“Un poquito de “melao”
y chispa humorística”
“El humorista y ex candidato presidencial venezolano en 2006 Benjamín Rausseo, “Er Conde del Guácharo”, rechazó la petición a Chávez y le pide demostrar que no es clon cubano”.
Cuando comenzó la música a anunciar la cadena nacional e inmediatamente apareció el Presidente reunido con sus ministros en el salón Néstor Kitchner del Palacio de Gobierno, Benjamín Rausseo arrugó la boca y exclamó una frase que le salió del corazón, expresando su obstinación por el abuso mediático.
Sin embargo, estaba atento a lo que se decía, porque siempre se saca algo bueno, que de alguna manera retoma en sus presentaciones, vestido de su personaje “Er Conde del Guácharo” y mal que bien, le permiten –las alocuciones de Chávez- mantenerse actualizado con su público y decir algo que luego comparte entre risas y el humor de la gente…Entonces, Benjamín considera que escuchar a Chávez es parte de su trabajo, como suele suceder desde los tiempos de Don Leoncio Martínez y Job Pim, entre otros, que con humor e inteligencia criticaban al dictador de turno o al asunto, que por alguna razón necesitara de una observación “contralora y de denuncia”, así se ganaran un carcelazo.
¿Qué se iba a imaginar Benjamín, que el Presidente lo sacaría de su tranquilidad esa tarde, cuando este lo invitó a participar en la campaña electoral?
No se le hubiese ocurrido nunca semejante cosa. Inmediatamente, comenzó a teclear y transcribió un mensaje vía twetter, donde decía que lamentablemente no participaría en las elecciones presidenciales, porque estaba muy ocupado en la producción de su próxima película titulada “El Conde Bond”.
De esa manera, la guasa del presidente fue convertida con la velocidad del rayo en una breve propaganda en cadena nacional de lo que estaba haciendo para su público. “No está mal” -pensó el hombre de la realeza autóctona-.
El presidente estaba menospreciando al candidato Capriles Radonski –asunto que es parte de su rutina-, tildándole de aburrido, vacío, bobo, etc. y que prefería competir con el abogado-humorista, pero Benjamín le ganó la mano en 15 segundos de velocidad mental.
Posteriormente, el Presidente siguió insistiendo para que “Er Conde” lo pensara bien y se decidiera a participar en las elecciones, cosa de que despertara algo de interés en el proceso y le añadiera humor e inteligencia a la contienda, en clara alusión contra Capriles.
“No es de extrañarme dice mi prima Isabel Mejías Raposo-, que algún hombre con camisa roja y de maletín, visite a Benjamín, para tratar de convencerlo en participar, allanándole el camino de los gastos que genera una actividad electoral, solo para burlarse del candidato Capriles…y tal vez quitarle unos votos”.
Pero, con todo lo avispado que es Er Conde, yo dudo que se preste a semejante cosa. Finalmente, el presidente señaló en su “interesante” cadena nacional dedicada al ataque contra el candidato de la oposición, que “primero caminaría Tarzán y la mona Chita por la Plaza Caracas, antes que Capriles ganara la contienda”.
Evidentemente, no se necesita ser un creativo aventajado y lúcido, para preparar una parodia con los dos personajes cinematográficos durante la presentación de Capriles en la Plaza Caracas, cuando se inscriba como candidato ante el CNE, emulando al Conde del Guácharo, que no lo pensó dos veces para promocionar su película: Tiene sentido ver a Tarzán y a la mona Chita caminando por la Plaza Caracas, entre una multitud de gente entusiasta, devolviendo la factura y dando inicio a un contragolpe que marque el paso de la campaña y le de un poquito de “melao” y chispa humorística. Yo estaré allí con mi cámara por si acaso sale un creativo y entonces recogeré el momento como si fuera unapropaganda de Kodak, como cuando yo era feliz y no lo sabía.