Todavía hay muchas personas que
dudan de la gravedad de Chávez
Es más: Todos hemos pasado por eso. Yo mantengo que su real enfermedad está en los gravísimos desórdenes de personalidad que lo aquejan, instalados en su siquis mucho ántes que el cáncer que desde hace un año aparece y desaparece según los intereses del momento.
Si todo esto es cierto o no, si es una farsa creada por “los Castro como arma fundamental para mantener viva la emoción” con Chávez o si como las conjeturas provocadas por la desinformación dicen que ya es metástasis total o afirma el mismo “que se está recuperando”, o sea, como sea que sea este cuento “del gallo pelón”, Chávez pierde.
Ver como se desmorona en estas últimas imágenes no acepta duda alguna del más descreido.
No es ese rostro verdoso, hinchado, no son estos ojos que parecen rayitas ni el cuerpo extraño ni los dientes que no están y extraña en ese descuido que es el mismo de los zapatos sucios y viejos . Es lo que dice, lo que hace…
Hay una foto de él hablando con el rector Vicente Díaz que es implacable. Como implacables fueron aquellos videos de la gente dejándolo solo mientras hablaba después del “concierto llanero” ofrecido en el CNE. Se escuchaba la voz con la mismita cartilla de siempre y los grupos pasaban frente a las cámaras conversando entre si, riéndose, sin voltear a ver de donde salía aquella voz con la que hasta hace muy poco los puños se alzaban desafiantes ante la incitación constante al odio y la venganza.
La caminata de Capriles había hecho su efecto y se convirtió en una referencia sólida, irrebatible que no pudieron ignorar los “comandos” ni los “patrulleros” ni los “patriotas” ni los “psuvistas” ni el “polo patriótico” ni los arrebatados partidos “PPT Y Podemos ni la caricatura del Partido Comunista…ni Chávez.
Ante una Venezuela agotada de un año de ausencias, amenazas, alienaciones histéricas convocando a lo más extremo de la lástima, expropiaciones, desempleo, corrupción allí, desde la puerta de cualquier ente público hasta la misma oficina ministerial, del alto costo de la vida, de la inseguridad, la falta de agua y de electricidad, de las vías destrozadas y lo abusos,de los insultos y las amenazas, de las alianzas con asesinos, de la sociedad obscura con dictadores armados con la “espada” de Bolivar, tras catorce años de esta pesadilla y esta desigual lucha por derechos y principios, Capriles Radonski sigue metiéndose en el corazón de Venezuela, moderno, vigoroso, directo.
Chávez no sabe cómo detenerlo.
Y entonces se desnuda ante Venezuela en su desesperación, en el miedo porque no le es fácil que este muchacho “hijito de papá y mamá” detenga el trote. Se fortalece Capriles en su relación humana con el pais, es fresco, transparente, desafiante.
¿Y qué decide Chávez? Encadenarse por horas y horas con el mismo discurso, el que hizo irse a la gente tarifada y con franelas rojas. Desaforado, titubeante, sumando mal, incoherente, encadena con militares sumisos retando con aviones “sin piloto” y municiones hechas aquí, vociferando por una “potencia” y la “humanidad” que quiere salvar.
Caprles refutó el abuso, la violación constitucional. Lo retó en vivo, arrastrando cientos de miles de zulianos en la voz reclamante.” El futuro no se parece a esto”. No. Esa cadena tiene que ser el pasado . Y frente a la multitud, desde el Zulia, reafirmó: “aquí hay paticas pa´caminar”. El camino. Que es cada uno.
Como escribía Luis Beltrán Prieto.
Por: Isa Dobles
Politica | Opinión
Domingo 10 de Junio, 2012