“Solo sabrá Dios quien
se coma sus entrañas..”
El actual estado físico del presidente venezolano, enterado por este y desconocido también por ausencia de autoridad científica, ha reverdecido en viejos y no tan antiguos aspirantes a la presidencia de la república la ilusión de ser ellos quienes conduzcan al país a la muerte del mandatario barinés. Al destacar en este párrafo la ausencia de un vocero médico que informe a la opinión pública sistemáticamente sobre el diagnóstico, tratamiento y evolución del mal; nos obliga a pensar en la posibilidad que el padecimiento crítico sea un cuento electoral.
Los agazapados pretendientes quienes han brindado loas al triunfador de la primaria Henrique Capriles en el pasado, no desperdician la oportunidad para exponer en conciliábulos citadinos y mediante aliñado análisis unas supuestas fallas del joven candidato, con la clara intención de minimizar el ánimo de sus seguidores. Se cuidan estos juglares del mal no denigrar del abanderado de la oposición utilizando siempre expresiones que no lo anulen pero lo limiten tales como “esta muy joven”, “le falta burdel”, “Venezuela necesita un operador político”, “no creo que le gane a Chávez”.
Creen los indicados que una vez muerto Chávez el país regresa automáticamente a la independencia de los poderes, la meritocracia y el régimen de libertades. Luego del funeral no habría entonces necesidad de una candidatura unitaria como tampoco sacrificar el liderazgo demostrado de los dirigentes de partidos.
Algunos de los participantes en la escogencia previa continúan su trabajo acariciando el relevo constitucional pero honrando todos los compromisos asumidos. Según el discurso de quienes pretenden buscar otra vía de participación, estará en plena vigencia la representación histórica de las organizaciones de base.
Decidimos salir del barinés pacíficamente a través de las urnas del sufragio. Ello implica respeto por las leyes y decretos conforme a la constitución en vigor. Al ganar Capriles debemos enfrentarnos al despojo de este gobierno y abocarnos a conseguir vías de entendimiento en pactos puntuales de gobernabilidad, sin compromiso de impunidad, que nos permita reconducir la acción de tutela. Capriles Radonski tendrá el parlamento en contra, los tribunales de justicia soslayados, el Defensor del pueblo y Fiscal rojo-rojitos. Con esta realidad habrá que convivir y utilizando lo expresado en la Constitución nacional, cumplir los lapsos de su enunciado para la creación de leyes que abran nuevos espacios de vida pluralista dentro de la sociedad en organizaciones existentes o por crear. Para todo ello se necesita un líder y este ya fue escogido. Dejemos que los Cabello, Maduro y sabrá Dios quien más se coma sus entrañas.
Para quienes critican al paladín de la oposición por la ausencia de un lenguaje y mensaje más combativo, mientras observamos a un adversario en sus esporádicas apariciones violento y descalificador; debo expresar que me invade el mismo ánimo, pero hay que tener paciencia. En mí es producto de los años de menosprecio que este gobierno siente por los venezolanos, a quienes nos quieren empobrecer para luego someternos y brindarnos al mejor postor.
Capriles no debe hacer antes lo que en su momento tiene que llevar a cabo y la fecha es cuando la campaña electoral se inicie. Mientras, mostrarse en el país en vivo a diario y recorrer veredas y caminos en contraposición de un candidato con limitaciones físicas que no le permiten dejarse ver en público consecuentemente por encontrarse cada vez más cerca de la evaluación médica de una comisión científica de ley para determinar si está en capacidad de continuar gobernando el territorio; es lo más indicado. A partir de junio 10 la cosa será diferente.
En mi columna anterior les informé acerca del establecimiento de una comisión de buenos oficios por residentes de Florida para buscar vías de entendimiento con el CNE y lograr sufragar. La organización VEPPEX sustentó oportunamente la iniciativa. MUD de Miami, creyéndose rebasada por la sociedad civil, anunció presurosa a unos miembros de su seno a querellarse con el ente rector y protestar la ausencia de la mesa electoral al sur de EEUU. Teniendo aliados de demostrada buena voluntad hacia las colonias venezolanas en el CNE, no veo la razón del disgusto a ejecutar ya que en el pasado nada nos aportó. De todas formas hay que apelar a todos los recursos que la ley nos otorga incluso el reclamo, pero oportuno. Esperemos el resultado de ambas iniciativas, la original y la de la MUD. Otras nuevas vendrán.
A quienes aspiran a destiempo, les sugiero detener tales elucubraciones y sumarse a la unidad. Pero si la ambición no les permite reflexionar, les pido que eviten a sus descendientes el bochorno cuando al enunciarlos como candidato, alguien les observe: ¿Quién el traidor?
* MANUEL CORAO: Director de Venenoticias.