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MARIANELLA SALAZAR: Aquelarre farisaico




Artillería de Oficio


Nicolás Maduro y Roy Chaderton pertenecen a la misma raza de fariseos de su amo y señor, Hugo Chávez.

Basta escuchar sus argumentaciones con voces destempladas en la Unasur y en la OEA defendiendo el asilo otorgado por Ecuador al fundador de Wikileaks, Julian Assange, y buscando camorra contra el Reino Unido para hacer uso de la memoria. Ambos ministros, junto con el cerebro dañado que los dirige, están dando una demostración de la hipocresía desvergonzada que preside la política venezolana. No pierden oportunidad para rasgarse las vestiduras, esta vez con el caso Assange, y lo hacen con tal cinismo y caradurismo que produce desasosiego.

Si hay un gobierno que ha violentado los mínimos conceptos del derecho de asilo es el de Hugo Chávez, como hizo en el caso del ex dirigente juvenil de la Universidad de los Andes Nixon Moreno, que se asiló en la Nunciatura Apostólica, donde permaneció dos años, y a quien le negaron el salvoconducto para salir del país. Moreno tuvo que fugarse de la Nunciatura porque su vida corría peligro.

La embajada fue atacada por los brazos paramilitares que apoyan al Gobierno, por lo menos, alrededor de diez veces, y los jardines de la sede diplomática estaban permanentemente envueltos por el humo de las bombas lacrimógenas. La Nunciatura fue víctima de ataques terroristas de esos “colectivos”, que son parte del llamado “proceso”, que fueron entrenados para crear miedo. Esos atentados fueron una violación de la Convención de Viena.

Al contrario, la Embajada del Ecuador en Londres ha tenido el respeto y la protección de los ingleses, incluso Assange se ha asomado al balcón de la embajada y ha ofrecido ruedas de prensa sin que lo impida la policía británica.

Si Nixon Moreno se hubiera asomado a la ventana de la Nunciatura, con toda seguridad no iba a recibir de los colectivos violentos una piedrita lanzada con una china, lo mínimo hubiera sido un bombazo.

El líder de la ULA tuvo una gran influencia entre la población estudiantil en Mérida, su gran rival siempre fue Tareck el Aissami, a quien derrotó varias veces. Después de los sucesos violentos escenificados en la ULA, que culminaron con una acusación inverosímil contra Moreno de supuesta violación de una agente policial, El Aissami fue designado viceministro de Relaciones Interiores y, posteriormente, ministro.

Desde esa posición logró condenar sin fórmula de juicio al perseguido político, que obtuvo asilo en Perú y Panamá.

Similitudes:

Julián Assange también es acusado de supuestos delitos sexuales en Suecia, con la diferencia de que en ese país sí existe independencia de los poderes públicos, lo cual es una garantía para sus derechos, y que el primer ministro sueco no ha salido a despotricar, como un loco furioso, contra el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, porque concedió el asilo, como hizo el presidente Chávez contra su santidad el Papa y el Vaticano, a los que amenazó con revisar la Ley de Concordato Eclesiástico, que regula las relaciones Venezuela-Iglesia Católica.

La Asamblea Nacional también discutió en plenaria el asilo concedido por la Santa Sede, exigió rescindirlo y les conminó a entregar a la justicia al dirigente estudiantil bajo su protección. Ahora vienen estos fariseos de los Maduro, los Chaderton y demás ejemplares de la misma especie a alegar lo contrario de lo que sostuvieron con tanta vehemencia en el pasado, cuando Ecuador está haciendo exactamente lo mismo que en su oportunidad hizo el Vaticano. Pero hacen como que se les olvidó, para sacar partido electoralmente. Raza de fariseos.


Por: MARIANELLA SALAZAR
msalazar@cantv.net
Política | Opinión
EL NACIONAL