26.7 C
Caracas
Thursday, November 21, 2024
HomeÚltimas NoticiasVenezuela: El Flaco lució ganancioso

Venezuela: El Flaco lució ganancioso



Oeste de la ciudad acompañó a Capriles en multitudinaria marcha.

Henrique Capriles desfilo por donde hace
pocos años ni soñábamos en caminar

 

A menos que se hayan escondido junto con sus carteles, ofensas y banderas, el domingo percibimos a un Capriles ganancioso por los antiguos comederos del presidente-comandante.

Confieso que al llegar a la estación de Artigas, a las 10 y cuarto de la mañana, me sentía preocupado por la posibilidad de que la marcha convocada por el Comando Venezuela no tuviera la misma asistencia y fulgor que tuvieron las anteriores, o las que vemos a diario en el interior. Ya al pasar por la avenida Francisco de Miranda, en Chacao, y llegar a la Plaza Brion de Chacaíto, donde abordamos el Metro hacia la San Martín, nos encontramos con un número de marchistas opositores bastante inferior a los usuales. Además, la marcha me pareció un poco apresurada, percibida como una respuesta al atropello policial sufrido el pasado domingo en la Vega.
Esperamos más de hora y media bajo un sol brillante, entre la calidez de tantos buenos amigos con quienes hemos pateado toda Caracas desde el 2000. Allí supimos que había varios lugares de concentración en toda la San Martín e incluso en el propio lugar de llegada, el Parque Central. Así que cuando comenzó aquello, con el paso casi al trote de distintos grupos que rodeaban a los dirigentes y candidatos: un grupo primero con Ismael García, luego Julio Borges, luego Ledezma, seguido por Leopoldo López y luego el más numeroso, atronador y veloz, donde apenas pudimos ver al flaco Capriles rodeado de centenas de personas que querían saludarlo, tocarlo siquiera.

Frente a la Maternidad hay una pasarela que atraviesa la avenida, allí subimos para otear a este y oeste, junto a decenas de otros marchistas. Finalmente suspiré tranquilo: de nuevo teníamos una marcha enorme, con suficiente dignidad para su apresurada convocatoria y en particular para no haber contado con el refuerzo poderoso que le dan los centenares de miles que tienen 13 años viniendo del este de Caracas y con muy escaso apoyo de autobuses del interior.

Lo más alentador fue el largo trayecto por una de las zonas más chavistas de Caracas, donde hace pocos años ni soñaríamos con desfilar los -por ellos llamados- escuálidos sin recibir rechiflas y soportar miles de orgullosas banderas rojas ondear en las ventanas de los edificios. Los humillantes –por su número- emblemas rojos desaparecieron de las avenidas San Martín y Lecuna; esta vez lucieron en aplastante minoría respecto de los afiches del Flaco, enarbolados con alegría por vecinos de todas las edades. En los bloques de El Silencio esto resultó particularmente emocionante. Y a la altura de Capuchinos un grupo de no más de 60 chavistas, guarecidos tras una cifra de poli-nacionales que francamente los duplicaba, nos gritaba improperios que más parecían pastillas calmantes para su propia desesperación.

En la tarima del Parque Central, el discurso de Capriles dejó a todos enteramente satisfechos. Ni tan largo ni tan breve, pero lleno de fuerza y emoción, desgranó todos los temas que la Caracas popular tiene interés en escuchar. Y lo hizo con propiedad y convicción.

En fin, no sé de donde sacan las encuestadoras esas intenciones de voto chavistas. A menos que se hayan escondido junto con sus carteles, ofensas y banderas, como parte de una de las rocambolescas tácticas propias del Coyote, este domingo percibimos a un Henrique Capriles ganancioso por los antiguos comederos del presidente-comandante.


Por: THAELMAN URGELLES
Politica | Opinión
Oficialismo | Psuv
El Diario de Caracas
@TUrgelles | @ElPoliticoWeb