelo, la de la atención de los heridos, la identificación de los fallecidos, la extinción del incendio, y el Gobierno lo ha hecho correctamente”, dijo. Sin embargo, observó que en materia comunicacional el Gobierno ha minimizado la información sobre los daños causados por el desastre y se ha concentrado en la comunicar cómo se le hace frente al desastre.
La segunda etapa es la del control de daños, en la que el Gobierno deberá gestionar la información que surja de las investigaciones con un cuidado tal que garantice la aplicación de la justicia y al mismo tiempo no lo salpique de responsabilidades. “En la segunda fase la sociedad pasa del duelo a la exigencia de responsabilidades. Allí la oposición podría cumplir su papel político y canalizar ese requerimiento”, indicó León.
La campaña:
En período de campaña electoral, todo accidente o tragedia afecta las decisiones de los electores.
El asesor de mercadeo político Gabriel Reyes sostuvo que Amuay es el colofón de una serie de desastres que han sembrado pesimismo en la gente. “El pesimismo es un disparador de la abstención. Es muy difícil que un chavista vote por Capriles, pero el chavista light analiza la respuesta ante la crisis y puede cuestionar su fidelidad a Chávez, lo que podría llevarlo a no votar”.
Luis Vicente León dijo que el duelo nacional perjudicó la campaña de Carriles, quien se vio obligado a parar su intensa agenda, mientras Chávez se mantiene en los medios de comunicación.
Autoritario:
Mariana Bacalao informó que un estudio cualitativo en caliente realizado por la firma MejoKóji Consultores midió entre domingo y lunes, la valoración del manejo de la crisis. Fueron abordadas personas de 25 a 40 años y más, políticamente indecisos y chavistas.
“El estudio arrojó que la gente percibe que en las actuaciones de Chávez predomina su condición de candidato por encima de la Presidente. Los ciudadanos quieren que Chávez deje lacampaña un rato y se aboque a la crisis como jefe de Estado. No quieren un discurso, lo quieren allí al frente de la solución”.
Por: MARU MORALES
mmoralesp@el-nacional.com
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EL NACIONAL
MIÉRCOLES 29 DE AGOSTO DE 2012
